La vida de lujo de Sergio Ramos

Hace un mes Sergio Ramos sufrió la lesión más severa y de recuperación más larga hasta la fecha. Un desgarro en el menisco del que ha sido operado hace unos días y que le tendrá apartado del fútbol hasta abril. La baja médica llegó en el momento más inoportuno para el defensa del Real Madrid. Al no firmar la renovación el pasado enero, el capitán del club blanco podría empezar a negociar con otros equipos, y se inició un culebrón en los medios plagado de rumores. Muchos insinúan que es una cuestión de salario y le sitúan fuera del conjunto blanco, lo que podría acarrearle fama de pesetero, aunque los últimos días las informaciones hablan de un acercamiento con Florentino Pérez que podría concluir con el defensa de Camas (Sevilla) jugando en el nuevo Santiago Bernabéu dos temporadas más.

Una situación que, lejos de centrar toda la atención del futbolista, ha llevado a este a aprovechar su ausencia de los terrenos de juego para encarrilar dos de los proyectos que más ilusión le hacen y que lleva fraguando un par de años. Por un lado, la adquisición de dos caballos de competición de salto, una yegua y un campeón considerado uno de los mejores ejemplares del mundo y valorado en 1,5 millones de euros. Dos ejemplares que potenciarán aún más su premiada yeguada SR4 y que Ramos tiene a medias con el jinete Sergio Álvarez Moya, exmarido de Marta Ortega, la heredera de Inditex. Y, por si fuera poco, este mismo mes se muda junto a su mujer Pilar Rubio y sus cuatro hijos a la espectacular mansión que compró en 2017 y que, tras una reforma a medida, tiene nada menos que 20 cuartos de baño.

“Es un privilegio dar la bienvenida a Álamo, actual ganador de la final de la Copa del Mundo y de la final Top 10”, publicaba Álvarez Moya en redes sociales, con la siguiente respuesta de Sergio Ramos en los comentarios: “¡Muy grande brother, un sueño hecho realidad y mucho futuro por delante! ¡Seguro que vamos a disfrutar con él! ¡Seguimos!” Un anuncio velado de que el central madridista y el famoso jinete solo acaban de empezar su relación de negocios con la compra de estos dos caballos. El primero fue una yegua, de nombre Eliante Z, con la que Álvarez Moya se encuentra entrenando. Álamo es otra historia, no solo por su precio sino por su trayectoria como campeón.

La pasión del futbolista por la hípica le viene desde niño, y en 2012 cumplió el sueño de convertirse en criador. En esta faceta, Ramos ha conseguido medio centenar de premios nacionales e internacionales y ha declarado en alguna ocasión que de todos los negocios que posee, este es el más rentable. La crianza de estos ejemplares de pura raza española es cara, pero los precios a los que se venden son mucho mayores. SR4 se desarrolla en la finca La Alegría, en la localidad sevillana de Bollullos de la Mitación, y de su gestión se encarga Carlos Muela, marido de Miriam, la hermana de Sergio. El buen hacer de su cuñado no ha hecho más que darle alegrías al defensa, que en otros sectores como el inmobiliario ha sufrido varios fiascos empresariales.

La otra gran ilusión de Ramos es su nueva casa. Situada sobre una parcela de 3.000 metros cuadrados en la exclusiva urbanización madrileña La Moraleja, la vivienda es una construcción modular en blanco de 1.000 metros cuadrados, diseñada a medida por el sevillano y por Pilar Rubio y que cuenta con la última tecnología en domótica, para hacer de su nuevo hogar un entorno con la máxima comodidad y eficiencia. La propiedad fue adquirida a un rejoneador. Estaba en ejecución hipotecaria y Ramos se hizo con ella a precio de ganga. Estaba tasada en tres millones y el madridista pagó por ella la mitad. Los que la han visto aseguran que dispone de 20 cuartos de baño, piscina climatizada, gimnasio y una enorme zona de juegos para los cuatro hijos de Sergio y Pilar Rubio. Un proyecto de vida incompatible con que el capitán del Madrid pretenda dejar la capital de España para jugar en otro club.

Más información

El futuro de Ramos, entre faroles y abismos financieros

A punto de cumplir 35 años, es precisamente su edad lo que empezó por condicionar su renovación, ahora también pausada por la recuperación de Florentino Pérez tras dar positivo en la covid. El jugador quiere dos años de contrato, pero el club solo ofrece uno a los mayores de 30. Superada esa cuestión, el Madrid pretende que reduzca su ficha actual, de más de diez millones por temporada, algo que el capitán quiere negociar. Mientras René, su hermano y representante, continúa sondeando a algunos de los principales clubes del fútbol europeo, Sergio Ramos se muestra despreocupado y haciendo gala de una forma física apabullante. Le sometieron a una artroscopia de rodilla el día 6, y diez días después se grababa entrenado al máximo nivel en el gimnasio de su casa. Una rutina que varias revistas masculinas ya han señalado como el entrenamiento perfecto para tener un cuerpo diez el próximo verano. Para el que pueda realizarla sin morir en el intento, claro.