Los funcionarios de prisiones en Cataluña dan una tregua a las protestas pero se niegan a reunirse con el Govern

Los funcionarios de prisiones no se han concentrado este martes en los centros penitenciarios de Cataluña ni han bloqueado sus accesos, después de haber iniciado protestas el jueves pasado tras la muerte de la jefa de cocina de la cárcel Mas d’Enric de Tarragona a manos de un preso que después se suicidó. La pausa de las protestas llega después de que la consejera de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat, Gemma Ubasart, anunciase este lunes que el departamento desplegará tres medidas de seguridad en las próximas 48 horas en las prisiones. La consejera comparecerá el jueves 21 de marzo ante la Diputación Permanente del Parlament para dar explicaciones.

El Departamento de Justicia de la Generalitat ha apelado nuevamente al diálogo, pero los sindicatos han plantado hasta ahora a Ubasart, que les ha citado en diversas ocasiones, y exigen como medida previa para sentarse a negociar que dimita el secretario de medidas penitenciarias, Amand Calderó. Los bloqueos obligaron este lunes a confinar a 4.000 internos.

Ubasart aseguró ayer que darán dispositivos de comunicación y emergencia a todo el personal, procurarán que haya servicio de vigilancia en los servicios básicos que presta en las prisiones la empresa pública que empleaba a la cocinera de Mas d’Enric y reforzarán el personal de los servicios de cocina para que siempre haya al menos dos trabajadores encada turno.

El Govern no ha podido hacer otra cosa más allá que insistir a los sindicatos en la necesidad de que se sienten en la mesa para dialogar una salida a la crisis y hacer pública las propuestas que Justicia quería ofrecer a los trabajadores. En esa lista figuran, por ejemplo, los mecanismos para las prejubilaciones; la puesta en marcha de un grupo de 111 trabajadores formado especialmente para intervenir en casos especialmente violentos; y negociar la actualización del acuerdo laboral, que sigue en vigor desde 2006. La consejera recordó que pese a que a la legislatura le quedan poco más de 50 días, aún hay margen para poder solucionar la situación de los funcionarios de prisiones y recordó proyectos en marcha como el de la creación de un cuerpo propio catalán de trabajadores de las cárceles.

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