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Cines y locales de ocio recurren su cierre por el rebrote del coronavirus

Los empresarios dicen que se vulnera la libertad de empresa y la igualdad

El País
Barcelona -
Una patrulla de la Guardia Urbana de Barcelona conversa con un trabajador de un local de ocio nocturno, el pasado domingo.
Una patrulla de la Guardia Urbana de Barcelona conversa con un trabajador de un local de ocio nocturno, el pasado domingo.Quique García (EFE)

La patronal catalana de ocio nocturno Fecalon ha recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) la decisión del pasado viernes de la Generalitat de ordenar el cierre de discotecas por el rebrote del coronavirus al considerar que vulnera derechos fundamentales como la libertad de empresa o el de igualdad: “La necesidad y el miedo no lo justifica todo”, detalla el escrito. Por su parte, el Gremio de Cines de Cataluña ha presentado un recurso contencioso administrativo ante el mismo tribunal.

En un recurso presentado ante la sala de lo Contencioso Administrativo del TSJC, Fecalon solicita la suspensión cautelar de la medida y alega que la decisión del Procicat, tomada para contener los rebrotes de coronavirus, vulnera el ejercicio del derecho a la libertad de empresa, la dignidad de la persona y la igualdad ante la ley. ”No pueden limitarse los derechos fundamentales aunque todos podamos pensar que existe una justificación como es el caso. Hemos de exigir que las limitaciones de derechos se hagan conforme a nuestro sistema constitucional”, sostiene Fecalon.

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La organización acusa al ejecutivo catalán de “señalar a unas actividades como foco de contagio cuando ello no se ajusta a la realidad” y de no haber acreditado la necesidad de adoptar una medida “tan drástica” que atenta “claramente contra la libertad de empresa de infinidad de establecimientos”.

“Las medidas higiénico-sanitarias adoptadas en los establecimientos de ocio nocturno no consta acreditado que sean insuficientes, del mismo modo que carece de sentido señalar a discotecas y salas de fiestas como lugares de riesgo”, dice el texto. Recuerda además que, ante la prohibición de abrir las pistas de baile, la mayoría de discotecas y salas se han convertido en “simples locales de hostelería con un volumen de música más elevado”, lo que ha provocado que “multitud” de ellos “directamente hayan optado por no abrir sus puertas”. De hecho, según Fecalon, solo entre en 30 % y un 40 % de estos establecimientos había retomado la actividad tras el estado de alarma.

La patronal aduce también que hasta la fecha no existe ningún indicio de que se haya producido un rebrote en ninguna discoteca o sala de baile de Cataluña, y advierte que la resolución que prohíbe su apertura desde el pasado viernes “sólo ha desplazado el ocio hacia celebraciones en vía pública o domicilios privados, plazas y playas”, que sí pueden suponer focos de infección. También acusa a la Generalitat de un “trato discriminatorio del todo injustificable” y advierte, asimismo, de los “daños irreparables” al sector, que, según sus cifras, cuenta con unos 37.000 puestos de trabajo y 3.600 establecimientos, que podrían desaparecer en su mayoría.

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Recurso de los cines

Los cines afectados por la suspensión de la actividad se acogieron a la vía de excepción solicitando a sus respectivos Ayuntamientos poder continuar con su actividad. Así, a principios de la pasada semana presentaron toda la documentación para justificar las medidas de seguridad y desde el 20 de julio dicha documentación está en poder del Procicat, que no ha resuelto. Ante la indefensión creada por la falta de respuesta del Procicat, después de más de una semana a la espera, el Gremi de Cinemes de Catalunya, ha tomado la decisión de buscar el amparo de la justicia para proteger a los cines afectados del daño irreparable que se les está causando.

Las salas de cine consideran que “la suspensión de actividad decretada es arbitraria, desproporcionada y carente de justificación científica y médica” y recuerdan en su recurso que han aplicado “un estricto protocolo de actuación que garantiza la seguridad de trabajadores y espectadores, por lo que la medida cautelar solicitada no supone un riesgo para la salud pública”. Los exhibidores se lamentan de que “el cierre de los cines supone unas pérdidas económicas inasumibles e irrecuperables para el sector que puede provocar la pérdida de puestos de trabajo y el cierre definitivo de varios cines”.

EL Gremio de cines asegura que cumplen con las medidas impuestas por la Administración: “El desarrollo de la actividad de las salas de cine, en los términos y condiciones que resultan de las propias medidas de seguridad adoptadas por el sector y la Generalitat (Pla de Represa aprobado por el Procicat y que las salas de cine han aplicado) garantizan la seguridad de los usuarios de las instalaciones, como así lo han reconocido y subrayado en los últimos días las principales autoridades científicas y médicas del país en el campo de la epidemiología”.



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