El autor de la matanza de Erfurt obtuvo las armas de forma legal
Robert Steinhaeuser, el joven que ayer asesinó a 16 personas en un instituto del este de Alemania, era socio de un club de tiro.- Las banderas ondearán a media asta en los edificios oficiales de toda Alemania hasta el próximo domingo
El joven de 19 años que ayer irrumpió en un instituto de Erfurt (este de Alemania) y mató a 16 personas antes de suicidarse obtuvo las armas homicidas (una pistola y un fusil) de forma legal, según ha informado hoy la policía. El asesino múltiple, identificado hoy como Robert Steinhaeuser, consiguió el permiso de armas tras pasar un curso en el club de tiro local del que era socio.
Las pesquisas se centran ahora en averiguar si Steinhaueuser actuó en solitario, como apuntan todos los indicios, o sí tuvo algún cómplice, tal y como apuntaron ayer algunos testigos presenciales.
Fuentes oficiales han rebajado además hoy a 17 el número total de muertos en la tragedia, que hasta ayer cifraban en 18. Doce de los muertos son profesores del centro, que ese día celebraba los exámenes de selectividad. El resto de las víctimas mortales son dos alumnos, una secretaria, un policía y el joven homicida.
Los conocidos del asesino múltiple le describen como un buen estudiantes, popular, alegre y algo exhibicionista. De hecho una amiga suya recuerda haberle oído decir en una ocasión "algún día quiero ser famoso". El joven había suspendido los exámenes de Bachillerato el año pasado. Este año podía volver a intentarlo, pero fue expulsado del centro por falisificar las notas.
Tras la tragedia, el ministro alemán de Interior, Otto Schily, ha ordenado que las banderas sean izadas a media asta en los edificios oficiales en toda Alemania hasta el próximo domingo, incluido, en señal de duelo.
El día más oscuro
Esta madrugada miles de personas han participado en diversas ceremonias ecuménicas en la localidad en recuerdo de las víctimas mientras resonaban las campanas de las iglesias. De forma espontánea, los habitantes de Erfurt han cubierto de flores las vallas con las que la policía ha cercado el colegio mientras prosiguen las pesquisas.
"Es el día más oscuro de la historia de nuestro pueblo", ha dicho el alcalde de la localidad, Manfred Ruge, a la televisión alemana. "Nos gustaría poder dar marcha atrás al reloj".
En Europa hay que remontarse a marzo de 1996 para encontrar una tragedia similar. El 13 de marzo de 1996 un desequilibrado coleccionista de armas de fuego mató a 16 niños de entre 4 y 6 años y a su profesora en una guardería de Escocia. En Alemania esta matanza no tiene precedentes desde la Segunda Guerra Mundial.
Un joven humillado con deseo de destacar
Alemania sigue buscando consternada los orígenes psicológicos de la matanza del colegio de Erfurt. Los especialistas hacen conjeturas al respecto a la luz de lo que se sabe de la biografía de Robert Steinhaeuser.
Sus padres, que al parecer viven separados y disfrutan de una situación económica desahogada, tenían una relación difícil con él, al que le caracterizaba, según diversos testimonios, un deseo de destacar sobre los demás lo que con frecuencia no conseguía en el terreno académico.
En esto último se basan algunos psicólogos y psiquiatras para explicar los posibles orígenes de masacres de este tipo, según Wilfried Koehler, director de una clínica psiquiátrica en Fráncfort. "Si no logro ser el primero en lo bueno, por lo menos procuraré serlo en lo malo", se dicen en un momento dado este tipo de individuos, que viven con una gran tensión entre lo que se exigen a sí mismos y sus posibilidades reales, según Koehler.
Esa tendencia, agrega el psiquiatra, se puede intensificar por un efecto de imitación generado por informaciones acerca de matanzas anteriores o vídeos y películas que ensalzan la violencia. El psicólogo forense Steffen Auer ha señalado que al tipo de asesino que encarna Robert Steinhaeser suelen pertenecer personas que se han sentido humilladas durante mucho tiempo y que, para perpetrar su crimen, vuelven al lugar donde han vivido las humillaciones.
En el caso de Steinhaeuser, este lugar habría sido el colegio de donde había sido expulsado y donde no se le permitió presentar su examen final de bachillerato, en el que estaban concentrados sus compañeros cuando se produjeron los trágicos hechos.
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