Las salidas de embarcaciones desde Marruecos y el Sáhara trasladan la presión migratoria también a Lanzarote

La isla de Lanzarote, la más cercana al continente africano, se ha reactivado como destino de la ruta canaria y ha vuelto a ver cómo sus instalaciones de acogida se colapsaban este viernes durante varias horas. La intensidad de los rescates ha desbordado durante el día el Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE), con capacidad para 200 personas, el lugar donde la Policía Nacional traslada a los recién llegados para identificarlos. Esta situación obligó al Consorcio de Seguridad y Emergencias de Lanzarote a instalar carpas en el propio muelle de Puerto Naos que funcionasen como un CATE provisional, según ha relatado su gerente, Enrique Espinosa. “La situación aquí es muy complicada”, explicaba en conversación telefónica. Durante la mañana del viernes esperaban en el muelle de Puerto Naos unas 70 personas, los varones adultos, dado que las mujeres y los niños se trasladaron a un centro de acogida y otro de menores en la isla.

A primera hora de la tarde, la Delegación del Gobierno en Canarias procedió a derivar a unas 150 personas a instalaciones de Gran Canaria y Tenerife, según ha relatado el propio Espinosa, lo que ha permitido que se desmantelase esta instalación a las cuatro de la tarde.

Lanzarote ya sufrió una situación similar a principios de agosto, después de que Canarias recibiese medio millar de migrantes en patera en solo 24 horas. Aquella situación, como sucede ahora, “tensionó” los recursos de la isla y obligó al Consorcio a instalar carpas auxiliares en el muelle de Arrecife para llevar a cabo las reseñas policiales, según admitió entonces la subdelegada del Gobierno en Canarias, Teresa Mayans.

Las embarcaciones que arriban a esta isla parten del sur de Marruecos y del Sáhara Occidental. Suelen llevar entre 20 y 60 personas a bordo que, normalmente, son marroquíes. Lanzarote, con más de 5.000 llegadas en lo que va de año, se había convertido en el principal destino de la ruta canaria en 2023, pero, más allá de algunos picos puntuales, parecía que las fuerzas de seguridad marroquíes mantenían esa zona más controlada de lo habitual. Tras unas semanas con el foco en El Hierro y Tenerife, debido a las intensas llegadas desde Senegal, se abre de nuevo un flanco en Marruecos y el Sáhara.

A lo largo del jueves arribaron a Lanzarote 229 migrantes, según las cifras de las fuerzas de seguridad. Ya el viernes, el servicio de emergencias 112 ha reportado la llegada de al menos otras 159 personas a bordo de cuatro embarcaciones. A última hora de la tarde del viernes, los equipos de rescate se encontraban en alta mar en busca de una nueva embarcación, según informó el 112.

Desde que comenzó el verano, el foco migratorio se ha centrado en la pequeña isla del El Hierro. Sin embargo, en el conjunto del año ha sido Lanzarote, el principal puerto de llegada de las embarcaciones que parten de África, con unos 5.300 desembarcos hasta el pasado fin de semana. Según datos oficiales, que no son públicos, le siguen Gran Canaria (4.026), Tenerife (3.169), Fuerteventura (3.169) y La Gomera (36).

Con más de 20.000 personas rescatadas hasta el domingo 8, según el último recuento oficial, la ruta canaria está viviendo un repunte de más del 50% respecto al año pasado. Estas semanas se han registrado jornadas con más de 1.000 rescates y empieza a naturalizarse que haya días con 700 u 800 llegadas. Solo este viernes, Salvamento Marítimo ha rescatado a algo más de 700 personas que navegaban en aguas próximas a las islas de Lanzarote, La Graciosa, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife y El Hierro. Estas llegadas se suman a las 754 que se registraron durante todo el jueves. Son cifras sin precedentes desde 2006, y que convierten al presente ejercicio ya en el segundo con más llegadas de toda la historia.

Por este motivo, el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, se trasladará el próximo lunes a Canarias para presidir la reunión que se celebrará en el Centro de Coordinación Regional de Canarias, en Las Palmas de Gran Canaria. A este encuentro asistirán los máximos responsables de las fuerzas de seguridad en las islas, así como representantes de los ministerios de Defensa, Hacienda, Migraciones y Transportes. También participarán el delegado del Gobierno en las islas, Anselmo Pestana, y el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, con quien Marlaska ha mantenido en las últimas semanas tensos cruces de declaraciones sobre la gestión de las llegadas. Clavijo ha asegurado en su cuenta de X (antes Twitter) que espera que el Gobierno de España “reaccione” ante la presión migratoria que estos días “rebasa todos los máximos históricos” y que el ministro del Interior en funciones ofrezca “soluciones efectivas” en su visita a las islas el próximo lunes.