Las restricciones a la movilidad no reducen la ola de solidaridad

La Comunidad Valenciana ha afrontado este sábado el quinto día del mayor desastre natural en la historia reciente de España entre nuevos llamamientos de ayuda, promesas de más medios, críticas a la gestión de la tragedia y una ola de solidaridad que llevó a miles de voluntarios con cubos y escobas a los municipios valencianos arrasados por la fuerza de la riada del martes, que se ha cobrado de momento al menos 211 víctimas mortales. El Gobierno ha puesto sobre la mesa todos los medios que se precisen y la Generalitat ha aceptado gestionar la crisis con su intervención.

El Ejecutivo “va a movilizar todos los recursos que sean necesarios, todo el tiempo que haga falta” para ayudar a los municipios destrozados por la dana, ha asegurado el presidente Pedro Sánchez, que ha destacado que se ha organizado el “mayor despliegue de las Fuerzas Armadas que se haya hecho en España en tiempos de paz”, además de otras ayudas. Sánchez ha afirmado en una comparecencia tras una reunión del comité de crisis que si la Generalitat Valenciana “requiere más efectivos, maquinaria, financiación, lo que tiene que hacer es pedirlo y se le suministrará inmediatamente”, como se ha hecho “con los 5.000 militares solicitados” este mismo sábado.

El presidente valenciano, Carlos Mazón, había pedido horas antes ese aumento de miles de militares para llegar al menos a 7.000 en las zonas de la catástrofe tras desplazarse a diferentes municipios para comprobar que los caminos ya están despejados, los puentes asegurados y las bases logísticas operativas para desplegar al ejército en toda su extensión ―los primeros 4.000 militares del contingente se esperaban este sábado―. A última hora de la tarde, Mazón ha realizado una declaración en la que ha subrayado: “Estamos pasando por el peor momento de nuestra historia. Es de una magnitud que nadie podía imaginar”. A continuación, ha anunciado la creación de cinco comités de “respuesta inmediata” en los que pretende la incorporación de seis ministros y de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, para abordar la gestión de la crisis con una larga lista de propuestas en el frente sanitario, de infraestructuras, servicios sociales y vivienda, empleo y empresa, así como de Interior ―Sánchez adelantó el aumento de efectivos de Policía y Guardia Civil hasta los 10.000 para garantizar la seguridad y evitar saqueos, por los que han sido detenidos 82 detenidos―. Fuentes del Ejecutivo han confirmado que los ministerios solicitados “participarán en los grupos de trabajo de la Generalitat con ministros, secretarios de Estado o demás técnicos, en función de las necesidades”.

Mientras llegan las nuevas ayudas y equipos, la Generalitat Valenciana ha decidido restringir la circulación de vehículos particulares en las carreteras de las poblaciones afectadas por la dana. El objetivo es no obstaculizar el paso de los servicios de emergencias en los accesos a la zona sur de la ciudad, en la que se encuentran los municipios más afectados. Las vías afectadas hasta el lunes son los accesos y salidas a los municipios desde y hacia la V-31 en su totalidad, excepto la entrada a la ciudad de Valencia, y los accesos y salidas a los municipios desde el kilómetro 0 de la V-30 ―el Puerto― al kilómetro 9, que coincide con los accesos a la A-3, en ambos sentidos, excepto en la entrada a Valencia. Además, hay prohibición de circular por otras seis vías. El Ministerio de Transportes, por su parte, trabaja en las carreteras y autovías dañadas para habilitar desvíos y despejar las calzadas.

Las limitaciones a la movilidad no han menguado un masivo movimiento de solidaridad que a las siete de la mañana se ha concentrado, citado por la Generalitat, en la Ciudad de las Artes para implantar la organización en equipos de trabajo. Mazón ha estimado en 10.000 los voluntarios y ha agradecido su solidaridad.

La previsión de más lluvias ha pesado toda la jornada sobre las provincias de Valencia y Castellón mientras han seguido las tareas de limpieza y la búsqueda de los desaparecidos en sótanos, garajes o vehículos arrastrados por el agua y sumidos en el fango. Una mujer fue rescatada con vida tras pasar tres días atrapada en el interior de un coche que había quedado en el fondo de un paso subterráneo en Benetússer (Valencia), junto al cadáver de su cuñada.

Mazón suavizó el viernes el mensaje de advertencia que había lanzado sobre los voluntarios, a los que reclamó que volvieran a sus casas, pese a que estos habían llegado a zonas donde la ayuda oficial aún no lo había hecho. Muchas de las personas que están limpiando calles y casas llegaron a los pueblos afectados andando, tras largas caminatas y organizados en columnas, para poder llegar al mayor número de afectados. Los organizados a través de redes sociales incluso han habilitado una aplicación móvil para reportar puntos de especial necesidad o activar notificaciones de lo que ocurre en la zona a la que van a ayudar. También la Generalitat ha puesto en marcha la web somsolidaritat.gva.es, a través de la que se pretende canalizar el ofrecimiento del voluntariado.

La convocatoria de la Generalitat ha concentrado a miles de personas. Algunos de los voluntarios han manifestado sus quejas en redes sociales por la falta de organización ante la enorme afluencia de voluntarios y también porque al menos un autobús que en principio iba a dirigirse a Chiva, uno de los municipios más afectados, fue enviado a limpiar un centro comercial. La vicepresidenta del Consell, Susana Camarero, aseguraba que todo estaba “perfectamente ordenado” y que los voluntarios ―que recibieron escobas y otros utensilios, camisetas, mascarillas y guantes y bolsas con zumos y comida― eran trasladados a diversos puntos para ser recogidos por efectivos de Protección Civil. Sobre el centro comercial Bonaire (en el término municipal de Aldaia), dijo que es un punto donde centralizar autobuses para derivar luego a los voluntarios hacia los lugares necesarios.

Sin embargo, las críticas han arreciado durante la jornada en las redes sociales, con mensajes de voluntarios frustrados esperando a poder entrar en Chiva, por ejemplo, o autobuses parados a la espera de destino. Otras personas han desistido de movilizarse con la Generalitat y han optado por andar a zonas afectadas. La pasarela que conecta la ciudad de Valencia con los municipios damnificados, rebautizada como “Puente de la Solidaridad” por ser la vía de acceso de un enorme número de voluntarios que la cruzan a pie, casi se ha bloqueado, por lo que la policía ha ido reteniendo el flujo de personas, lo que ha causado colas, según ha contado un voluntario, Fernando Miñana.

En Chiva, la ayuda de los voluntarios se ha visto ensombrecida por un incidente grave: al menos 19 personas, entre ellas voluntarios que realizaban tareas de limpieza en un garaje, han resultado heridos por intoxicación de monóxido de carbono por el mal funcionamiento de una bomba de desagüe. Dos de ellos han resultado graves, según la Guardia Civil. Emergencias de la Generalitat ha informado que procedía a la evacuación del edificio afectado.

El suministro eléctrico dañado por la dana se ha restablecido en el 94% y se han recuperado la mitad de las líneas telefónicas cortadas, ha anunciado el Gobierno. Chiva, aislada estos días por la riada, es una de las que han recuperado el suministro eléctrico y de agua en el núcleo urbano, ha celebrado el Ayuntamiento en un comunicado en medio de la desolación de los graves daños. “Nos hemos quedado sin pueblo, pero hay cierta alegría ante la respuesta que estamos teniendo por todo el mundo, la gente se ha unido, los jóvenes me han sorprendido de forma brutal”, ha explicado la alcaldesa, Amparo Fort.

La situación sigue siendo muy complicada en los municipios afectados. La alcaldesa de Paiporta, Maribel Albalat, ha lamentado la “desesperante” situación que vive el municipio, que lamenta más de 60 muertos. Hay zonas a las que todavía no se puede acceder: “Es imposible porque hay cuerpos, hay vehículos con cuerpos, y tienen que levantarlos. Está todo muy difícil”. La regidora, en declaraciones a Europa Press, ha agradecido el mayor número de efectivos de servicios de emergencias que trabajan en la localidad, pero precisa que “no son suficientes”. “Los que vengan serán muy bien recibidos”, subraya. también ha pedido más ayuda el alcalde de Alfafar, Juan Ramón Adsuara. “Han pasado cinco días y nos ven a nosotros, pero nosotros no tenemos herramientas, no tenemos maquinaria pesada”, ha asegurado en declaraciones a la Cadena SER. También el municipio de Aldaia reiteró su petición de maquinaria para despejar las calles.

Mientras, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha mantenido durante la jornada avisos de distinto nivel en varias comunidades. Aemet ha retirado el aviso en Baleares, pero lo ha activado de nuevo en Andalucía. Así, el aviso es naranja, el segundo nivel de una escala de tres, en zonas de Cataluña y la Comunidad Valenciana, y amarillo en el este de Andalucía. Los ciudadanos de Terres de l’Ebre, en Tarragona, recibieron a mediodía un aviso de Protección Civil para extremar la precaución ante la previsión de lluvias continuadas y puntualmente torrenciales.

Los Reyes, Felipe VI y Letizia Ortiz, viajarán este domingo a la zonas afectadas por la dana, según ha informado La Zarzuela a través de un mensaje. Ambos irán acompañados por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón.

El proceso de identificación de cadáveres

Los médicos forenses han realizado, desde el miércoles,162 autopsias, de las que 39 han permitido una identificación plena gracias a las huellas dactilares. Todos los fallecidos a los que se les ha practicado la autopsia, cuenten o no ya con informe positivo de identificación, han sido trasladados por la Unidad Militar de Emergencias (UME) desde la Ciudad de la Justicia de Valencia, en cuyos sótanos se centraliza la recepción de las víctimas mortales, hasta la morgue que se ha montado en Feria Valencia. El Instituto de Medicina Legal de Valencia tiene a su disposición a más de 130 efectivos para hacer frente a la emergencia, entre médicos forenses, psicólogos, trabajadores sociales, ayudantes de laboratorio, facultativos y técnicos de autopsia, junto a personal para tramitación. En ese dispositivo, en el que se hacen turnos rotatorios, participan médicos forenses de diferentes administraciones, tanto autonómicas como del Ministerio de Justicia, que se han desplazado desde Murcia, Cartagena, Albacete, Madrid, Andalucía, Castellón, Alicante o Baleares.

Cada equipo forense dedicado al levantamiento de cadáveres en los diferentes lugares donde se han producido víctimas está compuesto por dos profesionales al que se une después un policía nacional o un guardia civil. Una vez realizados los trámites necesarios en el lugar donde se encuentra el cuerpo, y asignado a este un código, el equipo regresa a la base de la Ciudad de la Justicia de Valencia, donde se toman las huellas dactilares y, en todos los casos también, muestras biológicas por si fuera preciso realizar análisis de ADN para su posterior identificación. Los datos obtenidos se cruzan con los facilitados por los familiares de desaparecidos y con las denuncias de desaparición.

Con información de Miguel González, Victoria Torres, Belén Domínguez Cebrián, Cristina Vázquez y Ferran Bono.