Bicimad gratis los próximos cuatro meses: anuncio sorpresa de Almeida a 100 días de las elecciones

Operación electoral. La maquinaria municipal que rodea a José Luis Martínez-Almeida ya trabaja a pleno rendimiento con un único objetivo: las elecciones municipales del próximo 28 de mayo. Este martes, por sorpresa, el área de Medio Ambiente y Movilidad ha anunciado que BiciMad ―el servicio público de bicicletas eléctricas de la capital― será gratuito desde el próximo 7 de marzo y hasta el 31 de julio. Una medida sin precedentes. El coste de este anuncio es de 1,7 millones de euros, según fuentes municipales.

La medida entrará en vigor el próximo martes a las 00.00 de la noche. El Ayuntamiento de Madrid pondrá en marcha esa madrugada su nuevo plan de bicicletas públicas renovadas que anunció en marzo de 2022. El servicio de BiciMad llegará al fin a los 21 distritos ―seis más que ahora― y ocho años después de su puesta en marcha. “El objetivo”, explica la nota de prensa del área de Medio Ambiente y Movilidad, “es incentivar la movilidad ciclista en la capital y que los ciudadanos puedan conocer de primera mano las ventajas que ofrece el nuevo sistema público de bicicleta eléctrica”.

El martes estarán disponibles gran parte de las 7.500 bicicletas nuevas. Respecto a las nuevas estaciones prometidas en los nuevos distritos, será paulatino. El Ayuntamiento anunciará el lunes el calendario de apertura de las mismas. El nuevo servicio se activa en convivencia con el actual sistema. El usuario no tendrá que hacer ningún cambio. Todo será automático. El presupuesto del cambio total de bicicletas y la ampliación de las estaciones es de 48,8 millones de euros. De estos, un 60% proceden de los fondos europeos.

Durante estos cuatro años, BiciMad ha funcionado como una montaña rusa. En agosto de 2021, por ejemplo, las críticas eran numerosísimas por los usuarios. Más del 30% de las bicicletas estaban rotas. Es decir, una de cada tres. “No estamos pasando por nuestro mejor momento”, admitía por entonces Carlos Mateo, director de Servicios de Movilidad del Ayuntamiento. La situación, eso sí, ha mejorado en los últimos meses, pero los datos internos son demoledores para el Consistorio. Un reportaje publicado por eldiario.es en febrero de 2022 contaba los siguientes datos: más de 11.000 abonados se habían dado de baja del servicio.

Críticas a la gestión de los fondos europeos

Todo este contexto de los fondos europeos no se entiende sin las críticas de Almeida a la gestión de los mismos. El alcalde acudió en febrero de 2021 a Bruselas como comandante en jefe de los alcaldes del PP. Era el encargado de liderar las protestas de todos los regidores conservadores de España. Convocó a los corresponsales de los medios de comunicación nacionales en un patio. Allí, rodeado de un enjambre de micrófonos de diferentes colores, dijo: “¡Debe reforzarse la gestión de los fondos europeos!”

Visiblemente cabreado, continuó: “Se está produciendo una distribución arbitraria. Insisto, esto no perjudica al PP, esto perjudica a los españoles. Aquí somos todos iguales ante la ley. Todos tenemos que superar esta pandemia y los fondos europeos son determinantes para hacerlo con independencia de donde se viva y se gobierne. Esto es lo que hemos hecho y dicho en las instituciones comunitarias”. Dos días después, como publicó este periódico, renunció a decenas de millones de euros que iban a estar destinados a reformar el parque de viviendas de la capital. El Área de Vivienda de Almeida solo pidió 24 millones de euros sobre una partida de 161.

El difícil camino de Madrid y las bicis

Al contrario de lo que sucede en el resto de capitales europeas o de las grandes urbes españolas, la ciudad no cuenta con vías ciclistas. Un kilómetro por cada 100 de vía pública; 15 veces menos que Bilbao, Sevilla o Barcelona. Madrid va en dirección contraria. Apuesta por los ciclocarriles. Aquí el ciclista comparte las avenidas con los coches. Es decir, que los vehículos deberían circular como mucho a 30 kilómetros por hora si tienen a una bici delante. Casi nadie lo cumple. Un peligro que los ciclistas siempre han denunciado. La mayoría de estudios de movilidad apuestan por los espacios segregados. Un carril propio y separado. Sevilla, por ejemplo, creó una red extensa y la movilidad a pedales se disparó de golpe hasta el 7%.

“Madrid no ha demostrado todavía que cree en el proyecto de la bici”, contaba hace unos meses a este periódico la arquitecta Belén Moneo, que ha participado en las mesas de movilidad del Ayuntamiento. “No es por falta de conocimiento técnico. Es un tema político”, observaba también Esther Anaya, profesora de la Imperial College de Londes especializada desde hace décadas en movilidad urbana sostenible.

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