_
_
_
_
_

Portia de Rossi rompe su silencio para defender a su esposa Ellen DeGeneres

La cómica y presentadora recibe el apoyo de la actriz tras ser criticada por varios de sus trabajadores de un ambiente laboral tóxico y de acoso profesional

Ellen DeGeneres y su pareja, la actriz Portia de Rossi, en los Globos de Oro el pasado enero.
Ellen DeGeneres y su pareja, la actriz Portia de Rossi, en los Globos de Oro el pasado enero.Mario Anzuoni (Reuters)

Durante casi las dos últimas décadas ha sido una de las figuras intocables de la televisión de Estados Unidos, pero Ellen DeGeneres no está pasando por su mejor época. La cómica y presentadora, de 62 años, se ha convertido en el centro de la diana de varios de sus trabajadores, antiguos y actuales, que la han acusado de crear un ambiente laboral tóxico y han asegurado haber sufrido maltrato laboral: desde comentarios racistas hasta despidos injustificados en The Ellen DeGeneres Show. Unas acusaciones que han obligado a la propia comediante a escribir una carta disculpándose con aquellos que se hayan podido sentir tratados de manera injusta y asumiendo toda la responsabilidad porque “mi nombre está en el título del programa”. Una misiva que ha llegado después de que WarnerMedia, el conglomerado mediático que produce el programa, haya encargado una investigación independiente sobre ese ambiente laboral “tóxico” que alegan dichas fuentes.

Pero DeGeneres no está sola. Su esposa, la actriz Portia de Rossi, con quien lleva casada desde 2008, ha querido mostrarle todo su apoyo y lo ha hecho públicamente a través de las redes sociales, donde ha compartido con su más de 1,5 millón de seguidores en Instagram una imagen de un cartel en el que se lee “Yo estoy con Ellen”. Una frase que también han compartido muchos de los seguidores del programa que no retiran su confianza a DeGeneres y han continuado a su lado. A ellos De Rossi también ha querido dar las gracias. “A nuestros fans, os estamos viendo. Gracias por vuestro apoyo”, ha escrito la actriz en el mismo post. La presentadora, por su parte, mantiene el silencio en las redes sociales, donde suele ser muy activa. Su última publicación en Instagram fue hace cinco días para felicitar precisamente a una persona de su equipo; y en Twitter su último mensaje es de hace seis días, cuando colgó un vídeo de un fragmento de uno de sus últimos programas en el que ofrece dinero a una persona del público si consigue superar una divertida prueba.

La esposa de DeGeneres no ha sido la única que ha acudido a las redes sociales para mostrarle su apoyo. Otros amigos conocidos como la cantante Katy Perry también ha querido ponerse de su lado. “Sé que solo puedo hablar por mi experiencia y no por la de otras personas, pero quiero reconocer que solo he tenido conclusiones positivas de mi tiempo con Ellen y en el programa. Creo que todos hemos sido testigos de la luz y la lucha continua por la igualdad que ella ha traído al mundo a través de su show durante décadas. Te envío mi amor y un abrazo, amiga”, ha escrito la cantante en dos mensajes en Twitter mencionando a Ellen DeGeneres.

El mal ambiente con la que es la segunda presentadora mejor pagada de la televisión estadounidense venía gestándose desde abril, cuando el programa fue suspendido debido a la pandemia del coronavirus. Entonces la revista Variety contaba que los más de 30 empleados del programa no recibieron ninguna comunicación por escrito de los productores sobre sus horas de trabajo, pagos o consultas sobre su salud durante más de un mes. El equipo, además, se enteró de que la productora había contratado a una compañía de tecnología externa para ayudar a DeGeneres a hacer el programa desde su casa. Después, siempre según la versión de la publicación, les dijeron que se prepararan para un recorte salarial del 60%. Y días después llegó el desafortunado comentario de la presentadora que, desde su mansión en Los Ángeles de casi mil metros cuadrados, afirmaba sentirse “en prisión” durante la cuarentena por la pandemia.

“Como alguien que fue juzgada y casi perdió todo por ser quien soy [en referencia al ostracismo que sufrió cuando anunció su homosexualidad], realmente entiendo y siento una profunda compasión por los que son vistos de manera diferente o tratados injustamente o de manera desigual, o lo que es peor, son ignorados”, escribe DeGeneres en su carta de disculpa, donde asegura estar “descubriendo” que hay personas que trabajan con ella que están hablando en su nombre y tergiversando quién es. Por último, promete que las cosas van a cambiar, aunque no da más detalles, y asegura que se están tomando medidas, sin especificar cuáles. Según The Hollywood Reporter, el medio que tuvo acceso exclusivo a la carta de la presentadora, una de esas medidas sería despedir al productor Ed Glavin, unos de los señalados por malas prácticas perpetradas en el programa que siguen diariamente dos millones y medio de espectadores.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_