Amalia, una princesa heredera de 17 años con un sueldo de 1,6 millones

Amalia de Orange, princesa heredera del trono de los Países Bajos, cumple este lunes 17 años, y la Casa Real presentó el pasado julio un nuevo retrato de la joven que mezclaba modernidad y tradición. En su caso, combinando un vestido azul pálido con detalles de encaje, pero de corte informal, sobre el fondo de uno de los cortinajes dorados de Huis ten Bosch, el palacio de La Haya donde reside junto con sus padres, los reyes Guillermo y Máxima, y sus hermanas menores, Alexia y Ariane. La foto forma parte del posado familiar correspondiente al verano de 2020, e intenta transmitir a sus compatriotas la próxima llegada a la vida pública de una adolescente más, cercana ya a las decisiones que cambiarán su vida. En el año que le resta antes de la mayoría de edad, Catharina-Amalia Beatriz Carmen Victoria de Orange- Nassau terminará la educación secundaria y luego espera tomarse un periodo sabático para “conocer el mundo”. Sus estudios superiores o incluso su paso por las academias militares del país no han sido comentados hasta la fecha. Y el aspecto más controvertido de su situación, esto es, la asignación recogida en los Presupuestos Generales del Estado, que suma en total 1,6 millones de euros anuales, de los cuales 296.000 serán para sus necesidades, no llegará hasta 2022, cuando haya cumplido 18 años.

Debido a las restricciones impuestas por la pandemia, Amalia celebrará una larga fiesta de cumpleaños repartida a lo largo de toda la semana. Solo podrá recibir a tres invitados diarios, de modo que sus primos, tíos y amigos irán apareciendo por etapas. En unas declaraciones recogidas por la agencia neerlandesa de noticias (ANP), la reina Máxima ha explicado que “hay que hacer lo que se pueda en estas circunstancias y disfrutar”, pero las otras dos hermanas, Alexia y Ariane, no podrán invitar a nadie para celebrar el cumpleaños de Amalia. “De todos modos, será un acontecimiento para toda la familia”, ha dicho.

Si bien la millonaria remuneración de la futura reina de los Países Bajos ha sido ya objeto de críticas por lo abultado de la partida, la formación de la princesa Amalia empieza a ser también objeto de análisis por parte de los medios neerlandeses. Va un año adelantada en la escuela, de modo que terminará el bachillerato con 17, y se sabe que es una estudiante muy aplicada que se maneja bien tanto en las asignaturas de ciencias como en las de letras. Como su hermana Alexia, tiene buena voz y le gusta cantar, y su debut en el teatro sí causó cierto revuelo. El año pasado, se estrenó en La Haya una obra en cuyo texto había participado y donde interpretaba un papel. A pesar de que la apertura fue en un teatro, se consideró un asunto familiar y las fotos fueron prohibidas.

Aparte de esa restricción mediática, y de que los posados familiares se reducen a las temporadas de verano e invierno, las tres princesas han sido fotografiadas sin problemas en actos oficiales como la entronización de su padre, en 2013, y durante la festividad del Día del Rey, celebrada el 27 de abril, fecha del cumpleaños del soberano. Guillermo y Máxima han intentado que sus tres hijas lleven una vida lo más cercana posible al resto de las niñas de su edad, y en parte lo han logrado a base de inscribirlas en colegios públicos tanto en la primaria como en la secundaria, con alumnos de distintos estratos sociales. Por otra parte, las veces que Amalia ha atendido en persona a los medios, aparece como una chica con soltura y sentido del humor, consciente de su responsabilidad. Observada de cerca por su madre, la reina Máxima, en la pasada fiesta del Día del Rey, admitió: “Todavía me cuesta darme cuenta de que esta es mi vida, y me emociona, pero me gusta mezclarme con la gente y todo el mundo hace lo posible para que me sienta a gusto”. No tiene cuentas personales en las redes sociales, como sucede con su prima hermana, Eloise, de 18 años, hija del príncipe Constantino, hermano del rey Guillermo. Eloise muestra la parte menos oficial de su familia y suma ya 100.000 seguidores en Instagram. Sin embargo, Amalia sabe lo que es ser objeto de discusiones en los medios por razones ajenas a su comportamiento. El pasado julio, Caras, una revista argentina, el país natal de Máxima, la presentó como un modelo “de talla grande”, y el reportaje fue ampliamente recogido en los Países Bajos. Tras varios días de rechazo a ambos lados, la dirección de Caras se disculpó.

Durante este año previo a la mayoría de edad, Amalia tendrá también tiempo para pensar en otro aspecto delicado de su futuro. Su contemporánea más cercana, Isabel de Bélgica, primogénita de los reyes Felipe y Matilde, cumplió 18 años en octubre de 2019, y en agosto de 2020 empezó su formación militar. Pasó cuatro semanas en el campamento de Elsenborn, cercano a la frontera entre Bélgica y Alemania, y sus padres publicaron unas fotos de la joven, como una soldado más. Después se supo que recibiría clases de teoría en la Real Academia Militar de Bruselas durante un año.

De la posible instrucción militar de Amalia de Orange no hay noticias oficiales por ahora, aunque sí ha recibido —como todas las chicas nacidas en 2003 en los Países Bajos— una carta del ministerio de Defensa donde se indica que están inscritas para el servicio militar. En total son unas 100.000 adolescentes, y no es una llamada a filas. La mili no es obligatoria desde 1997 pero, en nombre de la igualdad de género, el Gobierno las invita a formar parte de una carrera en la que ahora solo representan un 10%. Aunque la Constitución neerlandesa no otorga al soberano el cargo de comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, el Ejército explicita su lealtad al Jefe del Estado y a la Corona, y el rey Guillermo se alistó en la marina y se formó como oficial de reserva. Cuando tenga 18 años, Amalia de Holanda pasará a primer plano, entrará a formar parte del Consejo de Estado y acompañará a sus padres en la apertura del año Parlamentario. Entretanto, espera disfrutar también de su último periodo sin obligaciones oficiales.