La vuelta al colegio con más inquietud

Los centros educativos abrirán a partir de este lunes, aunque se espera que pocos alumnos vuelvan a las aulas. Y los que lo hagan será por pocos días o por necesidad de conciliación. La orden del Departamento de Educación de reabrir escuelas a partir del lunes ha generado una oleada de críticas inédita por parte de los directores, que apuestan por regresar en septiembre o, en todo caso, no abrir en junio la etapa de infantil.

El plan de reapertura diseñado por Educación contempla que a partir del día 1 de junio todos los centros en zonas que estén en fase 2 —todas las regiones excepto Barcelona y las metropolitanas—, abran las puertas para los alumnos que lo deseen. Pero en infantil ser prevé una acogida en casos con problemas de conciliación; en la mayoría de los cursos, tutorías individuales; y en el último curso de cada etapa, pequeños grupos presenciales para dar orientaciones, despedirlos y dar apoyo a los alumnos vulnerables que no han podido seguir las clases a distancia.

Los directores de centros públicos, en un acto inédito —dependen de Educación y no acostumbran a expresar abiertamente sus críticas—, han hecho público comunicados criticando el plan. Ven muchos interrogantes para regresar de forma segura y critican que el Departamento les haya traspasado la responsabilidad de diseñar cómo hacerlo. Uno de los escritos más duros lo firman los directores de escuelas del Garraf, que destacan las dificultades del regreso en infantil. “Vemos inviable poder entretener niños de estas edades durante cuatro horas sin poder compartir juguetes, sin poder acercarse a amigos…”. “Los profesores queremos volver a la escuela, pero a aquella escuela emocionante y viva, y no a una fantasmagórica y basada en el miedo al contagio”, añaden. Los directores del Alt Empordà lamentan la presión del Departamento para “cumplir unas directrices inalcanzables”, mientras los de L’Hospitalet de Llobregat censuran que se les use como un parking de niños.

Mientras tanto, los docentes ultimaban los detalles para este lunes. En el instituto Hug Roger III de Sort preparan flechas en el suelo o el espacio entre mesas para el martes (el lunes lo reservan para preparativos del profesorado). Priorizarán las tutorías individuales y dejarán la despedida de los alumnos del último curso para el final. “Ya se han visto estos días en la calle, pero en cambio hay niños que necesitan regresar y recibir apoyo porque no tienen una estructura familiar que los ayude, así que ahora tienen una oportunidad que, si se hace bien, no es peligrosa”, defiende la directora, Isabel Banderas. Una puerta abierta para alumnos vulnerables también es el Vallvera de Salt. “Para los alumnos el instituto es un referente, se sienten a gusto”, apunta el director Francesc Simón. El centro abrirá a finales de semana y los alumnos que finalizan etapa solo asistirán un día en grupos pequeños y deberán usar mascarilla.

En la escuela concertada Sant Miquel dels Sants de Vic esperan el 25% de alumnos de infantil y una tercera parte en primaria y secundaria. Aquí asumen que son una solución a la falta de conciliación. “Algunos padres trabajan en la industria cárnica y también muchos despachos han abierto y se hace menos teletrabajo, y no pueden depender de los abuelos”, admite el director Ignasi Roviró.

Menos afluencia esperan en la escuela pública Pau Delclòs, de Tarragona. “Prevemos un bajo porcentaje de asistencia al centro”, señala la directora Coloma Barta, tras enviar una encuesta a las familias. Los alumnos de sexto podrán asistir un día a la semana para despedirse de compañeros y maestros antes de dar el salto al instituto.

En La Salle de Manresa calculan que asistirán solo cuatro alumnos de infantil el lunes, mientras primaria y secundaria regresarán el 8 de junio. Para los cursos intermedios han previsto que solo puedan asistir algún día para hacer cerrar el curso. “Todos tenemos ganas de despedirnos de los niños en persona y no acabar el curso así, en una pantalla, pero en estas condiciones es difícil”, admite la subdirectora Susanna Pla.

El Alt Maresme retrasa la reapertura al 8 de junio

Los municipios del norte del Maresme -entre Canet y Palafolls- pertenecen a la región sanitaria de Girona (en fase 2 el lunes), pero a la zona educativa del Maresme-Vallès Oriental. Los 34 directores de escuelas públicas del llamado Alt Maresme lograron, con apoyo de institutos y centros concertados, que Educación les permitiera retrasar la apertura y hacerlo conjuntamente con el resto de la comarca, previsiblemente el lunes 8. “En una semana teníamos que tenerlo todo preparado para abrir: EPI, preguntar cuántos alumnos y profesores vendrían, organizar espacios, desinfectar… Era imposible”, tercia Silvana Ballbé, representante de la junta de directores de la zona. Las escuelas de primaria del Maresme-Vallès Oriental también firmaron una carta pidiendo abrir en junio solo para los alumnos del último curso.

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