Irak rechaza reanudar el programa 'Petróleo por alimentos' de la ONU

El Gobierno iraquí no acepta la nueva resolución de Naciones Unidas para reanudar el programa humanitario 'Petróleo por Alimentos' aprobado ayer por el Consejo de Seguridad. Este programa quedó suspendido horas antes del primer ataque y de él depende el 60% de la población iraquí.

"Sólo Irak puede manejar ese programa", ha asegurado hoy el ministro de Información iraquí. Sahaf ha señalado, durante su habitual rueda de prensa, que aquellas decisiones que no ratifica el Gobierno iraquí "no pueden ser aplicadas".

La ONU solicitó ayer 2.200 millones de dólares para hacer frente a la grave situación de la población iraquí en los próximos seis meses y el Consejo de Seguridad dispuso la reanudación del programa 'Petróleo a cambio de alimentos'.

El dinero que pidió la organización serviría para adquirir la ayuda necesaria hasta finales de agosto e incluye una partida de 1.300 millones de dólares sólo para comida.

Unidos tras la brecha

Con las graves divergencias sobre la guerra de Irak, el Consejo de Seguridad consiguió ayer volver a la unidad, olvidando por unas horas las tres semanas de intensos debates entre los quince miembros del Consejo.

A través de este programa de la ONU se controla la venta de crudo y la entrada de suministros en un país que está sometido a un embargo internacional. En los últimos años, 'Petróleo por alimentos' ha permitido la compra por parte de Irak de bienes de primera necesidad a través de los ingresos obtenidos con la venta de petróleo.

De cualquier forma, los miembros del Consejo han eliminado los puntos más conflictivos del programa humanitario para poder lograr el consenso. Así, el secretario general, Kofi Annan, será quien tenga la capacidad -durante los 45 días de vigencia de la resolución- para establecer los puntos alternativos de entrega de los productos, negociar ajustes en los pedidos y revisar los contratos pendientes de ejecución.