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La dirección de TV-3 y la oposición cargan contra las “coacciones” del diputado Francesc de Dalmases a la subdirectora del programa FAQS

Junts no aclara si se le podría aplicar el protocolo antiacoso a su vicepresidente, que ha pedido disculpas vía Twitter

Francesc Dalmases Laura Borràs
20/01/2021 El diputado de JxCat Francesc Dalmases. DAVID ZORRAKINO - EUROPA PRESSDAVID ZORRAKINO - EUROPA PRESS (Europa Press)

Inquietud en parte de la cúpula de Junts por las dimensiones que está tomando el escándalo desatado por su vicepresidente, el diputado Francesc de Dalmases, y la manera como se ha denunciado que increpó a una periodista de Preguntes Frequents (FAQS) de TV-3. El equipo del programa, con su director Pere Mas a la cabeza, respaldan la versión que señala que De Dalmases, tras una entrevista a la presidenta del Parlament, Laura Borràs, el pasado 9 de julio, agarró a una de las periodistas, la encerró en un camerino junto con otras personas y le riñó violentamente por el tono crítico de las preguntas.

La Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) condenó este martes lo que considera un caso de “coacción e intimidación” contra la subdirectora del programa e investigará el caso. Eso, junto con las críticas de la oposición en la Cámara, deja en muy mala posición al diputado, que este martes ha pedido disculpas “a todos los que se hayan podido sentir ofendidos” por “su actitud”. Con otros dos escándalos de acoso aún calientes sobre la mesa, las miradas están puestas en si el caso de su vicepresidente también debería ceñirse a lo que recoge el protocolo específico sobre el tema, que actúa en supuestos como el de la violencia física contra las mujeres, en cualquier ámbito. Oficialmente, el partido ha declinado pronunciarse al respecto, incluso pese a que se lo pide el Comité de Empresa de la televisión autonómica.

La presidenta del Consejo de Gobierno de la CCMA, Rosa Romà, ha pedido un informe a la dirección de TV-3 “para esclarecer, con el mínimo tiempo posible, los hechos de ese día”, ha comunicado la institución en una nota. Para la Corporación, una vez contrastada la queja de los profesionales del programa, condena la actitud del diputado y pide que se respete el trabajo de los periodistas. Según adelantó Nació Digital y Eldiario.es y pudo confirmar este diario, hablando con varios de los miembros del equipo de FAQS al finalizar la entrevista, el diputado agarró del brazo a la subdirectra del programa, la llevó a un camerino y se encerró con ella, junto con otras personas de la comitiva de Borràs. Allí, el vicepresidente de Junts, criticó “a gritos” el enfoque de la entrevista y se escucharon varios golpes contra el mobiliario, según explican esas voces y también denuncia el comité de empresa de la televisión pública catalana en un comunicado. Hasta los técnicos del programa tuvieron que “salir del plató para pedir silencio”, para evitar que el ruido se colara en la emisión. Desde el gabinete de Borràs y el propio De Dalmases insisten en que fue un diálogo en el que se plantearon discrepancias profesionales, pero “sin intimidar a nadie”. Borràs estaba en la sala donde ocurrieron los hechos y, de momento, guarda silencio sobre el trato dado a la periodista.


El tono del comunicado del comité es duro y reclama a la cadena y a Junts “una condena contundente de los hechos”, así como “la asunción de responsabilidades” por parte de De Dalmases. El texto expresa su rechazo “enérgico a la actitud intimidatoria, intento de coacción y ataque inexcusable contra la libertad y el derecho a la información”. El caso continúa el comité, tiene el “agravante intolerable e intimidatorio, de carácter machista” y muestra “una concepción controladora y antidemocrática de los medios de comunicación”. También se ha ofrecido apoyo al equipo del programa en caso de que se quieran denunciar a nivel judicial lo ocurrido, algo que de momento no ha ocurrido. “Hay que recordarles a Junts y a los partidos que TV-3 no es su sede. Tienen una visión poco democrática de lo que son los medios de comunicación y tienen que saber que si salen disgustados de una entrevista, pues es lo que hay”, ha zanjado la presidenta del comité, Roser Mercardé.

Por su parte, el Govern ha considerado “imprescindible aclarar” lo sucedido “por la gravedad de las acusaciones”, según ha explicado la portavoz, Patrícia Plaja. La portavoz no ha querido entrar en si el diputado debe dimitir, pero ha hecho una defensa de la libertad de prensa. “Los periodistas deben poder ejercerla sin presiones y que puedan preguntar lo que consideren, más faltaría”, ha rematado. La propia Borràs, en la entrevista, manifestó su incomodidad ante las preguntas que se referían a su situación judicial. La líder de junts está a la espera de que la justicia ponga fecha al juicio por trocear contratos públicos para supuestamente favorecer a un amigo. “Pensé que venía a una entrevista, no a un juicio previo”, había respondido desafiante Borràs, como en otras ocasiones, ante preguntas comprometidas.

La oposición en el Parlament ha dejado claro que no piensa dejar pasar por alto la situación. La CUP ha pedido directamente la dimisión del diputado involucrado. El PSC, por su parte, ya ha adelantado que preguntará sobre el tema en la Comisión de control parlamentario a la CCMA, donde justamente De Dalmsases representa a Junts per Catalunya. El portavoz de los comunes, David Cid, ha asegurado este martes que estudiarán si el diputado habría vulnerado con su comportamiento contra la el Código de Conducta del Parlament. Una parte de la dirección de Junts ve como, además del desgaste por la situación de la presidenta de la Cámara, ahora se enfrenta con un escándalo que toca a su vicepresidente en un tema tan sensible y que va en contravía del mensaje de defensa de la igualdad que se quiere transmitir.

Junts declina oficialmente explicar si se le podría aplicar a su vicepresidente el protocolo sobre acoso. La última vez que se puso en marcha fue el pasado 4 de julio, después de que un exmiembro de las Joventut Nacionalista de Catalunya (JNC) explicara en Twitter como un exalto de Convergència, ahora afiliado a Junts, le había acosado sexualmente cuando era menor en 2014. Ese protocolo no tiene restricciones respecto al ámbito temporal o físico de donde suceden los hechos y cobija a todos los afiliados. La formación, además de dejar claro que “la violencia contra las mujeres en la vida política es una violación a los derechos humanos y representa una amenaza contra la democracia”, penaliza conductas como “cualquier acto o omisión de fuerza contra el cuerpo de una mujer” o “humillaciones, vejaciones, exigencia de obediencia o sumisión, coacción verbal, insulto, aislamiento o cualquier otra limitación de su ámbito de libertad”. Podría, entonces, encajar en la denuncia hecha por el equipo de Mas. El mecanismo del protocolo, dice el texto, se activa con una denuncia ante el partido (no tiene que ser ante un juzgado), pero en el caso del exmiembro de la JNC se actuó por su publicación en la red social.

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