El Govern exhumará el segundo semestre de 2022 los restos de Cipriano Martos

La consejera de Justicia del Govern, Lourdes Ciuró, ha anunciado este miércoles que exhumarán en el segundo semestre del año los restos de Cipriano Martos, un militante antifranquista que falleció en 1973 tras haber ingerido ácido sulfúrico durante un interrogatorio en un cuartel de la Guardia Civil. Ciuró lo ha anunciado en el pleno del Parlament en respuesta a una pregunta de la diputada de JxCat Jeannine Abella sobre la identificación de personas desaparecidas en la Guerra Civil y la dictadura y la dignificación de fosas comunes.

En su intervención, Ciuró ha afirmado que la familia de Martos es ejemplo de “esperanza y perseverancia”. “Llevaremos a cabo su exhumación del cementerio de Reus para que pueda descansar al lado de sus familiares y no en una fosa de beneficencia”, ha dicho en una intervención en la que se comprometió a impulsar políticas de memoria democrática.

Tras fallecer el 17 de septiembre de 1973 en el Hospital de Sant Joan de Reus, municipio en el que fue detenido, las autoridades franquistas enterraron a Martos en una fosa del cementerio sin permitir a la familia asistir a la inhumación ni llevarse el cuerpo a su tierra de origen, en Granada.

Miembro del FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriótico), su muerte pasó desapercibida en contraste con la de otros militantes antifranquistas. El periodista Roger Mateos investigó lo sucedido y publicó el libro Caso Cipriano Martos, vida y muerte de un militante antifranquista, en el que expone que, aunque no hay pruebas fehacientes, la hipótesis más plausible es que fue envenenado.

Detenido el 25 de agosto de 1973, dos días después, el 27, Martos fue hospitalizado en estado muy grave tras ingerir ácido sulfúrico. Falleció el 17 de septiembre. Tuvo una atención médica insuficiente; no pudo entrevistarse con su abogado; la justicia no investigó y su familia no fue avisada. La versión oficial fue suicidio.

Martos nació en 1942 en un núcleo rural dentro del municipio de Loja (Granada), en el seno de una familia de campesinos pobres, y emigró en 1969 a Sabadell (Barcelona), donde se politizó, en pleno auge de las organizaciones obreras antifranquistas y donde, en 2019, el Ayuntamiento le dedicó una plaza en el barrio de la Plana del Pintor, donde residió. En Sabadell, Martos se enroló en las filas del Partido Comunista de España (marxista-leninista), una escisión del PCE que propugnaba intensificar las acciones contra la dictadura y no renunciaba a la lucha armada.

La consejera de Justicia se ha comprometido “a impulsar las políticas públicas” de Memoria Democrática, competente en materia de fosas comunes, y ha destacado que el presupuesto para las mismas ha aumentado hasta los 800.000 euros en 2022. Así, el Govern intervendrá en las comarcas tarraconenses del Baix Camp, la Ribera d’Ebre y la Terra Alta, donde se han encontrado restos en superficie; abrirán fosas vinculadas a hospitales de campaña en Urgell, Segrià, Noguera y Terra Alta y actuarán en las fosas fuera de cementerio en Anoia, Moianès y Berguedà. Actualmente, el Govern cuenta con datos de 6.223 personas inscritas en el censo de personas desaparecidas.