Díaz Ayuso: “Ahora quiero ser libre, me han estado mareando entre unos y otros”
La presidenta de Madrid se escuda en las dificultades de gobernar en minoría y la amenaza de una moción de censura
Isabel Díaz Ayuso ha justificado este jueves el adelanto electoral que convocó la víspera en la Comunidad de Madrid con algo más que la amenaza de una moción de censura de PSOE y Ciudadanos en su contra: tras no lograr presentar ni un solo proyecto de presupuestos en dos años, y aprobar únicamente una ley para crear una universidad privada, la líder del PP ha reconocido sus dificultades para gobernar dependiendo de los votos de Cs y Vox. “Ahora quiero ser libre, me han estado mareando entre unos y otros”, ha lamentado a primera hora de la mañana en una intensa tanda de entrevistas en Es Radio, Cope y Onda Cero. Además, la ya presidenta en funciones ha defendido que las mociones de censura presentadas por el PSOE y Más Madrid no paralizarán los comicios. “He seguido el procedimiento establecido de manera escrupulosa, y el tiempo me va a dar la razón”, ha dicho.
“Ahora quiero ser libre, por eso me echo esta situación a las espaldas con todas las consecuencias y pase lo que pase”, ha dicho Díaz Ayuso. “Soy la responsable de todo lo que ocurra a partir de ahora”, ha reconocido. “No he tenido mi propio proyecto hasta la fecha, porque me han estado mareando los unos y los otros, no me han dejado gobernar con tranquilidad, como se necesita en estos momentos”, ha seguido. “Aspiro a hacerlo sola, a estar sola, y luego a entenderme con los demás”, ha añadido. “No se puede estar así, todo el rato con sustos”.
Díaz Ayuso fue la primera candidata del PP derrotada en unas elecciones madrileñas desde la victoria de Alberto Ruiz-Gallardón en 1991. Aunque su alianza con Cs y Vox le permitió gobernar, sus dos socios siempre fueron antagónicos, lo que propició uno y mil roces. El más notable fue que el PP rompiera una racha de 16 años seguidos bajando impuestos porque Ignacio Aguado y Rocío Monasterio no se pusieron de acuerdo para aprobar una reforma que hubiera tenido un impacto de apenas 16 millones de euros.
Tras su derrota electoral de 2019, todas las encuestas indican que Díaz Ayuso podría ganar ahora las elecciones. Más difícil sería que gobernara en solitario. En consecuencia, la aspirante ya ha concedido este jueves que está abierta a contar con políticos de otras formaciones en un posible Ejecutivo, y ha ponderado en concreto el papel de Marta Rivera de la Cruz, de Cs, y hasta ayer su consejera de Cultura.
“Lamento profundamente que [Rivera de la Cruz] no pueda seguir, pero hay gente de ese partido que me merecen mucho la pena, y si tengo la posibilidad contaré con ellos”, ha asegurado Díaz Ayuso sobre sus exsocios de Cs. “Quiero a los mejores conmigo, y ella es una de ellos”.
No parece posible, sin embargo, que el futuro vuelva a unir los caminos de Díaz Ayuso e Ignacio Aguado, líder regional de Cs y hasta el miércoles vicepresidente y portavoz del Ejecutivo madrileño. Para él ha tenido las palabras más duras la presidenta en funciones.
“El vicepresidente siempre se ponía de parte de La Moncloa por la espalda”, ha asegurado. “Lo más importante es llegar al poder, ya lo tengo, no lo hubiera ni soñado, estoy en la responsabilidad más bonita de mi vida, y lamento volver a preguntarle a los madrileños [en las urnas], pero prefiero que sean dueños de su destino a que lo sean el PSOE con mis exsocios [por Cs]”.
Sobre la firma
