La Casa Blanca ofrecerá información clasificada a la comisión que estudia los atentados del 11-S
El presidente Bush no quería divulgar los documentos que le envió la CIA
La comisión independiente que investiga los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos anunció ayer que ya ha alcanzado un acuerdo con la Casa Blanca para estudiar la información clasificada que el presidente George W. Bush no quería divulgar.
Ante la negativa de Bush, Thomas Kean, ex gobernador de Nueva Jersey que dirige la comisión, había amenazado con solicitar los documentos clasificados por vía judicial, algo que ha quedado descartado tras el acuerdo alcanzado con el Gobierno. La comisión, que investiga porqué los servicios secretos estadounidenses no lograron frustrar los atentados contra las Torres Gemelas y el Pentágono, quiere acceder a los informes diarios enviados al presidente por la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
La amenaza de una batalla legal ya hizo que el mes pasado el Pentágono entregara los registros reclamados por los investigadores mediante una citación judicial. La comisión también empleó el mismo mecanismo para solicitar varios documentos a la Administración Federal de Aviación (FAA).
Los investigadores buscan aclarar las discrepancias respecto al momento exacto en que la FAA notificó al sistema de defensa aéreo que cuatro aviones comerciales habían sido secuestrados. Los aviones militares que despegaron con urgencia entonces no llegaron a tiempo de interceptar las aeronaves secuestrados antes de que se estrellaran contra las Torres Gemelas en Nueva York, el Pentágono en Washington y un campo en Pennsylvania, causando la muerte de más de 3.000 personas.
