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Máxima síntesis

Anastasia Bengoechea, conocida como ‘Monstruo Espagueti’, ha hecho una intervención en la fachada de La Casa Encendida

La fachada de La Casa Encendida con el lema "Cultura hoy, futuro mañana".
La fachada de La Casa Encendida con el lema "Cultura hoy, futuro mañana".Víctor Sainz

El mensaje es contundente: ‘Cultura hoy, futuro mañana’. Está escrito con enormes pinceladas negras. La caligrafía es inconfundible para cualquiera que siga a Monstruo Espagueti, alias de Anastasia Bengoechea (Barcelona, 1983). “Busqué cómo expresar lo que quería con el mínimo de palabras posible. En mis carteles siempre sintetizo al máximo”, explica. Su intervención cubre seis ventanas de la fachada de La Casa Encendida. “Normalmente no suelo trabajar con unas dimensiones tan grandes”. La idea surgió de la artista. “La verdad es que fue una propuesta mía. Les conté lo que quería hacer y me dieron todas las facilidades”, celebra. El centro cultural hizo suyo el mensaje, que también se ha reproducido en carteles por la ciudad.

Menos risas. Anastasia vive en Madrid desde hace dos años. Entonces ya podía vivir de su trabajo como Monstruo Espagueti. Se hizo conocida como humorista gráfica por su visión cáustica sobre cualquier asunto. “Definirme me cuesta mucho. Cuando le explico a alguien qué hago le digo que soy artista, que dibujo y escribo. Mi trabajo se basa en expresar ideas o conceptos, lo más importante siempre es el mensaje. A partir de ahí busco cómo hacerlo, si con más dibujos o menos, si solo con letra, en qué soporte…”. Hace ya tiempo que, sin abandonar el humor, aborda temas serios. Es más política. Sus mensajes y viñetas se comparten muchísimo. “A veces me salen en cinco minutos y a veces en dos semanas”. Tiene más de 200.000 seguidores en Instagram pendientes de sus trazos.

Retrato de Anastasia
Retrato de AnastasiaCarlos Fernández

Dualidad normalizada. “Cuando llama el de Correos al telefonillo pregunta por Monstruo”. Le llegan más paquetes a casa con su nombre artístico que con el real. “No diferencio, respondo igual si me llaman Monstruo que si me llaman Anastasia. Estamos fusionadas”, señala. Se puso el nombre por el Pastafarismo, que tiene en el Monstruo de Espagueti Volador a su deidad. “Es una religión inventada con unos mandamientos loquísimos”. Ella no los sigue. Tampoco reza sus paródicas oraciones. Estudió publicidad en Barcelona y al terminar la carrera se fue a vivir a Londres. ”No he encajado nunca en una estructura jerárquica, por eso me han echado de tantos trabajos. Yo misma me autosaboteaba, hacía cosas que no debía. Hace mucho que sé que tengo que trabajar por mi cuenta”.

Sin parar. Su principal fuente de ingresos son los encargos que recibe de marcas. “Soy autónoma. No puedo decir que no a los trabajos, aunque los cobre en 2050”. Está siempre dándole vueltas a la cabeza. “Cuando estoy trabajando no siento que estoy trabajando, pero en realidad estoy trabajando siempre, en cualquier situación de mi vida, desde cuando estoy en la lavandería a cuando estoy en un bar tomando algo”. Hace cinco años que salió su primer libro y está trabajando en el tercero. “Tendría que haberlo terminado ya, pero no he podido. Como tengo que hacer otras cosas para ir sobreviviendo y pagar el alquiler, pues es un poco difícil”. A veces siente que está al límite. “Llegué a las navidades con el pedal a fondo, escapando hacia adelante. Necesitaba parar. Ahora estoy genial”.

Entre amigas. De todas sus cosas habla en Gente 2020, un podcast que comparte con Milenial, el alias de Marina García Canedo. “Cuando llegué a Madrid buscaba un estudio y me metí en el de Teta y Teta. Marina estaba allí de becaria y nos hicimos amigas. Queríamos hacer algo juntas y se nos ocurrió el podcast”, comparte. Lo lanzan a través de Subterfuge Radio. “Nos está dando la vida. Siempre salimos de las grabaciones diciendo que hemos encontrado nuestro propósito. Nos lo pasamos genial y nos motiva mucho”. La ayahuasca, la meditación o las drogas psicodélicas son algunos temas que han abordado. “Somos completamente naturales, absolutamente libres. No nos cortamos”. En cada programa tienen invitadas. Ya han ido Ajo, Miss Beige y Samantha Hudson. “Estamos en tiempos de exhibicionismo físico e interior, pero el show debe continuar”.

Planes continuos. Anastasia Bengoechea está feliz en Madrid. “Tengo un montón de amigos desde que llegué, muchas pandillas diferentes. Aunque parezco una persona muy abierta, que lo soy, soy bastante tranquila y me gusta estar en casa, pensar en mis cosillas. En Madrid a la gente le gusta estar mucho en la calle, yo no soy tan madrileña aún”. Sus sitios favoritos están por Antón Martín. Son el bar La Esperanza, el restaurante Yokaloka y la librería Sin tarima. Si tuviera que regalar un libro, lo tiene claro. Sería uno de Brigitte Vassallo o de Byung- Chul Han. Escucha mucho a Nathy Peluso y echa de menos bailar en las discotecas. Hace años escribió en la pared de un baño un mensaje que se viralizó y ahora siente más propio que nunca: “A todas las chicas que he conocido ciega en baños de discotecas, espero que estéis bien. Os echo de menos a todas”.

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