Shirin Ebadi se niega a cumplir con una citación del Tribunal Revolucionario
El presidente Jatami garantiza la seguridad de la premio Nobel de la Paz
La abogada iraní Shirin Ebadi, premio Nobel de la Paz en 2003, ha reiterado hoy que no cumplirá con una citación del Tribunal Revolucionario, controlado por el ala más dura del régimen de los ayatolás, a pesar de que esta negativa pueda suponerle la cárcel. De esta forma, Ebadi, de 57 años, ha retado al organismo judicial que ya ha condenado a buen número de intelectuales del país. La citación fue remitida el miércoles y ordena su comparecencia dentro de tres días, que se cumplen hoy.
Ebadi, la primera mujer musulmana en lograr el Nobel de la Paz, recibió el pasado miércoles la citación. "No sé cuáles son los motivos de esta citación, porque todas mis actividades son legales. En la convocatoria, simplemente se precisa que debo presentarme ante la justicia en un plazo máximo de tres días y que, en caso de que no lo haga, seré detenida", ha explicado Ebadi. "Una citación debe especificar el motivo. Una citación a alguien que no especifique la razón y el asunto es ilegal. No iré al tribunal", ha asegurado Ebadi, que se ha erigido en faro para cientos de millones de mujeres del mundo islámico y en foco de las iras y las amenazas de los clérigos más conservadores, tanto dentro como fuera de Irán.
Creados después de la revolución islámica de 1979, los tribunales revolucionarios se ocupan de los delitos contra la seguridad nacional y han enviado a prisión a numerosos disidentes. La concesión del Premio Nobel a esta jurista fue muy mal recibida por los sectores más duros del régimen de los ayatolás, que llegaron a hablar de "complot sionista". Uno de los tres abogados que representarán a la Nobel si es imputada, Mohammad Ali Dadkhah, ha reconocido que el Tribunal Revolucionario podría arrestarla por haber contradicho el orden. A pesar de que se desconoce el motivo de la citación, Dadkhah ha indicado que respondía a una petición para declarar como testigo y no como imputada.
Las críticas de Jatami a EE UU
La citación fue remitida el miércoles y ordena su comparecencia dentro de tres días, esto es, hoy sábado. Aunque nunca ha llegado a entrar en política, Ebadi se ha ocupado de asuntos muy delicados, como la defensa de la familia de la periodista canadiense, de origen iraní, Zahra Kazemi, muerta en prisión en Teherán tras haber sido golpeada en la cabeza. En defensa de Ebadi, el Departamento de Estado estadounidense señaló el miércoles que las continuas persecuciones y arrestos de los que proponen la moderación, el pluralismo y las reformas políticas son una clara violación de los derechos humanos.
Entretanto, el presidente de Irán, el moderado Mohamed Jatami, se ha comprometido hoy en Senegal a garantizar la seguridad de la activista iraní. En una rueda de prensa celebrada en Dakar, poco antes de abandonar suelo senegalés tras una visita oficial de tres días al frente de una delegación de 70 personas que incluye tres ministros, Jatami ha señalado: "Como Jefe de Estado soy garante de la seguridad y de la libertad de Ebadi en su trabajo". "De todas formas, Ebadi es una excelente abogada y es capaz de defenderse por sí misma ante los tribunales", ha añadido Jatami, quien ha rechazado la declaración de EE UU.
"Ese país no puede hablar de los derechos humanos", ha opinado el mandatario iraní al resaltar que el Gobierno de Washington es responsable de graves violaciones en la prisión iraquí de Abu Ghraib. "En nombre de la libertad y de la democracia, Estados Unidos ha cometido en el mundo graves brutalidades y crímenes", ha añadido Jatami, quien ha recordado el caso de Guantánamo, que considera gravísimo.
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