El Gobierno macedonio interrumpe su ofensiva para permitir la ayuda humanitaria

Al anunciar la decisión, el Gobierno ha insistido en que no se trataba de una claudicación, sino de una medida para facilitar la llegada de agua y ayuda humanitaria a la población en la zona de combates.

De hecho, las fuerzas gubernamentales desafiaron a los guerrilleros al bombardear con intensidad varias aldeas donde éstos se han hecho fuertes mucho después del plazo límite, las 04.00 hora local y peninsular española fijado en el ultimátum del "comandante Hoxha" para el inicio del alto el fuego.

Nikola Dimitrov, asesor del presidente macedonio, Boris Traykovski, ha declarado a la prensa que el cese de los ataques se debe a que "se quieren evitar dos catástrofes humanitarias posibilitando la reanudación del suministro de agua a (la ciudad de) Kumánovo y el envío de alimentos a los civiles de Lípkovo", localidad en la zona de los combates y a unos 20 kilómetros al norte de la capital, Skopje.

En una rueda de prensa, Dimitrov ha declarado que durante la tregua equipos de técnicos irán al embalse de Lípkovo para reparar las válvulas principales de suministro de Kumánovo, zona de 120.000 habitantes que desde hace seis días padece escasez de agua.

Hasta ahora, han fracasado los intentos del Ejército macedonio de arrebatar a los guerrilleros el control de Lípkovo y de varias aldeas albanesas que los guerrilleros controlan desde hace más de un mes, negándose a retirarse y deponer las armas a cambio de inmunidad.

Dimitrov ha negado que la tregua se deba a las amenazas de los guerrilleros albaneses, que aseguran que tienen al alcance de sus morteros de 120 milímetros el aeropuerto internacional de Skopje, la única refinería macedonia, la carretera que lleva hacia Atenas y Belgrado, y comisarías y edificios gubernamentales.

Los extremistas albaneses armados tienen desde el pasado viernes bajo su control la localidad de Arachínovo, a menos de 10 kilómetros del centro capitalino, donde reina una tensa calma entre temores de que pueda convertirse en un nuevo foco de combates.

Funcionarios macedonios aseguran que Skopje está bien protegida ante eventuales ataques de la guerrilla, pero no descartan la posibilidad de que surja el "terrorismo urbano" en esa capital, de medio millón de habitantes, casi la mitad de ellos albaneses.

Dimitrov ha asegurado que cuando terminen las tareas humanitarias en Kumánovo y Lípkovo, coordinadas por la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), el ejército y la policía reanudarán las operaciones contra la guerrilla.

"Debe quedar claro que ésta es una guerra del Estado contra unos terroristas y de ninguna forma se puede permitir que se convierta en guerra civil", ha dicho Dimitrov.

El comandante guerrillero de Lípkovo que se presenta como "Shpati" ha asegurado que dos civiles albaneses murieron y otros seis fueron heridos en los bombardeos de las fuerzas macedonias, que tuvieron ayer un muerto y tres heridos.

Representantes de la Cruz Roja Internacional intentarán hoy proveer de alimentos a los civiles de Lípkovo y sacarlos de la zona de combates, según Dimitrov.

De acuerdo con las autoridades de Skopje, muchos civiles siguen en las zonas de enfrentamientos ya que los guerrilleros los usan como escudos humanos e impiden su evacuación.

Los guerrilleros habían propuesto la noche del jueves al viernes un alto el fuego al que las autoridades hicieron caso omiso.

El viernes, los partidos macedonios eslavos y albaneses que participan en el Gobierno de concertación se comprometieron una vez más, ante el jefe de Política Exterior de la Unión Europea (UE), Javier Solana, a intensificar el diálogo para lograr una solución pacífica de la crisis.

Los primeros resultados del diálogo deberán ser presentados en una reunión de los líderes políticos macedonios, tanto eslavos como albaneses, con representantes de la UE el próximo día 25 en Luxemburgo.