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Dos mujeres al borde del abismo conectan 80 años después

Un diálogo inspirado en la obra de Max Aub describe la crisis de identidad de Emma y Ana

Las actrices María Pujalte y Ana Rujas en 'De algún tiempo a esta parte... Fracaso?' en el Teatro Español de Madrid.
Las actrices María Pujalte y Ana Rujas en 'De algún tiempo a esta parte... Fracaso?' en el Teatro Español de Madrid.José Alberto Puertas
Patricia Segura

Es 1938 en Viena, una ciudad controlada por los nazis. Emma lamenta su mísera vida tras la muerte de su marido y su hijo: “Un día vendrá la libertad”. Y aparece Ana, que hace de XXX, 80 años después en un sistema capitalista que la reprime. La joven atraviesa una crisis de identidad que la angustia y la retiene: “Llevo tanto tiempo ahogándome y disimulando”. Las dos mujeres conectan a través de su dolor, que las mantiene al borde del abismo, en el diálogo De algún tiempo a esta parte... Fracaso?, una creación teatral inspirada en la obra de Max Aub y adaptada por la dramaturga Maite Pérez Astorga.

El escenario del Teatro Español de Madrid acoge la historia de dos mujeres que luchan contra las atrocidades de su tiempo. “¿Qué hemos hecho con la libertad 80 años después de la Europa golpeada por el nazismo?”, se preguntaba su directora antes de escribir la obra, que ahonda en las luces y sombras de sus personajes. La dramaturga se planteó crear un diálogo entre dos mujeres en épocas muy distintas. “Ahora parece que lo tenemos todo para ser felices, pero hay algo que no nos deja en este sistema sobreestimulado”, reflexiona Pérez. Durante el proceso de escritura, la directora cuenta cómo se le aparecía su abuela: “Yo me percibo a mí misma viviendo con angustia. Pero, si amplío la mirada recuerdo a mi abuela, que vivió en circunstancias mucho más difíciles, y me planteo qué habría pensado ella si me viera así”.

Sus recuerdos derivan en la historia de la protagonista del monólogo del escritor Max Aub. Emma anhela que un día vuelva la libertad que le han arrebatado. Hacía menos de un año que Austria había sido anexionada a la Alemania nazi de Hitler. El régimen totalitario le había robado sus derechos, lo que le provoca una agonía que termina en delirio. La mujer de 50 años cuenta sus desgracias mientras habla con su difunto marido: “¿Te acuerdas del verano aquel que subimos a Suiza?”.

Las aceras destrozadas, los cristales rotos por el suelo y la sangre tiñen las calles de la ciudad. El frío de un gélido invierno le hace recordar a su hijo, al que mataron cuando volvió a España. “Soy católica a pesar de nuestra sangre”, repite tiritando mientras barre. Y desconsolada rememora el momento en el que se llevaron a su marido. “Hasta pronto”, dijo él.

La actriz María Pujalte da vida al personaje que escribió Max Aub, que con este monólogo pretendía dar a conocer la realidad de los años cuarenta en Viena: “Es una mujer a la que le han arrebatado todo y la han dejado sola. Es una víctima del régimen totalitario”. Su ancestro representa el proceso vital del individuo, que forma parte de la historia, recoge el testigo y deja otra huella. Ella conecta con Ana, que entra en escena en la segunda parte de la obra. “Son dos mujeres que están en una situación extrema de dolor, sufrimiento y pérdida de su identidad. Una se agarra a la vida a través del odio y la otra está en caída libre”, cuenta la gallega que interpreta a Emma.

La actriz María Pujalte en la obra teatral 'De algún tiempo a esta parte... Fracaso?' en el Teatro Español.
La actriz María Pujalte en la obra teatral 'De algún tiempo a esta parte... Fracaso?' en el Teatro Español.Jose Alberto Puertas

Ocho décadas después, en un mundo capitalista, Ana (XXX) se siente vacía. Las redes sociales, la televisión y el ritmo frenético de su día a día la han llevado a una situación extrema en la que pierde paulatinamente su identidad. La joven vive la frustración de una generación que está en constante búsqueda del éxito y se siente en una jaula. “Procrastinar, comprar y trabajar”, así define su rutina una mujer que aun teniéndolo todo no se encuentra a sí misma. “Sueño con una vida en la que pueda tener tiempo”, desea con vehemencia la joven a la vez que se desprende de sus inseguridades.

La actriz Ana Rujas, de 32 años, expone cuestiones sobre la salud mental en los jóvenes: “Las enfermedades mentales en nuestra generación están a la orden del día”. Según la madrileña, hay una obsesión generalizada por las redes sociales, por formar parte de algo o ser alguien importante. Su monólogo explica cómo no hay lugar para el fracaso en un sistema capitalista que despoja al individuo de su identidad.

Ella regresa al pasado para encontrar una luz entre tanta oscuridad. La chica rememora los recuerdos de su familia. Durante su monólogo, cuenta que sus abuelos fueron testigos silenciosos mientras Europa se reconstruía. Y conecta con el personaje creado por Max Aub que, como ella, se sometió a la crueldad de su tiempo. Tal y como refleja el diálogo entre las dos mujeres, 80 años más tarde, el nuevo sistema ha cambiado el significado de la libertad.

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