Iker Casillas: “No he estado con Sara todo lo que debería”

Iker Casillas y Sara Carbonero preparan su vuelta a Madrid después de cinco años en Oporto tras la retirada definitiva del portero. Pese a un último año difícil después de que el deportista sufriese un infarto y la periodista tuviese que enfrentarse a un cáncer de ovario, la pareja se ha mostrado siempre unida hasta hace unos meses, cuando las noticias sobre una supuesta crisis sentimental han hecho saltar las alarmas. Durante la mudanza de la ciudad lusa a la capital española, el futbolista ha roto su habitual discreción y lo ha hecho extrañamente hablando con una revista, Semana, donde ha querido zanjar cualquier especulación, no sin antes admitir que no han pasado por sus mejores momentos. “He estado de un lado para otro, e igual no he estado lo que tendría que haber estado al lado de Sara”, reconoce el portero a la publicación.

Hace dos semanas se vio a Carbonero asistir sin la compañía del portero al funeral de su abuelo en Corral de Almaguer, en Toledo. “No pude ir porque era la final de la Copa de Portugal y para entrar en el estadio tenía que hacerme un test de coronavirus. Además, era mi último partido con el equipo en activo y tenía que estar. Después de ese partido no pinto nada más en el fútbol”, cuenta Casillas sobre su ausencia.

Las últimas imágenes que se tienen de ellos dos juntos son del pasado febrero en uno de sus habituales paseos familiares por la playa de Oporto, desde entonces no se han vuelto a dejar ver juntos. Tampoco en sus redes sociales, donde la última referencia de él hacia ella fue en el comunicado que el portero hizo público la semana pasada para anunciar su retirada. “A mi mujer y a mis hijos, Martín y Lucas, gracias por todo vuestro apoyo, por todas esas horas que no he podido pasar a vuestro lado en este último trayecto de mi vida deportiva. Gracias por comprenderme y animarme a disfrutar de esta vida que elegí. Sin duda a vuestro lado todo es más fácil”, escribió el portero en su carta de despedida. Antes, el 3 de febrero, Casillas felicitaba a Carbonero con una foto de los dos de espaldas y abrazados.

“Hace un año a Sara y a mí nos cambió la vida y lo que hay que hacer es afrontarlo y disfrutar de lo que se tiene”, insiste Casillas a la publicación reconociendo que su infarto y el cáncer de su mujer ha pasado factura de manera inevitable a la pareja. Mientras él ultima la retirada de todas sus pertenencias de su casa de Oporto y supervisa la mudanza, Sara Carbonero ha viajado a Madrid, donde se ha reencontrado con su socia y amiga Isabel Jiménez en la firma de moda de ambas, Slow Love.

En unas semanas, el matrimonio y sus dos hijos, Martín y Lucas, de seis y cuatro años respectivamente, se instalarán de nuevo en la capital, aunque aún no tienen decidido si regresarán a la vivienda que la familia posee en la exclusiva urbanización La Finca de Madrid o a una casa que el portero ha adquirido en la zona del Parque del Oeste, próxima a Moncloa. “Aún no sabemos dónde vamos a vivir. Las vacaciones las haremos en el pueblo de Sara [Corral de Almaguer] y en el mío [Navalacruz]. Somos personas de riesgo y no queremos exponernos”, concluye el futbolista, cuyo futuro laboral aún está en el aire pero del que se comenta que se unirá como asesor de Florentino Pérez en el Real Madrid, el equipo que tantas alegrías le ha dado en su vida deportiva.