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Eva Sannum defiende el derecho a la privacidad de los famosos

La que fuera novia no oficial del entonces príncipe Felipe reflexiona en un ‘podcast’ sobre el modo en que los medios utilizan el contenido que las celebridades comparten en sus redes

Eva Sannum, en la alfombra roja de un estreno en Oslo en 2012.
Eva Sannum, en la alfombra roja de un estreno en Oslo en 2012.Tor Gunnar Berland (GTRES)

Eva Sannum vuelve a ser noticia y por un motivo que, aunque nada tiene que ver con su relación a finales de los años noventa con el que fuera entonces príncipe de Asturias y hoy rey Felipe VI, sí camina por los mismos derroteros de aquella época. Reconvertida en consultora de comunicación a sus 45 años, Sannum desempeña su oficio a través del podcast en Tut & Mediekjør en el que desarrolla su opinión experta sobre la presión de los medios y la ética de la prensa. Estas últimas semanas, la exmodelo noruega ha moderado varios debates sobre la privacidad de los famosos y el derecho de los medios noruegos a utilizar el contenido que los rostros contenidos comparten en sus redes sociales, entre otros asuntos.

Y de acoso mediático la que un día fue novia no oficial del entonces príncipe Felipe sabe un rato. El Príncipe y la modelo mantuvieron una relación durante cuatro años que no fue reconocida hasta diciembre de 2001, cuando don Felipe informó de que habían decidido romper su relación y seguir cada uno su camino.

Eva Sannum y Felipe de Borbón se conocieron en la capital noruega en el verano de 1997, en una fiesta y a través de Haakon de Noruega. En septiembre de ese mismo año, ella se instaló en Madrid contratada por una agencia de modelos de un amigo de don Felipe mientras continuaba con sus estudios como publicista. Dos años más tarde, se empezaron a filtrar las escapadas de la pareja por toda Europa y, a principios de diciembre del año 2000, la pareja ocupaba la portada de una revista española en una imagen en la que aparecían abrazados y sonrientes durante una visita al Taj Mahal en un viaje con amigos a la India.

La noruega, que había vuelto a su residencia de Oslo, tuvo que convivir desde entonces con el acoso de periodistas, fotógrafos y paparazis que diariamente esperaban a la puerta de su casa una declaración o una foto exclusiva. La siguiente y tal vez última imagen oficial de don Felipe y Eva Sannum fue, precisamente en agosto de 2001 en la boda de Haakon y Mette-Marit de Noruega, a quien a ella le unía una gran amistad. Meses después, durante la Navidad de ese mismo año el hijo de Juan Carlos I se veía obligado a romper su noviazgo tras las presiones de las instituciones más conservadoras que no veían en esta estudiante que hacía pinitos en el mundo de la moda a la futura reina de España y anunció que Eva Sannum y él habían decidido tomar caminos separados.

El príncipe Felipe y Eva Sannum, en el Palacio Real de Oslo en la boda de Haakon y Mette Marit de Noruega en 2001.
El príncipe Felipe y Eva Sannum, en el Palacio Real de Oslo en la boda de Haakon y Mette Marit de Noruega en 2001.EPA

La modelo noruega daba comienzo a su otra vida. Durante un tiempo, la princesa que nunca lo fue todavía fue perseguida por los fotógrafos en Noruega, donde intentaba retomar su vida de estudiante y de ciudadana anónima. Un año después de la ruptura, Victoria Jounun, la madre de Sannum, aseguraba que su hija y el Príncipe seguían siendo amigos. Pero con el tiempo, el interés mediático por ella decreció, aunque de vez en cuando llegaban noticias suyas, como un fugaz viaje a Barcelona por motivos de trabajo. También aparecieron fotos con algunos jóvenes hasta que inició su relación con el que ahora es su esposo, Torgeir Vierdal, un prestigioso publicista con el que tiene dos hijos.

La pareja lleva una vida tranquila y desahogada en Oslo. Tienen su hogar en un pequeño palacete de tres alturas edificado en 1880, de estilo neorrenacentista, valorado en 1,6 millones y una segunda residencia de verano en el campo. Eva ha logrado el anonimato que el príncipe Felipe le deseó el día en que anunció que ya no eran pareja. Eva Sannum se convirtió en una gran profesional del mundo de la publicidad. También formó parte, como representante de la opinión pública, de la Comisión Profesional de Prensa, donde se encargaba, junto a otros compañeros, de arbitrar las quejas a los medios. Por eso le ha tocado mediar con las diferencias entre la prensa noruega y los príncipes herederos Haakon y Mette Marit, quienes en varias ocasiones han denunciado ante este organismo que su vida más íntima ha sido vulnerada. Tras cinco años trabajando en la prestigiosa agencia Geelmuyden Kiese, a la que llegó tras 10 años en Try/Apt, Sannum desempeña ahora su labor como consultora de comunicación a través del podcast en Tut & Mediekjør.

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