Solo la solidaridad con una diputada con cáncer lleva la concordia al bronco debate en Valencia sobre las leyes del PP y Vox
La exvicepresidenta Aitana Mas recibe el cariño de todos grupos de las Cortes enzarzados a propósito de la norma que equipara al franquismo con la democracia, según la oposición
Aitana Mas es una política alicantina de 33 años. Fue vicepresidenta de la Generalitat valenciana con el anterior gobierno de izquierdas. Ahora es diputada por Compromís en las Cortes Valencianas. Hoy ha sido la protagonista de la sesión de control sin decir una palabra. Todos los grupos parlamentarios le han dedicado este jueves un afectuoso aplauso, cuando la presidenta del parlamento, Llanos Massó, de Vox, ha expresado la satisfacción de la cámara por verla ocupar su escaño. Mas anunció el pasado fin de semana en sus redes sociales que padece cáncer. La diputada ha respondido asintiendo y llevándose la mano al corazón.
Portava més de quatre anys vigilant i controlant que este moment no arribara però finalment ha sigut inevitable...
— Aitana Mas (@AitanaMas) April 14, 2024
La mala notícia és que tinc càncer. La bona és que pense curar-me, que no cunda el pánico!!
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Solo su presencia con mascarilla y las palabras y gestos que le han dirigido todos los diputados de todas las formaciones políticas han llevado algo de concordia a una bronca sesión en la que se ha discutido mucho a propósito de la polémica proposición de ley que el PP y Vox, partidos que sustentan al Consell de la Generalitat, han denominado “de Concordia”, que tiene como objetivo sustituir la actual ley autonómica de Memoria Democrática. La derecha y la ultraderecha consideran que la norma reconoce a “todas las víctimas”, no como la anterior; la izquierda sostiene que “blanquea el franquismo” y “equipara la dictadura con la democracia”.
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, del PP, ha dado “las gracias” a Mas por convertirse en una referente para las “mujeres que necesitan referencias cuando reciben una noticia de este tipo”. El portavoz de Compromís, Joan Baldoví, le ha dedicado un guiño cómplice: “Te queda muy bien ese corte de pelo tan punky”. El portavoz socialista, José Muñoz, se ha acercado a hablar con ella. El vicepresidente primero, Vicente Barrera, de Vox, y la vicepresidenta, Susana Camarero, del PP, le han deseado una pronta recuperación.
Una vez pasado ese momento de auténtica concordia, las aguas han vuelto al cauce del hemiciclo, donde han empezado a repartirse leña, esta vez, a cuenta de Franco, en referencia sobre todo al dictador pero también al dirigente socialista alicantino (Ángel Franco), en una sesión de control que ha incluido reparto de un libro de Chaves Nogales y de una fotografía de Miguel Hernández, y la exhibición de imágenes de represaliados de la dictadura y de camisetas negras.
¿Considera que el franquismo fue una dictadura?” Le ha preguntado Muñoz a Mazón, tras recordar el socialista las palabras del vicepresidente Barrera sobre su orgullo de ser nieto de los que ganaron la Guerra Civil. “Lea bien los labios: sí, fue una dictadura”, ha respondido el presidente. “En esta comunidad, el único que tiene un problema con el régimen franquista es el socialismo alicantino. Lo han integrado en su ejecutiva [ahora dirigida por la ministra de Ciencia, Diana Morant]. Es un régimen franquista como la copa de un pino que lleva 40 años vigente”, ha aseverado el también presidente del PP valenciano que ha acusado a los socialistas de no preocuparse por los problemas reales de la Comunidad Valenciana.
El síndic del PSPV le ha respondido a Mazón preguntándole si “tiene un problema con el régimen zaplanista instalado en la Generalitat”, en alusión al juicio al expresidente valenciano, Eduardo Zaplana, del PP, sentado ahora en el banquillo acusado de varios delitos de corrupción. En su réplica, en su réplica, Mazón ha instado al PSPV a “permitirse el lujo de estar en contra de todos los odios y dictaduras”, citando un extracto del periodista y escritor Manuel Chaves Nogales. Al finalizar, le ha entregado el libro A sangre y fuego: héroes, bestias y mártires de España que el socialista ha aceptado. A cambio, le ha dado al presidente una fotografía del poeta Miguel Hernández que Mazón ha colocado de manera visible en su escaño.
La exhibición de camisetas de represaliados por parte de los diputados socialistas ha sido contestada por el portavoz de Vox, José María Llanos, que les ha acusado de hacer “teatro”, y ha afirmado que si trajeran al pleno las fotos de los “miles de mártires masacrados por el socialismo no cabrían en este Parlamento”.
Por su parte, el síndic de Compromís, Joan Baldoví, ha explicado que su grupo ha asistido al pleno de negro porque este jueves es un día “negro para los valencianos”, ya que se van a tramitar unas leyes que ha considerado que son una “vergüenza”. Tras la sesión de control, el pleno de Les Corts ha votado la tramitación de las cinco proposiciones de ley, impulsadas por PP y Vox, sobre asuntos como la memoria histórica, el plurilingüismo (llamada ley de Libertad Educativa por sus promotores), la Agencia Antifraude (solo presentada por los populares), la transparencia o la televisión autonómica. El PP y Vox cuentan con mayoría absoluta en la cámara. El debate sobre las iniciativas fue el pasado miércoles. Ahora, las proposiciones continúan su tramitación en las respectivas comisiones.
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