Los incendios se cobran 20 vidas y reducen a cenizas cerca de 250.000 hectáreas en California

Al menos 20 personas, entre ellas un bombero, han perdido la vida en California a causa de los devastadores incendios que asuelan ese Estado norteamericano desde hace más de una semana, según fuentes oficiales. Cerca de 12.000 bomberos luchan contra el fuego, que se extiende sin control desde la frontera mexicana hasta Los Ángeles y ha consumido ya casi 250.000 hectáreas, una superficie tres veces mayor que la ciudad de Nueva York.

Un bombero falleció y otros dos resultaron gravemente heridos cuando luchaban contra el fuego en las proximidades de la ciudad de San Diego, al sur del Estado, donde 93.600 hectáreas han quedado reducidas a cenizas. Además, otra persona ha sido hallada carbonizada en el interior de una casa de esa ciudad que ha resultado destruida por las llamas.

100.000 personas evacuadas

Estas muertes elevan a 20 el número de víctimas de los 17 incendios que asuelan la zona desde hace ocho días. De ellas, 14 han muerto en San Diego, cuatro en el condado de San Bernardino (80 kilómetros al este de Los Angeles) y dos en México, lugar de origen del fuego. Además, más de 2.000 casas han resultado destruidas por las llamas, y 100.000 personas han tenido que trasladarse a refugios por esta causa o por estar en peligro sus viviendas.

El gobernador electo de California, Arnold Schwarzenegger, se encuentra en Washington para recaudar fondos para hacer frente a la catástrofe, que sólo en costes de extinción superará los dos mil millones de dólares.

Por si fuera poco, dos pequeños terremotos han sacudido el área de Simi Valley, uno de los principales frentes del fuego. Los seísmos, de fuerza 2,8 y 3,7 en la escala abierta de Richter, no han causado daños ni víctimas, pero han alimentado la creencia popular nunca probada de que los cálidos vientos de Santa Ana, que ahora están avivando las llamas, son la señal de que se aproxima un terremoto.