133 fiestas ilegales en Madrid pese al repunte de la pandemia y la tempestad ‘Filomena’
La Policía Municipal desmanteló este sábado eventos en casas y locales en los que se incumplían las restricciones por la covid-19 y en los que encontraron desde drogas hasta menores en piscinas de bolas
No ha importado ni la alta incidencia de la tercera ola de coronavirus ni las dificultades para la movilidad por las consecuencias del temporal Filomena. La capital ha vivido una de las noches más movidas de fiestas ilegales en el actual estado de alarma, que impera desde el pasado 25 de octubre. Hasta 133 eventos de este tipo han desmantelado los agentes de la policía Municipal en locales y domicilios por incumplimientos de las restricciones para impedir la expansión de la covid-19, según una nota del Consistorio.
De entre todas ellas destacan tres por el número de participantes. La primera intervenida a las 21:50 horas en una nave de un polígono industrial del Ensanche de Vallecas donde e levantaron 7 actas por tenencia y consumo de drogas. Los agentes encontraron a 44 personas en su interior consumiendo alcohol y sin mascarilla.
La segunda tenía lugar en el distrito de Tetuán cuando a las 23:36 horas intervino la Policía Municipal en un local con 61 personas en su interior. Se hallaban con mesas de más de 6 personas y ni los asistentes ni los camareros mantenían las medidas de seguridad ni usaban mascarillas. Algunos de los clientes fumaban en pipas de agua, las conocidas como sishas y una docena de menores jugaban en dos piscinas de bolas. Todos los presentes fueron sancionados, se levantó acta conforme a la Ley Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas y el local fue precintado de forma cautelar.
Por último, las 01:45 horas ya en la madrugada del domingo fue desalojado un local en el distrito Centro con 86 personas en el interior donde no se guardaba la distancia seguridad ni se usaba la mascarilla. Tanto los asistentes como los responsables del local fueron sancionados.
La incidencia acumulada del virus ha vuelto a subir y se encuentra en 618 por cada 100.000 habitantes. Se ha triplicado tras hallarse en 214 a mediados de diciembre. Eso ha llevado a las autoridades a endurecer más todavía las restricciones. Desde este lunes, la hora del toque de queda se adelanta en la Comunidad de Madrid de la medianoche a las 23 horas y también se adelanta una hora el cierre de la hostelería, que desde ahora es a las 22 horas.
El Ayuntamiento de Madrid trata de plantar cara desde diciembre con una campaña policial específica al incremento de fiestas ilegales en locales sin licencia. Alguna ha llegado a tener como escenario, durante este estado de alarma, una peluquería en la que se cobraba 30 euros de entrada para tener derecho a barra libre. Serán los organizadores y no los propietarios del local los que deberán hacer frente a una posible multa, que puede ir de 60.000 a 600.000 euros, según explicó a principios del mes pasado el delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes. Estas sanciones se basan en la ley de espectáculos públicos y actividades recreativas.
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