La defensa de Camps intenta anular la causa contra él en el arranque del juicio por el ‘caso Gürtel’
La abogada del expresidente valenciano, que se enfrenta a dos años y medio de cárcel, alega la supuesta vulneración de derechos y la prescripción de delitos
La defensa de Francisco Camps, expresidente de la Generalitat Valenciana, se ha lanzado al ataque este mismo lunes para tratar de tirar abajo la acusación que pende sobre el exdirigente del PP por su presunta implicación en el caso Gürtel. En la primera sesión del juicio celebrado en la Audiencia Nacional, que ha comenzado con la fase de cuestiones previas, su abogada ha presentado al tribunal una serie de alegaciones para intentar anular la causa abierta contra el político y suspender la vista. Según la letrada, entre otros aspectos, en este proceso se han “vulnerado” derechos fundamentales del antiguo jefe del Gobierno autonómico, además de plantear la posibilidad de que los delitos que se le atribuyen estarían prescritos o que, incluso, ya habrían sido descartados en otra investigación judicial.
Camps afronta una petición de la Fiscalía Anticorrupción de dos años y medio de cárcel por delitos de prevaricación y fraude. Según el ministerio público y el juez instructor José de la Mata, el entonces presidente regional participó en la trama para amañar contratos en beneficio de la red Gürtel, encabezada por el empresario Francisco Correa; concediéndole así adjudicaciones menores de Fitur 2009, “como venía haciendo desde 2005”. La vista oral contra él —y casi otra treintena de personas— debía haber comenzado la pasada semana, pero el tribunal decidió posponer su arranque siete días para evitar nulidades después de que varias defensas —entre ellas, la del ex alto cargo popular— alegasen dificultades para acceder a documentos del sumario.
Así que esta nueva cita de Camps con la justicia ha comenzado finalmente este lunes, pasadas las 10.00 de la mañana. Antes, a las afueras de la Audiencia, el expresidente valenciano ha vuelto a cargar contra la Fiscalía, a la que ha acusado de encabezar una “persecución feroz” contra él y cerrar “pactos secretos y obscenos” con otros acusados para conseguir condenarlo. Al menos una decena de procesados han confesado y alcanzado acuerdos de conformidad con el ministerio público: entre ellos, los tres líderes de Gürtel (Francisco Correa; su número dos y ex secretario de Organización del PP en Galicia, Pablo Crespo; y el hombre de la red en Valencia, Álvaro Pérez, alias El bigotes).
“[Es una] obscenidad [que la Fiscalía] busque a personas para intentar inculpar a otras a cambio de rebajas en las exorbitantes peticiones de condena que pide muchas veces”, ha arremetido Camps contra Anticorrupción: “Fíjese lo que es decir: ‘Le voy a meter 20 años en la cárcel, pero no estará ni un solo día si dice que no sé quién hizo no sé qué cosa’. En un Estado de derecho, un país moderno y civilizado esto no debería corresponder”.
El exdirigente del PP, que se ha postulado para volver a la primera línea de la política, ha desplegado una doble ofensiva durante los últimos años. Por una parte, ha intentado frenar que se celebre este juicio en la Audiencia Nacional —ha planteado incluso que se plantee una batería de cuestiones prejudiciales al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE)—. Y, por otra, Camps ha tratado de defender su etapa al frente del Ejecutivo regional, pese a la multitud de altos cargos ya condenados en otros procesos, y a que la propia Audiencia dio por probada la financiación ilegal del partido en la comunidad durante las campañas electorales de 2007 y 2008, cuando él era presidente.
En esta línea, el equipo jurídico de Camps no ha querido perder el tiempo y este lunes ha reemprendido el ataque. Además de la vulneración de derechos y de la prescripción, su defensa ha afirmado al tribunal que la participación de Camps “en la adjudicaciones” a Gürtel ya se investigó en el caso de los trajes. Un jurado declaró “no culpable” al expresidente en esa causa.
Además de Camps, en el banquillo se sientan otras 25 personas (otros dos procesados ya fallecieron). Entre ellos, tres consejeros de su Ejecutivo y una decena de técnicos de la Administración valenciana, además de los principales miembros de la trama corrupta: Correa, Crespo y El Bigotes, quien logró los contratos a dedo para Orange Market (una de las empresas de la red corrupta) por su amistad con Camps, según las conclusiones de la investigación y las intervenciones telefónicas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.