El Gobierno critica la lentitud de la Generalitat y exige a Mazón celeridad en la limpieza de bajos y garajes tras la dana
Marlaska pide el plan de trabajo, también a la Diputación de Valencia, sobre una prioridad que califica de “máxima”
Se acabaron las buenas palabras del Gobierno hacia la Generalitat. Hasta ahora, en las relaciones entre ambas administraciones, al menos en una dirección y públicamente, había reinado la diplomacia. Pero después de una semana con el presidente del Gobierno valenciano, Carlos Mazón, prácticamente desaparecido, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha estallado y ha criticado sin tapujos el retraso en algunas tareas como la limpieza de bajos y garajes. Marlaska, que ha calificado estos como de propiedad máxima, ha desvelado que se ha puesto en contacto con el presidente valenciano y con el presidente de la Diputación de Valencia, Vicente Mompó, para trasladarles su preocupación y exigirles la máxima celeridad en la limpieza de bajos y de garajes. “He tenido que llamarles”, ha dicho, cuando casi se cumple un mes desde que la dana arrasó decenas de pueblos en el sur de la provincia de Valencia y acabó con la vida de, al menos, 221 personas.
El ministro ha expuesto cómo, una vez transcurrido un tiempo prudente, hay que apresurarse ya en la articulación de las tareas, por lo que ha reclamado ver el listado de empresas y el plan de trabajo. “Es una prioridad máxima”, ha dicho dirigiéndose a la Generalitat Valenciana, que es la que sigue manteniendo la dirección de la Emergencia.
Pese a que Carlos Mazón tenía hoy la agenda casi vacía con únicamente la asistencia telemática a la reunión del Cecopi, el órgano de coordinación de Emergencias, durante la mañana ha comunicado reuniones con los nuevos miembros de su Consell. Sin embargo, estos, cuyo nombramiento es efectivo desde el viernes, no tomarán posesión hasta mañana. En estos ritmos, la líder de los socialistas valencianos y ministra de Ciencia, Diana Morant, ha dicho que la sociedad valenciana “no puede permitirse a un president ausente”.
Mazón no ha salido siquiera a contestar a Marlaska. Lo ha hecho en su lugar el presidente de la Diputación de Valencia que ha respondido a Marlaska diciéndole que exija menos y trabaje más, según informa Europa Press. Vicente Mompó ha hecho referencia a que esta es una tarea que no le corresponde pero, tras haberle sido asignada, tampoco puso ningún obstáculo para desarrollarla. Así, ha indicado que la Diputación ha asumido “competencias impropias para solucionar un problema, que es el de la limpieza de bajos y garajes y que, como dice el ministro, es una necesidad ineludible y una preocupación manifiesta”. “Es un problema que, por cierto, también ellos podrían haber solucionado”, ha añadido.
Además de sobre los trabajos de limpieza, Grande-Marlaska ha pedido celeridad para la retirada de los 120.000 coches que se encuentran en 60 explanadas y que han de ser trasladados “cuanto antes” a los centros de tratamiento y puedan ser achatarrados. Según ha dicho el ministro, el Estado ya ha movilizado a todos los efectivos del Estado y a los peritos del consorcio de compensación, por lo que ha exigido que la orden de retirada de los coches, “tenga cumplimiento”. “Es ineludible”, ha recalcado, recordando que la orden de requisa temporal de estos vehículos se dictó hace unos días.
Sobre el operativo para la extracción de lodo, este lunes ha entrado en vigor una orden que permite “la entrada en garajes, bajos y locales de las zonas afectadas por las riadas para limpiar y extraer el lodo y otros residuos que constituyan un riesgo para la salud pública” en 660 ubicaciones en Albal, Catarroja, Alfafar, Massanassa, Paiporta, Picanya, Benetússer y Sedaví. Esta es una tarea que se realiza en colaboración con la Diputación de Valencia. Según Emergencias, “están priorizando los puntos donde, por razones de salud pública y emergencia, hay que actuar”, mientras se sigue trabajando para liberar las redes de alcantarillado para el que están desplegados 125 camiones de extracción de lodos en las zonas afectadas, principalmente en Paiporta y Catarroja.
La Generalitat Valenciana, como directora de la Emergencia, regula los lugares sobre los que se ha de limpiar o los espacios en los que urge actuar. Según datos de Emergencias, sobre el terreno están desplegados 828 bomberos y 8.499 efectivos del Ejército, de los cuales 2.103 pertenecen a la UME. También trabajan en la recuperación más de 800 voluntarios de Protección Civil de toda España.
Al margen de los trabajos para la recuperación, el ministro del Interior también ha querido poner en valor el hecho de que la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, acudiera este domingo a Massanassa, donde falleció un operario, al caer un techado, cuando hacía labores de limpieza en un colegio afectado por la dana. “Estuvo donde debía estar”, ha dicho Marlaska para destacar la ausencia de Mazón, quien no asistió a la localidad y convocó una reunión de urgencia en el Palau de la Generalitat.
“Hay situaciones difíciles en ocasiones para un representante político, pero debe afrontarlas con toda la dignidad, porque afrontarlas es también dignificar a la institución y ser capaz de comprobar un determinado malestar, asumirlo y trabajar para evitar que hechos tan trágicos como el de ayer vuelvan a suceder”, ha manifestado. Por su parte, la líder del PSPV y ministra de Ciencia, Diana Morant, ha insistido en que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, debe destituir al president de la Generalitat, Carlos Mazón, por su gestión de la dana y le ha recordado su aviso sobre Mazón, del que dijo que no podía permitirse “ningún error más”, para relacionarlo con la ausencia del president, ayer, en Massanassa, tras la muerte de un operario.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.