Un mes de coches vandalizados a diario en una misma calle de Usera y aún se desconocen autores y motivos

Los vecinos del barrio Zofío, en el distrito Usera de Madrid, se levantan cada mañana desde hace un mes con el desconcierto de que otro coche ha sido vandalizado durante la noche, algo que sucede desde hace un mes exclusivamente en la calle de Cerecinos. Los conocedores de la situación han dejado de aparcar allí, una vía de estacionamiento gratuito, a pesar de que es difícil encontrar espacios libres en otras zonas. Pero todavía hay muchos que dejan su coche sin saber que a la mañana siguiente puede aparecer pintado con espray, con las lunas rotas, las llantas quemadas o con el vehículo completamente calcinado. Este último método ha sorprendido aún más a los vecinos la mañana de este jueves, ya que es la primera vez que el vandalismo llega a tal punto. Nadie sabe quién está causando estos daños, ni los motivos que le impulsan en esta escalada. Los afectados han denunciado los hechos ante a la Policía Municipal y a la Nacional, que están llevando a cabo una investigación, sin resultados hasta el momento.

Fuentes cercanas al caso apuntan que se ha localizado un soplete cerca de los coches quemados la madrugada del jueves y las investigaciones indican que se utilizó líquido inflamable, ya que la propagación de las llamas fue muy veloz. La calle de Cerecinos atraviesa el parque de Olof Palme y en sus inmediaciones, además del colegio República de Venezuela, solo hay zonas verdes y de recreación al aire libre.

Es una vía muy transitada durante el día y poco activa por las noches. Por esta razón, ningún vecino de las zonas aledañas ha visto a los autores, que han ido intensificando sus ataques desde finales de septiembre. Otra de las dificultades radica en que justo el punto en el que se han producido los incendios no hay ninguna cámara de vídeovigilancia. Los vecinos se quejan de que el Ayuntamiento no ha atendido a sus demandas para que instalen cámaras de seguridad que cubran toda la vía.

Mario Pinto asegura que a su hermano le pintaron su coche blanco con spray negro, matrícula incluida, tal y como le ha sucedido a otros dueños de vehículos. Mientras no quitó la pintura de la matrícula no pudo circular, pero ese es un daño menor comparado con los coches a los que les han roto los cristales o los dos vehículos quemados de este jueves. El presidente de la Asociación Vecinal del Barrio Zofío, Francisco Rodríguez, comenta que quien cuenta con un vehículo asegurado a todo riesgo tiene menos problemas, al contrario de los que no están completamente cubiertos. “Hay mucha preocupación y miedo”, asegura Rodríguez.

La vicealcaldesa y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, ha informado la mañana de este viernes que la Policía Municipal y la Nacional llevan varias semanas desarrollando un dispositivo conjunto “con muchos agentes de paisano y coches camuflados”. Según Sanz, ya se ha identificado a varios posibles culpables, por lo que esperan que la situación se resuelva “lo antes posible”. Aun así, los motivos del vandalismo se desconocen. “No tenemos esa información. Son operaciones que están abiertas, por lo que tenemos que ser prudentes”, ha afirmado.

Lo que antes era una calle en la que difícilmente se podía encontrar hueco para aparcar, por estos días tiene varios espacios libres, que no se atreven a ocupar los conductores que conocen el vandalismo que viene ocurriendo desde hace semanas. Grecia Lescano vive a unos pocos metros del parque Olof de Palme y comenta que su esposo suele estacionar su coche por esta zona. “El miércoles por la noche aparcó a tres o cuatro coches de los que fueron quemados y por la mañana, cuando fue a recoger el suyo, entre las seis y seis y media, no vio nada”, relata. El fuerte olor a quemado aún persistía en los alrededores el jueves en la tarde, por eso cree que su esposo no notó nada porque aún no habían ocurrido los hechos.

Los vecinos que pasan cerca del lugar quedan impresionados por el rumbo que va tomando el vandalismo en esta calle. Se detienen a hacer fotos “para alertar a otros familiares y amigos” y algunos lanzan teorías de qué pueda estar sucediendo, desde que los culpables son “gente muy mala”, hasta que están protestando por la implantación del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en varias zonas cercanas a Usera.

El presidente de la asociación Barrio Zofío niega que esta sea la causa, pues no le encuentra relación alguna, ya que la calle de Cerecinos es de estacionamiento gratuito. El Ayuntamiento de Madrid indica que no han recibido ninguna queja por la implementación del SER en las zonas cercanas. Les consta una demanda vecinal que fue la que motivó la consulta para la puesta en funcionamiento de la SER en el distrito, en la cual “los vecinos también avalaron, de forma mayoritaria, la implantación del servicio”. Ángel Calvo, vecino de Zofío, cree la protesta tendría como objetivo que en la calle Cerecinos no se cree una zona SER, pero el Ayuntamiento ha confirmado que no está prevista la implantación a corto plazo en esa calle.

Con información de Patricia Peiró.