L’Elca, la masía de Francisco Brines, inspiración de sus poemas, declarada Bien de Interés Cultural

El pleno del Consell ha aprobado este viernes declarar Bien de Interés Cultural (BIC), con la categoría de lugar histórico, L’Elca, la casa del poeta Francisco Brines (fallecido en 2021 a los 89 años), en el término municipal de Oliva (Valencia).

La estupenda masía, rodeada de naranjos y desde la que se divisa el mar, fue fuente de inspiración de los poemas del premio Cervantes, lugar de encuentro de infinitas tertulias de escritores y sede de la Fundación Francisco Brines y de su estupenda biblioteca. La casa recibe el nombre de L’Elca, por la partida en la que se emplaza.

Así la definió Brines en uno de sus escritos: “Se trata de una casa, blanca y grande, situada en un ámbito celeste de purísimo azul, y rodeada de la perenne juventud de los naranjos. Domina desde una ladera, sin altivez, un ancho valle, abierto al mar, y mira la agrupada y densa sucesión de unas desnudas montañas que se hacen de plata antes de llegar al solemne Montgó. Este, como una vieja divinidad, alarga su cuerpo en perezosa e intemporal siesta, y ya dentro de los azules marinos recibe su definitivo bautizo: cabo de San Antonio”.

Se trata de un lugar vinculado de manera indisoluble a la obra del poeta Francisco Brines, tanto por el legado bibliográfico y pictórico que dejó como por su paisaje, según han señalado fuentes del Consell. L’Elca se asentó en una villa romana rodeada de olivos. La edificación fue construida por la familia Avargues en el siglo XVII; a final del XIX fue propiedad de los Trénor y adquirida, posteriormente, por la familia Brines, dedicada a la comercio dela naranja, a principio de los años cuarenta del siglo XX.

Francisco Brines escribió hace 35 años que ya en algunos poemas adolescentes, le surgía “con extraña insistencia” la contemplación de su vejez en su casa de L’Elca. Allí transcurrió “lo mejor” de su infancia, allí experimentó “la continuidad de todas las edades” y allí vivió los últimos años de su vida, tras su larga estancia en Madrid, cumpliendo uno de sus deseos: que su legado, su patrimonio, sus miles de libros, las obras de arte que ha ido coleccionando permanezcan y que su espléndida masía se convierta en un futuro en un centro de estudios y un espacio para la escritura.

El entorno de protección afectado por la declaración BIC comprende la casa principal, con mobiliario, colección bibliográfica, colección pictórica, elementos decorativos, capilla (considerada Bien de Relevancia Local), edificaciones anexas, jardines y parcela donde están insertadas las edificaciones.

El poeta poseía una amplia colección de obra escultórica, gráfica y pictórica, de la que se ha hecho una selección. Queda excluida de esta lista la numerosa colección de arte contemporáneo que poseía Brines, porque será objeto de un detallado inventario y estudio con su correspondiente inclusión en el Inventario general de patrimonio cultural valenciano.

La tramitación del expediente se inició por la Resolución de incoación de 28 de octubre de 2021, de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte. Se ha seguido el procedimiento legalmente previsto y se ha pedido informe a las consellerias afectadas. Además, en el expediente constan los informes favorables del Consell Valencià de Cultura (CVC), de la Universidad de Alicante (UA) y de la Universitat de València (UV).

Cualquier actuación que pretenda realizarse en el ámbito delimitado del lugar histórico requerirá la autorización previa del órgano competente en materia de cultura, hasta que no se apruebe un plan especial de protección.

La Fundación Francisco Brines de la Comunitat Valenciana es una entidad privada sin ánimo lucrativo, que se gesta el año 2018 por deseo expreso y voluntad de su fundador, Francisco Brines. El Patronato de la Fundación tiene la responsabilidad de salvaguardar el patrimonio cultural y físico que constituye el legado del poeta de Oliva, así como de promover todas las manifestaciones culturales relacionadas con la poesía y las artes plásticas que sea capaz de emprender.

2023 será el año del artista alicantino Eusebio Sempere

El Gobierno valenciano declaró ayer también el 2023 como el Año Eusebio Sempere en conmemoración del centenario del nacimiento del pintor y escultor, en la localidad alicantina de Onil el 3 de abril de 1923. falleció en su pueblo en 1985. Este reconocimiento se suma también al Año Joaquín Sorolla, declarado por el Consell, por el centenario de su fallecimiento, y el Año Nino Bravo, por el medio siglo de su muerte, que aprobó les Corts.

Eusebio Sempere “formó parte de los grupos de artistas que, de manera más significativa, contribuyeron a la renovación del panorama artístico y cultural valenciano de posguerra”, entre los que destacan Els Set y el Grup Parpalló, destaca la nota de la Generalitat.

Además, participó en bienales internacionales y exposiciones individuales y colectivas, tanto en España como en Europa y en Estados Unidos, donde “su obra fue exhibida en las galerías y museos de arte contemporáneo más importantes”, añade la nota. Sempere mostró desde niño “una gran capacidad imaginativa y una especial inclinación por el arte”, lo que le llevó a formarse en la Escuela de Artes y Oficios y en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos, donde recibió el título de profesor de dibujo en 1948. Completó su formación artística en París en contacto con las corrientes artísticas del momento.