Estados Unidos y la Cruz Roja llegan a un acuerdo para acabar con el caos en Bagdad

Las críticas a la pasividad del Ejército estadounidense por hacer la vista gorda durante los saqueos que asolan Bagdad desde el miércoles, cuando la ciudad quedó sin autoridad por el desplome del régimen de Sadam Husein, han obligado a Estados Unidos a variar su actitud. Representantes del Comité Internacional de la Cruz Roja y oficiales de los marines han llegado hoy a un acuerdo para restaurar la ley y el orden en la capital iraquí, según han informado fuentes de la organización internacional.

A través de un comité civil-militar con una importante presencia de organizaciones humanitarias y dirigido por el teniente coronel Peter Zarcone, se ha empezado ya a contactar con profesionales iraquíes, como ingenieros o doctores, para organizar la reconstrucción de Bagdad y por extensión, de todo el país. Entre las primeras tareas están la de restablecer los servicios de electricidad, agua, teléfono, televisión y otros básicos para la población, ha dicho el portavoz del comité, capitán Arnoux Abraham.

El comité también se encargará de volver a hacer operativos los servicios de policía, sanitarios etc, para terminar con el caos que reina en Bagdad y en otras ciudades iraquíes, donde grupos de habitantes se han lanzado al saqueo y los ladrones campan a sus anchas. Para todo ello, el comité ha contactado con organizaciones no gubernamentales como Médicos sin Fronteras o la Cruz Roja, entre otras, con el fin de obtener listados de profesionales iraquíes. "Es un trabajo ingente, pues hay que ir a buscarlos a sus casas, algunos no están o no quieren colaborar con las nuevas autoridades, entre otros problemas", ha dicho el portavoz.

25 heridos en los saqueos

El acuerdo permite también a los soldados desplegarse en varios distritos de la capital para detener los saqueos y los asaltos a comercios y edificios públicos. Esta misma mañana, la paciencia de los comerciantes ante el pillaje se ha terminado. Algunos de ellos han abierto fuego contra grupos de saqueadores, según ha constatado un periodista de la agencia AFP. Según esta fuente, al menos 25 personas han resultado heridas en los incidentes. Por lo demás, la ciudad permanece en aparente calma, después de una noche en la que se han podido escuchar algunas explosiones y tiroteos en los barrios del sudeste.

El Ejército estadounidense ha tenido que hacer frente esta mañana a un terrorista suicida que ha sido abatido cuando se disponía a perpetrar un atentado, según ha informado la cadena CNN. Ayer en uno de estos atentados murió un soldado estadounidense y tres resultaron gravemente heridos. El fuego provocado por los combates que de forma esporádica aún se producen en la capital o por los saqueos han afectado durante la noche a por lo menos cinco ministerios y un mercado. Ni siquiera los hospitales han escapado a la rapiña. "Bagdad sigue siendo un lugar peligroso", ha reconocido un oficial estadounidense destacado en la capital.

Ante este panorama muchos ciudadanos expresan su indignación por la pasividad de las tropas aliadas. "Han ocupado nuestro país pero son incapaces de defendernos", aseguraba Mahdi Al Shumari, uno de los comerciantes del centro Al Rasafi, recalcando que el Ejército sólo defiende "el petróleo, la Cruz Roja y los palacios presidenciales".