Las administraciones y Nissan ultiman la valoración de las plantas catalanas

Gobierno central, Generalitat y Nissan han entrado en la recta final de la valoración de los activos que Nissan dejará una vez acabe su actividad industrial en Barcelona. Los tres estamentos ultiman el cuaderno de venta que presentarán a las empresas interesadas en ocupar los espacios de la Zona Franca (el mayor, donde hoy se ensamblan vehículos), Montcada i Reixach y Sant Andreu de la Barca. Está previsto que el documento esté finalizado esta semana y pueda ser entregado la que viene, después de que se analice de forma conjunta en la reunión que se celebrará el próximo lunes.

Ese documento es básico para que los posibles interesados sepan el coste que tendrá asumir una posible implantación en Cataluña. Se incorporarán los activos existentes, la fuerza y la capacitación de la fuerza de trabajo procedente de la actual plantilla de Nissan y previsiblemente los posibles subsidios que pondrán las administraciones para intentar atraer a posibles inversores, después de que Nissan eludiera continuar la producción en Cataluña pese a tener sobre la mesa un paquete de ayudas públicas superior a los 70 millones.

La intención es entregar esa información para que los interesados elaboren sus ofertas en firme, que deberán remitir como límite a finales de marzo de las administraciones. La decisión sobre los nuevos inquilinos de los terrenos en liza se retrasará previsiblemente hasta después del verano, mientras que el fin de la producción industrial de Nissan se espera para finales de este año. Los avances mostrados en la reunión de hoy dejan en el aire la relevancia de la contratación de una consultora externa para preparar toda la tramitación y que ha supuesto un conflicto entre empresas que ha paralizado los trabajos encargados a KPMG después de que YGroup llevara el caso al tribunal de recursos contractuales.

Se ha abierto una doble vía de intermediación para resolver la adjudicación de los activos de Nissan. Por una parte, Nissan hablará directamente con los fabricantes que apuesten por mantener la actual actividad de fabricación de furgonetas con, a poder ser, la patente de la multinacional japonesa. Por otro lado, las administraciones harán lo mismo con el resto de ofertantes. Los escenarios que siguen siendo prioritarios para las administraciones son la implantación de una fábrica de baterías, el ensamblaje de vehículos eléctricos y un centro de electromovilidad.

En la reunión de este jueves, demandada expresamente por los sindicatos, los sindicatos han mostrado su enfado con las administraciones por la lentitud con la que avanza todo el proceso y el uso electoral que se ha dado a la crisis de Nissan, en la que el Ministerio de Industria ha cargado contra la posición de la Generalitat. “El cuaderno de venta todavía no lo tienen los interesados y quieren [las administraciones] que puedan tener ofertas el 31 de febrero. Parece todo improvisado”, se ha quejado el responsable sindical de CC OO en Nissan, Miguel Ángel Boiza.

En la reunión de hoy, la sexta desde que se creó la mesa de trabajo, han participado el secretario general de Industria del Gobierno, Raül Blanco; la directora general de Industria de la Generalitat de Cataluña, Matilde Villarroya; el subdelegado del Gobierno en Cataluña, Carles Prieto, y el responsable de las Operaciones Industriales de Nissan en España, Frank Torres.