Empieza el festival de música negra Maig di Gras de Borriana, que rechazó pedir una ayuda a Vox
Las aportaciones del público y el compromiso de los artistas con el proyecto suplen la renuncia a subvenciones e impulsan “la edición más compleja y más real” del certamen de música negra
El festival de música negra y brass band —conjunto musical compuesto por instrumentos de metal— Maig di Gras de Burriana (Castellón), que declinó la posibilidad de recibir 9.000 euros de subvención de la concejalía de Cultura, en manos de Vox, por “incompatibilidades insalvables” con la formación de ultraderecha, sacará adelante este fin de semana su séptima edición de forma “cien por cien autogestionada”.
La Asociación Cultural Soul Explosion, organizadora de la cita, recurrió en enero a una campaña de micromecenazgo, y a iniciativas de venta de material promocional, como camisetas, para poder celebrar el festival “sin ningún tipo de ayuda, ni pública ni privada”, señalan desde la entidad, que preside Merche Vidal. Cinco meses después, la magia del carnaval de Nueva Orleans, piedra rosetta para entender el nacimiento, evolución y proyección mundial de la música negra, podrá instalarse de nuevo, desde este viernes y hasta el domingo, 19 de mayo, en las calles de Burriana.
“Estamos haciendo un milagro”, señala Vicent Aleixandre, codirector de la cita, en alusión a los 20.000 de presupuesto mínimo que necesita el festival, con escenarios, y que en ediciones anteriores se cubría, casi en un 50%, con la subvención de Cultura, junto a aportaciones privadas y de colectivos como Naraniga, local considerado como la zona cero del evento. Tras desvincularse por completo de la concejalía de Vox y de las acciones de censura a libros LGTBI y revistas en catalán impulsadas por el edil del área, Jesús Albiol, por chocar de frente con un festival “multicultural y diverso”, Soul Explosion activó alternativas para sacar adelante el cartel. La campaña de micromecenazgo y de venta de camisetas -una edición especial de Vane Julián, creadora de la ilustración del cartel 2024- ha funcionado y las aportaciones han fluido desde diferentes ciudades españolas y hasta de Alemania.
“El apoyo del público ha sido clave, incluso gente que no va a poder venir al festival, ha querido respaldar el proyecto”, explica Merche Vidal. Ambas iniciativas han cubierto algo más del equivalente a la aportación que daba Cultura, es decir, esos 10.000 euros mínimos para el rodaje de una edición sin escenarios, 100% en la calle, como es la de 2024. Era el objetivo y se ha logrado gracias al “compromiso de músicos, artistas, ponentes y bandas con Maig di Gras”. Actuarán y participarán sin caché, aunque desde la organización inciden en que es algo puntual, fruto de las circunstancias.
Aunque quieren tender a un modelo de autogestión que deje a un lado la “monetarización de los festivales, no queremos que los artistas deban asumir este sacrificio, porque creemos en la profesionalización de la cultura y abogamos por un modelo alternativo pero viable para todas las partes”, indican desde Soul Explosion. “Pero es verdad que esta situación diferente ha hecho que nos arropemos en torno al festival y se desborde la solidaridad, no sólo en cuanto a aportaciones, sino también a la hora de alojar a artistas, por ejemplo”, explica Aleixandre.
Los excedentes de la campaña de micromecenazgo se destinarán íntegramente a la flota de rescate civil humanitario en el Mediterráneo de l’Aurora Grup de Suport.
No hay barras, detallan desde el Maig di Gras. Todo el impacto económico generado por el festival será para “los bares, entidades, colectivos y, en definitiva, para la economía local”.
Aunque el propio Jesús Albiol atribuyó la decisión del Maig di Gras de ir por libre “usando el recurso de que son incompatibles conmigo y vendiendo esa mentira, como se hizo con las revistas”, a una “estrategia de marketing” porque “es un festival que genera poco interés y arrastra a muy poca gente”, las cifras rebaten la afirmación. Más de 20.000 personas han secundado sus seis ediciones anteriores, junto a 15 bandas y 30 selectores musicales, entre ellas formaciones internacionales como Les Fanflures y Dats It Brass Band, referentes en el país galo, o los italianos The Uppertones, conocidos a nivel mundial por su música caribeña de raíz jamaicana y antillana; y estatales, como las barcelonesas Balkan Paradise Orchestra, Bandits y BlackFang desde Castelló, Los Volcanes (Zaragoza) o The Blue Shakers (València).
La de 2024 es “la edición más compleja, porque había muchas incógnitas, pero quizás es la que más sentido tiene. La más real. Nace un festival que se adapta a la situación política y trata de crear comunidad e inspirar; que ha mostrado una línea clara y coherente en su discurso”, reconocen desde la organización.
Entre las incógnitas figuraban la concesión de permisos y licencias. “A día de hoy, está todo concedido por parte del ayuntamiento”, aclaran. Agradecen la labor del personal técnico. Con Cultura, sin embargo, “no hemos tenido comunicación ni la vamos a tener en principio. Hay cosas no tolerables en una democracia”.
Maig di Gras afronta, con todo, su edición más real, pero también la más mágica. “Veintidós personas tocando simultáneamente. El mundo de la creación y el activismo cristalizando en este proyecto”, avanzan desde Soul Explosion.
Second Lines y acciones solidarias en cartel La programación arrancará este viernes con el concierto-taller del luthier y bluesman de l’Alcora Meter Mano Rara en la residencia pública de la tercera edad de la población, y con la presentación, en Isósteles Estudio, del mural artístico conmemorativo de esta edición, a cargo de Very Veritas. En este mismo espacio se proyectará el documental ‘Up from the Streets. New Orleans, the city of music’ y se completará la jornada con selecciones musicales en disco de vinilo, proyecciones de fotos y degustación de comida típica de Nueva Orleans.
La jornada del sábado 18 se prevé maratoniana y trufada de propuestas como charlas de diferentes temáticas, selectores musicales en formato Bike Sound System, bicicletas equipadas con amplificadores de sonido autónomos o talleres para los perfiles más jóvenes. Arrancarán además las esperadas Second Lines, pasacalles que funden a público y músicos entre bailes, paraguas, collares y estandartes “celebrando la vida y la diversidad”. La formación protagonista de la Second Line será Iruñea All Stars Brass Band, que reúne a integrantes de diferentes bandas de Pamplona que beben de la tradición NOLA como la Amama Luisa Brass Band, la Kinbonbo o la ya eternamente hermanada con el Maig di Gras Broken Brothers Brass Band.
El domingo, en la tercera y última jornada del Maig di Gras 2024, la Second Line volverá a las calles con Iruñea All Stars, Katanga Dub y artistas invitadas en un segundo desfile itinerante hasta el puerto de Burriana. Este mismo escenario acogerá el directo de Bandits y diferentes acciones solidarias, desde una charla con supervivientes del Aquarius a una feria de entidades promovida por l’Aurora Grup de Suport, así como un minuto de silencio y solidaridad con el pueblo palestino y con las víctimas de las políticas migratorias.
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