Liberados los 13 españoles que permanecían detenidos en Génova
Un juez italiano ha rechazado las acusaciones de 'asociación para delinquir con fines destructivos y posesión de objetos destinados a la agresión' que imputaban los fiscales
También se ha decretado la expulsión del país de los detenidos, que se hará efectiva esta misma noche para ocho de ellos, que partirán hacia España en un avión de línea regular desde el aeropuerto milanés de Malpensa.
Según las citadas fuentes, los otros cinco, tres de ellos mujeres, deben permanecer aún en Italia hasta obtener el alta médica, ya que se encuentran en centros sanitarios donde están siendo atendidos de fracturas y contusiones.
Las lesiones de mayor envergadura las presenta Dolores Herrero, de 62 años y con residencia habitual en Alemania, que deberá estar aún hospitalizada entre 20 y 30 días, según el último parte médico.
Los 13 españoles puestos hoy en libertad, que en su mayor parte procedían de Zaragoza, fueron detenidos el pasado domingo, durante el polémico registro de la policía en las dos escuelas donde tenía montado su cuartel general, el Foro Social de Génova (GSF), plataforma que agrupa a más de 800 asociaciones antiglobalización.
Dos días antes, el viernes 21 de julio, habían sido arrestadas y luego liberados otros cuatro ciudadanos de nacionalidad española, en los graves incidentes registrados durante la reunión genovesa de los líderes de los ocho países más poderosos del mundo.
Excarcelación sin cargos
El juez que ha decretado la libertad ha rechazado las imputaciones de los fiscales que les acusaban de asociación para delinquir con fines destructivos y posesión de objetos destinados a la agresión.
En consecuencia, el magistrado no ha convalidado el auto de prisión planteado por la Fiscalía y ha decretado la excarcelación de las ocho personas que regresarán hoy a España del centro penitenciario de la ciudad de Pavía, donde se encontraban recluidos.
A todos los detenidos les había sido aplicado el Código de Procedimiento Penal Italiano, que establece un plazo de hasta 96 horas desde la notificación en la tarde del pasado lunes de su ingreso en prisión.
La polémica que ha acompañado las detenciones practicadas por la policía en los centros de reunión del GSF se ha convertido en una tormenta política con la presentación por la oposición de centroizquierda de una moción de censura contra el ministro del Interior, Claudio Scajola.
En la moción se considera desproporcionada e intempestiva la actuación de las fuerzas policiales, que se produjo cuando la mayoría de activistas antiglobalización abandonaban o se disponían a abandonar Génova, tras los graves incidentes vividos en las dos jornadas anteriores, que costaron la vida a un joven manifestante.
También pide la oposición que se constituya una comisión de investigación que determine si hubo, como denuncian algunos colectivos, connivencias entre la Policía y los radicales adscritos al llamado "Bloque Negro".
