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ESTADOS UNIDOS

Condenado a 20 años de cárcel por asesinato un sobrino de Robert Kennedy

Los hechos ocurrieron en 1975, cuando el condenado tenía 15 años

Michael Skakel, sobrino de Ethel y Robert Kennedy, ha sido sentenciado a 20 años de prisión por el asesinato en 1975 de su joven vecina Martha Moxley. Los hechos tuvieron lugar cuando el condenado y la víctima tenían 15 años.

"Me gustaría poder decir que cometí el crimen y así la familia Moxley podría tener paz, pero hacer eso sería una mentira", señaló Skakel, entre sollozos, antes de conocer la sentencia.

El asesinato de Martha Moxley permaneció sin resolver durante más de dos décadas hasta que las autoridades judiciales encontraron discrepancias entre las versiones iniciales de Skakel a la policía, a investigadores privados y a quienes escribían sobre esa tragedia. Sus abogados habían solicitado el miércoles un nuevo juicio porque alegaban que la fiscalía había ocultado documentación que podría haber favorecido la defensa de Skakel, pero el juez denegó esa solicitud.

El condenado, de 41 años, ha mantenido en todo momento que es inocente del asesinato de su vecina, ocurrido en la localidad de Greenwich (Conneticut) cuando ambos tenían quince años. El cadáver de Martha fue hallado el 31 de octubre de 1975 en el jardín de la residencia de su familia y las autoridades determinaron que había sido brutalmente golpeada con un palo de golf de la madre de Skakel.

Sin testigos

El jurado encontró culpable al sobrino de Ethel Kennedy a pesar de no haber testigos presenciales ni encontrarse pruebas sobre su participación en el crimen. Los fiscales señalaron durante el juicio que Skakel se sentía atraído por Martha, pero que estaba furioso porque ella, al parecer, estaba más interesada en su hermano mayor, que en un principio fue considerado sospechoso.

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La acusación aportó diversos testigos que declararon años atrás que habían oído a Skakel hablar de su participación en el crimen, entre ellos algunos compañeros del centro de rehabilitación de toxicómanos donde estuvo ingresado. Uno de los testimonios aportados fue el de Gregory Coleman, muerto recientemente de una sobredosis de heroína, que relató que Skakel había afirmado que quedaría exculpado porque es "un Kennedy".

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