El lanzamiento de mil paracaidistas de EE UU en el Kurdistán abre el frente norte de la guerra

La llegada de unos mil paracaidistas ha abierto el frente norte de la guerra de Irak que, tras cumplir una semana, "está lejos de terminarse", según reconoció ayer el presidente Bush. Al mismo tiempo, el rápido avance desde el sur de las tropas anglo-estadounidenses estrecha el cerco sobre Bagdad en un momento en el que el mando aliado, con sede en Qatar, planea intensificar las operaciones gracias a la mejora de las condiciones meteorológicas.

"Éste es el comienzo del frente norte", ha reconocido una fuente del Pentágono que ha explicado que, tras descender, la primera misión de los paracaidistas fue ocupar un estratégico aeropuerto del norte iraquí, que se convierte así en la primera instalación de importancia bajo control aliado en esa región, de mayoría kurda. Según estas fuentes, cerca de un millar de paracaidistas de la 173 Brigada Aerotransportada, con sede en Vincenza (Italia), fueron lanzados sobre el aeródromo de Bashur, a 50 km al este de la aldea kurda de Erbil.

Aunque ésta es la primera presencia aliada de importancia en la zona, unidades de las fuerzas especiales de EE UU ya se encontraban en la región incluso antes del inicio de la guerra. Las fuentes, que han pedido permancer en el anonimato, han añadido que, a la llegada de los paracaidistas, le seguirá en los próximos días por el lanzamiento desde el aire de equipos y abastecimientos.

Avance kurdo

La llegada de fuerzas terrestres de EE UU a la zona ha venido acompañada de un movimiento significativo de milicias kurdas hacia territorio bajo control iraquí. Una avanzadilla de milicianos kurdos opuestos a Sadam Husein han atravesado la frontera que separa el Kurdistán iraquí, controlado por EE UU, de la zona norte de Irak, que sigue bajo dominio del Gobierno iraquí. Esta incursión es la primera de estos guerrilleros desde el comienzo de la guerra, que hoy cumple su octavo día.

"He visto una masa importante de guerrilleros peshmergas atravesar la frontera y tomar varias colinas en un kilómetro a la redonda", ha confirmado el corresponsal de la agencia Reuters. "Hemos tomado las colinas y nuestros guerrilleros se han adentrado cuatro kilómetros dentro de territorio iraquí", ha asegurado por su parte Mam Rostam, uno de los comandantes de esta avanzadilla. Por el momento, no hay noticias de que se hayan registrado combates entres estas milicias y tropas leales al presidente iraquí.

Varios frentes para vencer a Sadam

Una de las fuentes ha señalado que los miembros de la Brigada Aerotransportada, conocidos como soldados del cielo, están "acostumbrados a descender y a luchar con lo que tienen durante un tiempo". En una breve conversación con periodistas tras reunirse con líderes del Congreso, el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, indicó ayer que la apertura del frente norte es un nuevo factor de presión sobre el régimen de Sadam Husein. "Estamos aumentando el número de fuerzas en el país todos los días. Las estamos aumentando en el norte, las estamos aumentando en el sur y las aumentaremos en el oeste", añadió.

Las fuentes del Pentágono han indicado que la idea es obligar a las tropas iraquíes a luchar en varios frentes para impedirles que se concentren en impedir el avance de las fuerzas aliadas desde el sur. El anuncio se produjo después de que Bush reconociera ayer en un discurso a las tropas del Mando Central en Tampa (Florida) que la guerra "está lejos de terminarse". El Pentágono admitió, por su parte, que las unidades militares y paramilitares iraquíes han planteado una dura resistencia a la invasión anglo-estadounidense, sobre todo en el sur del país.

Sin embargo, señaló que la oposición al avance aliado no provocará una modificación de la táctica militar, porque todo sigue marchando según el plan previsto. "Las tácticas, las técnicas y los procedimientos no cambiarán", dijo en rueda de prensa el general Stanley McChrystal, quien aseguró que el régimen de Sadam Husein parece estar esperando "una reacción desmedida de las fuerzas aliadas".