El asesinato de Isabel Carrasco irrumpe en el segundo juicio del ‘caso Púnica’
La Guardia Civil detalla cómo Marcos Martínez acudió a la trama para “consolidar” la presidencia de la Diputación de León tras asumir el cargo después del crimen
El asesinato de Isabel Carrasco, la presidenta de la Diputación de León muerta a tiros en mayo de 2014, ha irrumpido este lunes en el segundo juicio que se celebra en la Audiencia Nacional por el caso Púnica. El principal investigador de la Guardia Civil sobre esta trama de corrupción, que ha declarado como testigo ante el tribunal, ha detallado cómo el sucesor de la dirigente del PP, Marcos Martínez Barazón, asumió el cargo de forma interina tras el crimen y cómo, debido a que su figura se encontraba muy cuestionada dentro de la institución y dentro del propio partido, decidió recurrir a la presunta red criminal para “consolidar su posición” y “continuar” así en el puesto que acababa de heredar.
“Martínez, tras el fallecimiento de Isabel Carrasco, necesitaba consolidarse en su puesto como presidente de la Diputación. Y, por esa razón, tenía intención de mejorar su reputación online”, ha subrayado el agente de la Unidad Central Operativa (UCO) del instituto armado. En esta parte del sumario, los investigadores concluyeron que se desviaron fondos públicos para pagar trabajos privados de reputación digital en beneficio de políticos del PP, para lo que se contactó con los empresarios Alejandro de Pedro y José Antonio Alonso Conesa, que en el pasado fue alcalde socialista de Cartagena (Murcia).
En su escrito de acusación, la Fiscalía mantiene que la trama desembarcó en la diputación durante la presidencia de Isabel Carrasco. Según el ministerio público, De Pedro y Alonso se “concertaron” con ella para hacerle “trabajos dirigidos a limpiar y cuidar su reputación en las redes sociales, y para neutralizar los efectos de las noticias negativas que se publicaban sobre su persona por otros medios en la red, como su implicación en casos judiciales y denuncias de corrupción”. Una operativa que presuntamente conocía Martínez Barazón, también alcalde del municipio de Cuadros, y a la que recurrió tras asumir el cargo.
En su caso, según ha recalcado este lunes la Guardia Civil, el sucesor de Carrasco buscaba perpetuarse en el puesto que acababa de asumir. “Alejandro de Pedro se ofreció a trasladar el mensaje a altos cargos del PP nacional para sostener la figura de Marcos Martínez, y defender su continuidad [...] Se ofrecieron a concertarle reuniones con cargos para ayudarle en su necesidad de sostenerse como presidente”, ha explicado el agente de la UCO, que ha mencionado que esos contactos se producirían en una convención del partido que se celebró en Murcia, a la que asistieron altos dirigentes de la formación, como María Dolores de Cospedal, entonces secretaria general de los populares.
En ese contexto, la Fiscalía enmarca los trabajos de reputación en internet en favor de Martínez Barazón, para quien pide ocho años de cárcel en este segundo juicio del caso Púnica: “Después del fallecimiento de la presidenta en mayo de 2014, el acusado ocupó la Presidencia en funciones de la Diputación. Su interés por darse a conocer ante los ciudadanos de León, construirse una identidad positiva en las redes sociales y recibir asesoramiento para su promoción política fue aprovechado por De Pedro y Alonso para concertar con el mismo un nuevo plan”.
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