Klaudia Tanner, la ministra de Austria que encendió la mecha del ‘gran apagón’
La responsable de la cartera de Defensa austriaca acapara los focos tras poner en marcha una campaña para alertar a la población de su país del riesgo de cortes de electricidad
Son las 19.20. Una familia cena tranquilamente en su casa. De repente se apaga la luz. El padre se levanta, mira por la ventana y ve que ocurre en todo el vecindario. Con toda la tranquilidad del mundo, se ayuda de una linterna para encender unas velas y se sienta de nuevo a seguir dando cuenta de la cena. Lo siguiente que se oye en el vídeo del Gobierno austriaco es una voz en off: “Siempre hay que contar con que ocurra un apagón, llega por sorpresa y puede pasar en cualquier momento, así que hemos empezado a prepararnos”. La responsable de que los austriacos vean a todas horas este anuncio por televisión se llama Klaudia Tanner y es la ministra de Defensa de este país de 8,9 millones de habitantes.
Tanner se ha hecho muy popular en toda Europa por una campaña en la que alerta a la población de la posibilidad de que un gran apagón deje sin electricidad al país durante varios días, o incluso semanas. “La cuestión no es si se producirá, sino cuándo”, ha dicho. La iniciativa ha situado a la ministra como profeta de un hipotético apagón europeo.
El vídeo oficial muestra a la familia informándose con una radio a pilas, jugando al parchís y cocinando arroz con un hornillo de gas. En la despensa, explican, guardan víveres para comer los cinco durante 15 días. En paralelo, el Ejército pone en marcha una operación para garantizar las comunicaciones y llevar ayuda —agua potable, generadores— a quien la necesite. En el anuncio la luz vuelve al tercer día, pero la campaña enseña a los austriacos que deberían estar preparados para sobrevivir sin electricidad hasta dos semanas.
El ministerio de Tanner publica cada año un informe en el que analiza los riesgos a los que se enfrenta el país. Este año el texto reza: “El mayor riesgo de crisis sistémica en Austria es sin duda un fallo generalizado de energía, infraestructura y suministro (gran apagón) que, según los expertos, se espera que ocurra en los próximos cinco años”.
Tanner, de 51 años, hizo historia al convertirse en la primera mujer que encabeza el Ministerio de Defensa austriaco. Nombrada en enero de 2020 por el entonces canciller Sebastian Kurz (en el inicio de su segundo mandato), forma parte del Gobierno de coalición entre conservadores y verdes que sigue liderando el país pese a la dimisión de Kurz en octubre tras un escándalo de corrupción. Antes de ser ministra carecía de experiencia en defensa. Abogada de formación, afiliada al democristiano Partido Popular Austriaco (ÖPV), llevaba casi 10 años como directora de la asociación de agricultores de la Baja Austria, un colectivo que pese a su denominación es también una organización política afiliada al ÖPV. También allí fue la primera mujer en ocupar el cargo. Tanner es la mayor de cinco hijos de una familia de granjeros de Scheibbs, un municipio de unos 4.000 habitantes en el Estado federado de Baja Austria.
La prensa la ha apodado “la dama de hierro austriaca” por su personalidad y la contundencia de algunas de sus afirmaciones. Ella misma se ha definido como “dura pero con corazón”. Su jefe de gabinete, Arnold Kammel, dice en conversación telefónica con EL PAÍS que tiene una “personalidad fuerte”. “Si está convencida de algo, hará lo que sea para sacarlo adelante, como ha ocurrido con esta campaña y la necesidad de alertar a la población y preparar a nuestro Ejército”, asegura. Al poco de llegar al ministerio, Tanner amenazó con romper el acuerdo de compra de cazas Eurofighter con Airbus. “Cuando algo es muy difícil, a veces se necesita a una mujer”, aseguró en una de sus primeras entrevistas tras ser nombrada.
“Los apagones a gran escala son problemas transfronterizos y nuestra respuesta debe ser internacional”, ha asegurado Tanner, que opina que el resto de países también deberían alertar a sus ciudadanos. De producirse un apagón, podría afectar a parte de Europa y dejar fuera de servicio sistemas informáticos, teléfonos, ascensores… Por eso el Ejército austriaco se prepara para convertir los cuarteles en “islas de seguridad” autosuficientes energéticamente. Hay expertos muy escépticos con la posibilidad de que ocurra un apagón, pero otros sí creen que un fallo técnico o una sobrecarga por un pico de demanda en la red eléctrica podría dejar a oscuras a media Europa. El riesgo de una ruptura en el suministro es mínimo en un país como España.
“Por desgracia el año pasado comprobamos con el coronavirus que los análisis de riesgo aciertan. Nuestros expertos predijeron la pandemia hace años”, asegura un colaborador de Tanner. “Lo mismo opinamos sobre el apagón, que clasifican en su informe de ‘muy probable’. Tenemos la responsabilidad de hacer que la población sea consciente del peligro”, añade.
La oposición austriaca no pone en duda la amenaza, ni que haya que advertir de ella a la población, pero sí el uso que ha hecho Tanner de la iniciativa. “Es otra campaña mediática”, afirma Robert Laimer, portavoz de Defensa de los socialistas austriacos, que recuerda el escándalo que le ha costado el puesto a Sebastian Kurz. El equipo del excanciller supuestamente compró publicidad para asegurarse mejores coberturas de la prensa y los socialistas creen que la “cara” campaña del apagón es algo parecido. “No hace que nuestra sociedad sea más resistente a los apagones”, añade.
Tanner ha regado de pósteres informativos los ayuntamientos del país, además de los anuncios en televisión y redes sociales. Incluso organizó un evento informativo-festivo, que combinó actuaciones musicales con un simulacro del Ejército para dar a conocer la iniciativa. Al final del evento, ella misma subió al escenario a recordar micrófono en mano a sus compatriotas que deben “estar preparados”.
Suscríbete aquí a la newsletter semanal de Ideas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.