El Ulster recupera su autonomía tras 24 horas de gobierno desde Londres
Las fuerzas políticas norirlandesas tienen ahora un plazo de seis semanas para llegar un acuerdo
A medianoche ha entrado en vigor la disposición legal firmada por el ministro británico para el Ulster, John Reid, que restaura las instituciones autónomas de Irlanda del Norte, que había cedido su autonomía durante 24 horas para dar más tiempo a los grupos terroristas, y en especial al IRA, para avanzar en su desarme.
Según el ministro, esta ha sido la última suspensión temporal de la autonomía, porque los norirlandeses están "cansados de disputas interminables" y quieren una solución al problema de las armas.
Londres ya decidió la suspensión por un día del Gobierno autónomo del Ulster el pasado 10 de agosto para dar tiempo a los principales partidos norirlandeses a que limasen sus diferencias en asuntos tan espinosos como el desarme del IRA.
La congelación del poder autónomo vuelve a activar un plazo legal de seis semanas para que las fuerzas políticas norirlandesas lleguen a un acuerdo y, también, para que la banda terrorista republicana decida si comienza a entregar sus arsenales.
Durante esa prórroga, unionistas-protestantes y nacionalistas-católicos tendrán que alcanzar un consenso sobre otras cuestiones tan polémicas como la desmilitarización de la provincia y la reforma de la policía norirlandesa.
La suspensión de las instituciones, formadas básicamente por un Gobierno autónomo y una Asamblea con amplias competencias, ha sido criticada por el mayoritario Partido Unionista del Ulster (UUP) y el Sinn Fein, brazo político del IRA.
Incluso el propio IRA trató el pasado jueves de evitar la suspensión con un nuevo gesto, al anunciar en un comunicado su disposición a intensificar el diálogo con la Comisión Internacional Independiente para el Desarme en Irlanda del Norte (IICC). Sin embargo, los gobiernos de Londres y Dublín consideraron "insuficiente" la propuesta del mayor grupo terrorista del Ulster.
La suspensión de las instituciones autónomas tiene un gran valor simbólico porque constituyen el pilar del acuerdo de paz del Viernes Santo, firmado el 10 de abril de 1998, que permitió a católicos y protestantes repartirse el poder de la provincia.
La actual crisis del proceso de paz estalló el pasado 1 de julio, cuando el líder del UUP, David Trimble, dimitió como ministro principal norirlandés a causa de la negativa del IRA a entregar sus arsenales.
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