Ximo Puig lamenta el “desprecio cultural” de retirar una escultura de Alfaro del Palau de la Generalitat

El secretario general del PSPV y expresidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha calificado de “otro desprecio cultural” por parte del actual gobierno valenciano, formado por el PP y Vox, la retirada de la escultura del artista Andreu Alfaro ubicada en el Patio Gótico del Palau desde 2019. La escultura se titula Cercle berninià y es un arco de cinco metros de diámetro que representa el movimiento y la libertad.

Ximo Puig en una publicación a través de la red social X (antes Twitter) la retirada de la obra del escultor valenciano, que se colocó durante su gobierno, justo en medio del patio: “Andreu Alfaro es libertad. Antes iluminaba el Palau de la Generalitat. Ahora, han desmontado su escultura, escondida, olvidada. Todo un símbolo. Otro desprecio cultural. Destruir sí; no crear”.

Nacido en 1929 en Valencia y fallecido en 2012 en la misma ciudad, Alfaro es uno de los más importantes escultores españoles de la segunda mitad del siglo XX, como prueba la presencia de sus esculturas en las colecciones de importantes museos y de sus obras públicas en ciudades como Nueva York, Frankfurt, Maguncia, Madrid, Barcelona o su ciudad natal. Premio Nacional de las Artes Plásticas en 1981, fue uno de los padres fundadores del IVAM y un artista, además, comprometido política y socialmente en la defensa del valenciano y de la cultura propia. Participó en numerosas iniciativas convocadas por entidades como Acció Cultural de País Valencià o formaciones de izquierda, que defienden la unidad lingüística del valenciano y el catalán.

Fuentes de la Generalitat han justificado la retirada de la obra del Patio Gótico porque esa escultura “no puede ser de acceso exclusivo a los invitados VIP de Puig”, y ha recalcado a Europa Press que se están manteniendo conversaciones con el Ayuntamiento de Valencia “para localizar una nueva ubicación de acceso y disfrute de todo el público valenciano”. “No solo para los invitados de Puig”, han subrayado a Europa Press.

Además, han alegado que la ubicación de la escultura provocaba problemas de movilidad en actos en el Palau Gótico a los que asisten personas con movilidad reducida y que hay taladros y agujeros en el suelo en un edificio que es un bien protegido.

La retirada coincide en el tiempo con la primera comparecencia del vicepresidente primero de la Generalitat y consejero de Cultura, Vicente Barrera, de Vox, en las Cortes. El empresario y extorero manifestó el pasado miércoles que uno de sus objetivos es combatir el “pancatalanismo supremacista” y “el sectarismo de la izquierda” en la política cultura heredada del anterior gobierno y defendió, siempre en castellano, una normativa no oficial del valenciano, una lengua diferente al catalán, según afirmó en contra de los postulados de la comunidad universitaria y filológica internacional y de la propia Acadèmia Valenciana de la Llengua, ente normativo oficial según marca el Estatut de Autonomia.

Sobre la retirada de la escultura se han pronunciado los comisarios de la exposición, el artista Artur Heras y el profesor Anacleto Ferrer, preguntados por los medios. Para Heras, esta cuestión “tiene más que ver con una cuestión de cambio de significación política de contenidos políticos del gobierno” y ha mostrado su temor a que, ahora, el problema es que pongan la obra “en un almacén y quede olvidada tres años o treinta”. “Es una cosa de tapar lo que ya estaba”, ha indicado, y ha subrayado que es algo que en la historia “ya ha pasado” antes y que “normalmente no pasa en otros países”.

“Hay que considerar, a mi entender, que la cultura pública es lo más débil que hay y curiosamente lo que hay en un espacio público puede sufrir cualquier tipo de alteraciones. En este caso, cada gestión administrativa tiene la decisión de poder cambiar la ornamentación del lugar”, ha considerado, si bien ha calificado de “significativo” que haya sido 24 horas antes de la inauguración de esta exposición.

Por su pate, Anacleto Ferrer ha aseverado que este hecho forma parte de un “tiroteo simbólico” en el que “se le quita el nombre de un auditorio, se quita la escultura de Alfaro y se continúan quitando cosas”.

En diciembre de 2019 Puig anunció que el Patio Gótico del Palau de la Generalitat acogería de forma permanente una obra del escultor Andreu Alfaro para conectar la “mirada universal” del escultor con las “aspiraciones y el carácter abierto de la sociedad valenciana”.