Esquerra se alinea con la CUP y Junts para modificar el modelo policial catalán

Esquerra Republicana de Catalunya se sumó este viernes a las exigencias de la CUP y de Junts per Catalunya de revisar el modelo policial de los Mossos d’Esquadra por la actuación de ese cuerpo para controlar las protestas que ha desencadenado la entrada en prisión de Pablo Hasél. Los choques entre manifestantes y policías se han colado en la agenda de las negociaciones de los tres partidos para formar un nuevo Gobierno en Cataluña. Un cambio de modelo policial que no concretan ni Esquerra ni Junts y que es aludido someramente en sus programas.

El jueves, a raíz de los duros enfrentamientos de las últimas noches entre manifestantes y los agentes en varios puntos de Cataluña contra el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél, la CUP y Junts reclamaron un cambio de modelo policial en Cataluña. Ambas formaciones consideran que la unidad antidisturbios de los Mossos ha cometido errores durante los altercados, sobre todo por la pérdida de un ojo de una joven, posiblemente por el impacto de una bala de foam, algo que se está investigando. Este viernes, fue la portavoz de ERC, Marta Vilalta, la que afirmó que su partido “no comparte” que, en protestas como las de estos días, se utilice la violencia, a la vez que abogó por un cambio de modelo policial que elimine “las malas praxis”.

En un día en que se produjeron las primeras reuniones para encarar el futuro Gobierno catalán entre las fuerzas independentistas, la polémica por los disturbios se colocó en un lugar destacado en las intervenciones de los líderes políticos.

Vilalta se pronunció a favor de una “policía democrática” sin concretar qué significa exactamente este término. En parecidos términos se expresó el vicepresidente catalán, Pere Aragonès, aunque precisando que si hubiera una “eventual mala actuación individual, ésta no pueda manchar la labor de un cuerpo”. En declaraciones durante una visita a centros sanitarios de Girona, Aragonès se reafirmó en la voluntad de “fortalecer un modelo de policía democrática basado en la confianza entre los cuerpos de seguridad y la ciudadanía”.

Esquerra no precisó este viernes si tienen alguna hipótesis de un modelo policial, si piensan en eliminar la Brigada Móvil (Brimo) o si consideran que se deberían dejar de usar la munición de foam. Estas dos últimas exigencias fueron puestas sobre la mesa por parte de la formación anticapitalista en un claro mensaje de su posición de salida en las negociaciones. La CUP también pidió la dimisión del consejero de Interior, Miquel Sàmper; algo que Aragonès esquivó a preguntas de los periodistas. Es más, el vicepresidente pidió a los partidos que no se “tiren la seguridad ciudadana por la cabeza”.

Sobre suprimir la munición de foam, Vilalta de desmarcó de las exigencias de la CUP y precisó que “la policía debe disponer de instrumentos” y no puede quedar desprotegida. En su opinión, el debate sobre todas esas cuestiones se debe realizar en el Parlament, como ya se hizo cuando se suprimió el uso de las pelotas de goma por parte de los Mossos.

Ni ERC ni Junts dieron más concreciones de un hipotético nuevo modelo policial. En el programa electoral de ERC, no se habla de un cambio aunque sí se hace una referencia ligada a las movilizaciones de los últimos años “que se han saldado con múltiples casos represivos cuando se intentaba paralizar desahucios; para protestar contra la sentencia del procès o durante las huelgas del 8 de marzo”. En otro apartado de su programa, ERC insta a hacer un seguimiento de los casos y acompañar a las víctimas de abusos policiales: “Hace falta hacer cumplir los protocolos de actuación de los Mossos para garantizar una policía democrática y ejemplar”.

Junts remite a su programa electoral que aboga por “un nuevo modelo de unidades policiales destinadas al orden público para potenciar las políticas de prevención, mediación y resoluciones de confictos”. Junts afirma que la prioridad es “garantizar el derecho a la seguridad de todas las personas y que a la vez puedan ejercer sus derechos fundamentales”.

Una ‘nueva etapa’ entre ERC y Junts

Las delegaciones de ERC y Junts se reunieron ayer por primera vez para analizar los resultados del 14F y enfocar la “apuesta de las dos fuerzas para llegar a acuerdos”. Una “nueva etapa” de un Gobierno independentista que propicia el resultado electoral con una mayoría secesionista de más del 50% de los votos. Una reunión sin resultados concretos, más bien de aproximación entre ambas formaciones. Antes de ese encuentro, ERC insistía por la mañana en que un Govern presidido por la formación republicana no priorizará la vía unilateral. Y en el Consell Nacional de la formación, Pere Aragonès hacía un llamamiento a En Comú Podem para que se sume a un Gobierno amplio: “Nos tenemos que poner de acuerdo”.

Al margen de las negociaciones entre independentistas, el Partit dels Socialistes y En Comú Podem se citaron este viernes para una primera reunión exploratoria. Intentan ver si hay margen para formar un gobierno “progresista” pese a que la suma de sus escaños (33 más ocho) se queda muy lejos de la mayoría absoluta del Parlament, fijada en 68 escaños.