Bush recordará en su discurso que la guerra contra el terrorismo acaba de comenzar

Pese al alto grado de aceptación que los estadounidenses muestran al papel que su Gobierno está desempeñando en la guerra que declaró al terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre, el presidente Bush aprovechará su primer mensaje sobre el estado de la Nación, para recordar al pueblo estadounidense que en la contienda contra el enemigo invisible que encarna el terrorismo sólo se ha ganado la primera batalla y que la guerra, que se encuentra sólo en sus comienzos, será larga.

"Lo que hemos aprendido en Afganistán es que las cosas están lejos de haber llegado a su fin, nuestra guerra está empezando ahora", ha matizado un consejero del presidente

El discurso presidencial podrá seguirse en directo a través de las páginas 'web' del Departamento de Estado y de la Casa Blanca en seis idiomas, entre ellos el español

"Lo que el presidente transmitirá es lo que hemos aprendido en Afganistán. Las cosas están lejos de haber llegado a su fin, nuestra guerra contra el terrorismo está empezando ahora", ha matizado Karen Hughes, uno de los consejeros más próximos al presidente.

El incremento de la seguridad nacional que evite nuevos atentados a intereses de EE UU será otro de los ejes sobre el que girará el discurso del líder republicano. De hecho, el anuncio más importante podría ser la propuesta para aplicar el mayor aumento del presupuesto militar de los últimos 20 años, además de doblar el gasto para la seguridad interna.

Según han avanzado los asesores de Bush, el discurso, que comenzará a las 3 de la madrugada (hora española) del miércoles, se centrará en tres puntos básicos: continuar la guerra contra el terrorismo, incrementar la seguridad y revitalizar la economía.

Recuperación económica

Pero Bush, de cara a las elecciones legislativas de noviembre, no apartará su atención de los crecientes problemas económicos de EE UU.

Con el paro en su cifra más alta de ocho años, entre continuas informaciones de cierres, bancarrotas y despidos, el presidente republicano quiere demostrar que no es ajeno a la delicada marcha de la economía, que atraviesa una recesión por primera vez desde que su padre era presidente. Además, y con la oposición demócrata centrando sus críticas en la situación económica y en que las medidas del Gobierno han beneficiado a las grandes empresas y a los más favorecidos -sobre todo la reducción de impuestos-, Bush tratará de resaltar una imagen más "social".

Así, Bush tiene previsto anunciar que, pese a la vuelta al déficit fiscal, se intentará dotar a los jubilados de menores ingresos de un sistema de co-pago de las medicinas que se venden con receta, que son mucho más caras en EE UU que en Canadá, México o Europa Occidental.

Posibles alusiones a la quiebra de Enron

Este discurso llegará en medio de la resaca política por la quiebra de Enron, empresa energética de Texas que dio importantes contribuciones a las campañas de Bush y que está siendo investigada por numerosas posibles irregularidades económicas y contables.

Se espera que pida a las empresas una mejora de sus prácticas contables y una acción responsable de cara a accionistas y empleados, pero podría no citar el nombre de la fallida compañía, responsable de la quiebra más importante de Estados Unidos, para evitar que el escándalo del gigante energético se asocie con la labor de los miembros de su Ejecutivo.

"El presidente está muy preocupado por lo que les ha pasado a los trabajadores de Enron", ha recalcado hoy el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer.

Bush lleva ensayando en numerosas ocasiones el discurso, que tendrá una duración de unos 40 minutos, sin contar con aplausos y ovaciones, y para el que se han elaborado unas 25 versiones iniciales.

Consciente de que hoy comienza a jugarse la mayoría del Congreso en las elecciones de noviembre próximo, e incluso parte de la reelección en 2004, la Casa Blanca ha organizado un despliegue mediático para tratar de diseminar mejor su mensaje, también hacia el exterior para explicar su estrategia bélica.

Bush y sus asesores no dejan de tener presente el recuerdo de George Bush padre, quien tenía una enorme popularidad tras la rápida victoria militar sobre Iraq de 1991, pero fue derrotado por una leve recesión hábilmente utilizada por Bill Clinton.

Pocas horas antes del discurso habrá una sesión especial entre asesores del presidente y los principales presentadores de informativos de las grandes cadenas de televisión, con el fin de hacer hincapié en los puntos que más interesan al Gobierno, ha explicado Fleischer.

Además, la Casa Blanca ofrecerá el discurso en vivo a través de su página de internet, incluso con subtítulos, y en la página electrónica del Departamento de Estado se ofrecerá el texto en seis idiomas (español, francés, mandarín, árabe, portugués y ruso).