Menú semanal de El Comidista (9 a 15 de marzo)

La salsa de xató se elabora con tomates, ajos, almendras, avellanas, pan, ñoras, pimentón dulce, vinagre y aceite. Y queda genial en esta ensalada de escarola, de verdad de la buena.

Si ya te aburre el típico escabeche para las codornices, prueba a guisarlas con leche de coco, jengibre, tomillo y romero. Lo que vendrá a continuación te sorprenderá.

Honor y gloria para los buñuelos de viento. Lo más complicado de esta receta es freír la masa, una vez pasado ese trámite todo es comer y disfrutar.

Este untable es un aperitivo ideal si ya te has cansado del hummus o del guacamole. Puedes mojar los picos o untártelo directamente en una buena tostada con un poco de queso.

A este plato típico de la gastronomía leonesa le viene genial una vinagreta de pesto. Aunque si prefieres la alternativa vegana solo tienes que quitar la cecina y quedarte con los puerros y el pesto.

El kiwi está de temporada y es una de las frutas con mayor concentración de vitamina C. Ideal para hacerle frente al frío.

Esta crema de zanahoria puede tener variaciones en la receta: puedes usar caldo o agua, o añadir o no nata. Lo que no admite discusión es lo riquísima que está.

En esta receta la polenta se adereza con un poco de limón, pero siempre puedes cambiar este cítrico por jengibre o incluso apio. Además se acompaña con queso parmesano y rúcula.

Unas magdalenas migadas con café. Unas magdalenas caseras, hechas por ti y en tu casa, migadas con café. Piénsalo.

Pocas combinaciones hay mejores que la de los espárragos con jamón y huevo. Un deleite para el paladar que se cocina en 10 minutos.

Los guisantes están de temporada y eso no se puede dejar pasar. En este plato se preparan con tripas de bacalao y un poco de aceite de oliva extra.

Sentimos decirte que las naranjas no curan los resfriados, pero siguen estando bien ricas.

Estamos habituados a comer las endivias crudas, pero ¿has probado a meterlas en el horno? Te cambiará la vida por completo cuando las pruebes asadas, ya lo verás.

¿Hay algo más barato y más rápido de hacer que unos buenos mejillones aderezados con una vinagreta para que les dé otro toque de sabor? A mí no se me ocurre nada.

Que no te engañe su nombre francés (y por tanto esnob): es puro viejunismo. Estos crêpes tuvieron su momento de ubicuidad, y fue por una razón muy sencilla: están buenísimos.

Sí, la coliflor también se puede hacer en filetes, cual si salieran de una vaca gallega. Se pasan por la sartén y luego se acompaña de una salsa hecha con anchoas, alcaparras, albahaca, aceite, aceitunas y tomate.

Vale: el olor de las mandarinas no se quita fácil de los dedos, pero es un mal menor comparado con su jugosidad.

Hay algunos que solo con ver la foto ya están salivando como el perro de Pávlov. La panceta de cerdo en esta receta se marina con chirimoya, ajo, chile, canela, anís estrellado, clavo y miel.

No vamos a descubrir ahora que el sabor de la naranja se lleva muy bien con el cacao. Si quieres tenerlo aún más claro, puedes hacer este postre en el que además se incorpora un poquitín de canela.

¿Te atreves a hacer tu propia cerveza en casa? La elaboración es sencilla y no requiere de muchos ingredientes. ¡Salud!