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El alcalde de Sevilla desata la polémica al proponer cerrar la plaza de España y cobrar entrada a los turistas

La oposición reacciona de inmediato: “La solución no es privatizar, sino la tasa turística que el PP rechaza”

La Plaza de España de Sevilla.
La Plaza de España de Sevilla.Alejandro Ruesga
Amalia Bulnes

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz (PP), ha hecho pública este domingo la propuesta del Ayuntamiento de la ciudad de cerrar y perimetrar la plaza de España, joya de la arquitectura regionalista y uno de los principales reclamos turísticos de la capital andaluza, y de cobrar una entrada a los turistas y visitantes para acceder al recinto. El gran complejo levantado por el arquitecto Aníbal González con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929 quedaría exento de pago para los vecinos de la ciudad y de los municipios de la provincia.

Así se recoge en un borrador de convenio que el Ayuntamiento pretende entregar al Gobierno central —copropietario de la zona monumental―, según ha adelantado este domingo el diario ABC de Sevilla. La noticia ha levantado tal polvareda en las redes sociales, por entender que se privatiza un espacio público, y entre la oposición municipal, que el servicio de prensa del Ayuntamiento ha enviado al final de la mañana un audio del alcalde. En él, Sanz precisa que, gracias al cobro de la entrada, se podrá mantener un servicio de vigilancia durante 24 horas y, “lo que es más importante, tener un taller de restauración permanente para el mantenimiento de la plaza de España”. El documento recoge que los ingresos obtenidos por el pago de entrada serían repartidos entre el Estado y el Ayuntamiento en un 25% y un 75%, respectivamente.

El gobierno municipal apuesta por ir cerrando el acceso en diferentes fases. Además de la explotación del espacio abierto, el proyecto prevé dar uso a las partes de la edificación que no lo tienen actualmente o solo esporádico. En este último punto, el plan del consistorio pasa por crear dos nuevos espacios expositivos dedicados a la Exposición de 1929, de la que se proyectan en la ciudad una serie de actividades con motivo del centenario de este acontecimiento internacional en 2029.

Igualmente, el alcalde propone crear un itinerario turístico-cultural por el interior de la Plaza de España sujeto a “una tarifa no disuasoria sustentada en un estudio comparativo” que, a su juicio, “tendría gran aceptación y una significativa capacidad para generar ingresos”.

El convenio redactado por el Ayuntamiento tiene como destinataria la Dirección General de Patrimonio del Estado del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas —en manos de la ministra sevillana María Jesús Montero, que aún no ha confirmado la recepción de dicho documento― para la cesión de uso de determinados espacios en el conjunto monumental. En concreto, al consistorio le corresponde la gestión del semicírculo de la plaza propiamente dicha, mientras que el Gobierno central es el responsable de la amplia galería techada y los edificios que la integran y tienen uso administrativo, entre ellos las oficinas de la Delegación del Gobierno, la Capitanía General y el Museo Histórico Militar de Sevilla, entre otros.

Desde el PSOE se tratará de que Hacienda no apoye la iniciativa. Lo ha dejado claro Alfonso Roríguez Gómez de Celis, diputado por Sevilla y vicepresidente primero del Congreso, en su cuenta de X. “El acceso a través de los edificios que la rodean es competencia del Estado y siempre será libre”, ha publicado, anunciando que impulsará una “iniciativa para que el Gobierno rechace privatizar la Plaza de España”.

La noticia ha contado con la reacción inmediata de gran parte de la ciudadanía, convirtiéndose en tendencia en la red social X, y con el rechazo frontal de la oposición en el Ayuntamiento. El anterior alcalde y portavoz socialista, Antonio Muñoz, ha salido en tromba con diferentes vídeos y comunicados enviados a los medios, en los que califica de “ocurrencia” de Sanz “privatizar el espacio público de la plaza de España”. Muñoz defiende que la solución para este espacio tan deteriorado ―es víctima constante del vandalismo― y que necesita de contundentes medidas para su conservación pasa por implantar la tasa turística “a la que se opone el PP”: “Es la solución para obtener más recursos y poder rehabilitar patrimonio en Sevilla”. “A nadie se le ocurriría cerrar la plaza de San Marcos de Venecia, la plaza Mayor de Madrid o Salamanca o la plaza de la Corredera de Córdoba. Son grandes espacios públicos de convivencia”, sostiene Muñoz.

En su opinión, “el cerrojazo bajo pago es hurtar no solo el espacio público al conjunto de la ciudadanía, sino contradecir el espíritu con que fue concebida por el arquitecto Aníbal González para la Exposición Iberoamericana del 29″. Ha criticado la posición “ambivalente” del PP “hasta el punto de decir sí y no a la vez”, pero ha recordado que el alcalde cerró definitivamente la puerta hace tres meses en el pleno del Ayuntamiento “para no tener que contradecir a la Junta de Andalucía”, cuyo consejero de Turismo, que procede de la Costa del Sol, es contrario “a dejar libertad a los destinos turísticos urbanos para implantar la tasa turística”, ha incidido el portavoz del PSOE municipal.

Por su parte, la portavoz de Con Podemos-IU en el Ayuntamiento, Susana Hornillo, ha asegurado que “si al alcalde le preocupase la conservación de la plaza de España empezaría por prohibir la celebración de megaeventos que ensucian y deterioran este enclave patrimonial”. “Pero no, su idea es enjaularla y disuadir de su uso como espacio público y abierto a la gente”, ha dicho añadido.

Se refiere Hornillos a la reciente reconversión de la plaza de España en escenario de grandes eventos sociales, artísticos y musicales, como el desfile de Dior, la celebración del festival Icónica y la programación paralela a la semana de los Grammy Latinos organizados por la discográfica Universal el pasado mes de noviembre, por los que el Ayuntamiento cobra un canon de uso.

La Junta de Andalucía no le concedió a la plaza de España la distinción de Bien de Interés Cultural (BIC) hasta el año pasado, a pesar de ser uno de los escenarios más emblemáticos y representativos de Sevilla, donde se han rodado películas como Lawrence de Arabia (1962), Star Wars II (2002) y El dictador (2012), a las que se suman otras muchas de producción española.

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