Cae la banda que empleó tácticas militares y drones para asaltar la casa de un clan rival en Estepona

Ocho personas asaltaron el pasado mes de enero una vivienda en Estepona (Málaga, 74.493 habitantes) con una precisión similar a la de un buen ejército: empleando tácticas militares y sirviéndose de un dron de apoyo. Tras una milimétrica planificación previa, tres de los miembros ejercían de vigilantes mientras otros cinco se adentraron en el inmueble. Una vez dentro, ataron con bridas, golpearon y amenazaron con armas de fuego a sus ocupantes. La policía ha detenido a 11 hombres de nacionalidad serbia por los hechos, que se encuadran dentro de un posible ajuste de cuentas entre clanes del país balcánico. El líder del grupo era, además, un objetivo prioritario para la policía de la república exyugoslava y tenía vigente una orden internacional de detención tras fugarse de la justicia en 2021. Nueve de los arrestados están ya en prisión.

La asistencia en un hospital malagueño a cinco ciudadanos serbios que presentaban lesiones graves despertó la atención de la Policía Nacional. Los heridos no denunciaron los hechos que les habían causado las heridas y además mostraron escasa colaboración ante las preguntas de los agentes, pero la investigación policial permitió descubrir que habían sido víctimas de un asalto. En la casa, de hecho, los agentes encontraron restos de sangre en numerosos rincones y signos de que los residentes habían sido maniatados con bridas, además de golpeados y heridos con armas de fuego. Una de las pistolas utilizadas, con el número de serie borrado al igual que otro arma empleada, fue encontrada en los alrededores del inmueble.

El ataque presentaba todos los elementos de una maniobra militar. Contaba con una larga planificación previa, la participación de ocho personas y el apoyo de un dron para controlar los movimientos de los moradores de la vivienda. Los asaltantes dispusieron, además, de una logística compleja, el apoyo económico necesario para alojarse en diferentes pisos los días previos a su irrupción en la casa y de infraestructura desde provincias alejadas de Málaga, como Madrid, Barcelona y Alicante. Cuando se los logró identificar las autoridades serbias confirmaron que formaban parte de una “peligrosa organización criminal de carácter armado vinculada al narcotráfico”, según ha relatado la Policía Nacional en un comunicado este domingo. Su líder, del que no ha trascendido la identidad, estaba en busca y captura en Serbia desde 2021.

El trabajo policial permitió conocer que los integrantes de la organización tenían pensado volver a Málaga para, presuntamente, cometer otro asalto. Y así, cuando varios de sus miembros se desplazaron, los agentes pusieron en marcha un complejo operativo policial para proceder a su arresto. Ante la peligrosidad de los investigados, en el dispositivo participaron agentes tanto del Grupo Especial de Operaciones y como del Grupo Operativo Especial de Seguridad. Así se detuvo a 11 personas, la mayoría en Málaga pero también en las provincias de Madrid y Barcelona. Durante los registros policiales, casi todos en Estepona, e intervinieron, además de las pistolas con el número de serie borrado, más de 100 cartuchos, una bolsa con utensilios que los agentes creen que iban a ser utilizados en otro ataque, siete documentos de identidad falsos, un dron y 16.000 euros en efectivo.

A los arrestados se los considera presuntos responsables de los delitos de detención ilegal, robo con violencia, tenencia ilícita de armas, lesiones, falsedad documental, tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. Además del cabecilla, otro integrante tenía en vigor otra orden internacional de detención y un tercero una orden de ingreso en prisión en España. Tras ser puestos a disposición judicial, nueve de ellos han ingresado en prisión provisional.