Los fuegos dan una tregua a España

El fuego da una pequeña tregua a España, al igual que el calor. Los grandes incendios declarados a lo largo de la semana han comenzado a ser estabilizados y controlados, especialmente en Andalucía, Canarias y Castilla y León, pero sigue preocupando la situación de Galicia. La superficie forestal arrasada por el fuego en España asciende ya a 222.800 hectáreas, el 38,5% del total del territorio que ha ardido en Europa (578.956 hectáreas) desde enero, según datos del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS, por sus siglas en inglés) basados en imágenes por satélite. Se trata de la peor ola de incendios desde que se tienen registros.

El EFFIS usa para sus estimaciones imágenes aportadas por el satélite Copernicus, y en su última actualización arroja un saldo de 222.800 hectáreas afectadas por el fuego en el país en lo que va de año, un 11,2% más que el 23 de julio. Estos datos confirman que España se enfrenta a la peor ola de incendios de la serie histórica que maneja el sistema (iniciada en 2006), hasta ahora liderada por el año 2012, cuando los incendios afectaron a 189.376 hectáreas; seguido de 2017, con 130.920. No obstante, según los registros que figuran en la web del Ministerio para la Transición Ecológica, que se remontan a 1968, el peor año de incendios de la historia de España fue 1985, con 484.475 hectáreas forestales arrasadas.

Los fuegos, en cualquier caso, han dado un respiro casi a la vez que las temperaturas. Pero, en el caso del calor, la tregua será breve. Desde el sábado y, especialmente, el domingo, se espera un nuevo “episodio cálido” sobre la Península y aunque de momento su extensión, duración e intensidad generan dudas, los valores se situarán entre 5 y 10 grados por encima de lo normal en amplias zonas del país, ha avanzado Rubén Del Campo, portavoz de la Aemet. El próximo fin de semana comenzará un ascenso térmico y se superarán los 35 grados en amplias zonas del interior de la Península, sobre todo en el oeste, centro y sur, y se alcanzarán hasta 40 grados en los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir.

La situación de los principales incendios que estaban activos es la siguiente:

Controladas las llamas en San Roque y a las puertas de Doñana

Los bomberos forestales del Plan Infoca —plan andaluz contra incendios— han conseguido salvar el parque nacional de Doñana del peligro que suponía el incendio que se declaró el lunes por la tarde en Almonte (Huelva). La Junta de Andalucía ha controlado en la tarde de este miércoles tanto ese fuego como otro en la cercana localidad de Bonares. Las llamas se han quedado lejos del entorno protegido gracias a los cortafuegos, perimetrados con maquinaria, que han impedido que las pavesas ardientes se acercasen a zonas más críticas.

Por ahora, el Plan Infoca ha desactivado el nivel 1 de emergencias y se ha permitido el regreso a sus casas a los más de 300 desalojados, entre propietarios de segundas residencias y temporeros. Después de que más de 150 efectivos se tuvieran que afanar durante el lunes y el martes en controlar las llamas, este miércoles se ha pasado “a una situación de cierta normalidad” pero “con cierta prudencia” al estar “en pleno verano con unas temperaturas altas”, ha afirmado el delegado de la Junta en funciones en la provincia de Huelva, Álvaro de Burgos. Por ahora, entre Bonares y Almonte, permanecen desplegados casi medio centenar de efectivos.

El de Almonte no es el único incendio que sigue activo en la zona más occidental de Andalucía. En San Roque (Cádiz), otro medio centenar de bomberos y dos helicópteros han logrado estabilizar un incendio en la sierra del Arca. La orografía y el viento de poniente —seco y caliente en esa zona— ha hecho que los efectivos hayan pasado una noche complicada, en la que se ha tenido que desalojar a propietarios de viviendas rurales y a las 300 personas que pernoctaban en el camping La Casita. Esta mañana, desde el Plan Infoca han apuntado que el fuego presenta una “evolución favorable”. “Seguimos trabajando para su estabilización”, han apuntado en su perfil oficial de Twitter.

Málaga se sobrepone a la cadena de incendios

Los incendios tampoco dan tregua a Málaga, una de las provincias más castigadas por las llamas en lo que va de verano. Hasta tres focos coincidieron en la tarde del martes en puntos de Estepona, Benahavís y Mijas, lo que obligó a desalojar a más de 600 personas de distintas urbanizaciones de la Costa del Sol y a cortar el tráfico en la autopista A-7 y la carretera A-7175. Unos 400 bomberos y una decena de medios aéreos intervinieron a la vez en estos municipios.

El fuego de Estepona se originó en el residencial Beverly Hills, en las cercanías del polígono industrial y donde vive el grueso de personas que fueron evacuadas. Fue el primero en quedar controlado a última hora de la tarde, mientras los efectivos del Infoca —plan andaluz contra incendios— conseguían hacer lo propio con el de Benahavís pasadas las once de la noche. El de Mijas, sin embargo, dio más problemas. Su intensidad obligó primero a cortar un tramo de 14 kilómetros de la autopista A-7 y, más tarde, a desalojar a los vecinos de cuatro urbanizaciones de la zona. A media tarde la Junta de Andalucía activó el nivel 1 de emergencias y desplegó un puesto de mando avanzado en la localidad. Cerca de 300 bomberos y una decena de medios aéreos participaron en las tareas de extinción, que se desarrollaron también durante la noche.

El fuego, finalmente, ha sido dado por controlado en la mañana de este miércoles. “Seguimos trabajando en su remate y liquidación”, han subrayado fuentes del Infoca. Sus efectivos continúan, también, trabajando en el perímetro de las 2.000 hectáreas calcinadas por el incendio que afectó hace una semana a la sierra de Mijas y a los municipios de Alhaurín el Grande y Alhaurín de la Torre, que todavía no ha sido dado por extinguido. A mediados de junio, otras 3.500 hectáreas ardieron en Sierra Bermeja, también en la Costa del Sol.

Controlado el incendio en el entorno de Silos

El ligero descenso de las temperaturas ha contribuido a atenuar la gravedad de los incendios en Castilla y León. Uno de los frentes activos, aunque ya controlado y solo con el peligro de reproducciones en los rescoldos, se encuentra en las proximidades de Quintanilla del Coco (Burgos), donde ardieron más de 3.000 hectáreas por un agricultor que cosechaba a horas indebidas. El fuego, que permanece en nivel 1 y bajo vigilancia, arrasó varias viviendas en pueblos cercanos y amenazó el patrimonio histórico y cultural del monasterio de Santo Domingo de Silos. También se cree que han sido provocados varios focos ya dominados en Toro (Zamora), donde el martes por la tarde comenzaron unas llamas en un perímetro de cinco kilómetros.

En la tarde de este miércoles se ha originado un fuego de nivel 1 en una zona de pinares de Cuéllar (Segovia). Los demás incendios activos en las últimas horas ya se encuentran en nivel 0. El de Montes de Valdueza, en León, ha quemado 1.400 hectáreas, mientras que el de San Juan de la Nava, en Ávila, también ha remitido su actividad. La Consejería de Medio Ambiente de la Junta ha indicado que, según el sistema Copernicus, el incendio desatado en la zona abulense de Cebreros provocó que se arrasaran 4.200 hectáreas. En todos estos casos se produjeron varios desalojos de localidades próximas a los frentes y a las que también perjudicaban los humos generados.

El principal riesgo del que advierten actualmente las autoridades y los bomberos consiste en que puedan darse reproducciones sobre los rescoldos o áreas aún calientes tras incendios tan graves como los sufridos en Zamora, donde se han tenido que apagar algunos conatos de reactivación. La tarde de este miércoles un foco secundario de un fuego en Portugal ha saltado al municipio de Trabazos, adonde se han desplazado nueve medios aéreos y tres brigadas helitransportadas. El peligro viene también de posibles aumentos de temperaturas, tras algunos días de calor menos intenso que los anteriores, que se puedan aliar con el viento y propiciar nuevos frentes.

En Castilla-La Mancha, mejora la situación de los incendios. Los de Humanes (Guadalajara) han quedado extinguidos después de quemar 2.000 hectáreas, y así también el de Malagón (Ciudad Real). El de Sartajada (Toledo) ha pasado a nivel 0 este miércoles.