Feijóo potencia a Andalucía en la cúpula del PP para amarrar la Junta

Las elecciones en Andalucía son la primera prueba de fuego para el liderazgo de Alberto Núñez Feijóo. Se celebren en junio o en otoño, el recién elegido líder del PP será examinado en esa cita con las urnas como jefe de los conservadores. Feijóo no puede permitirse que la izquierda recupere el poder en la comunidad más poblada de España, uno de los feudos históricos del PSOE que le fue arrebatado por la derecha en 2018. No es casualidad, por tanto, que el 20º congreso en el que el barón gallego ha sido entronizado se haya celebrado en Sevilla, con Juan Manuel Moreno Bonilla como anfitrión. El presidente andaluz es amigo de Feijóo y juntos han forjado el eje de poder gallego-andaluz sobre el que pivotará el nuevo PP. Pero en el fuerte peso de Andalucía en la dirección de Feijóo, con dos consejeros del Gobierno andaluz en Génova, 13, hay también una clave electoral, según interpretan distintas fuentes populares. El barón gallego pone todos los cañones de fuego del partido mirando a Sevilla para tratar de retener la joya de la corona, la Junta de Andalucía.

Nadie recuerda en el PP que en el núcleo duro del partido se hayan sentado antes dos miembros tan relevantes de un mismo Gobierno autonómico. En el comité de dirección de Feijóo lo harán a partir de este lunes el consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo, como coordinador general del PP; y el consejero de Hacienda, Juan Bravo, como vicesecretario de Economía. De momento, ambos compaginarán sus labores en la cúpula con sus responsabilidades de Gobierno, pero al menos Bendodo se centrará en exclusiva en el trabajo orgánico cuando pasen las elecciones andaluzas. Al incorporarlos a su dirección, Feijóo los sitúa en el escaparate nacional y les da proyección ante la cita con las urnas. “Ganar Andalucía es clave. Es el primer hito importante. De hecho, la victoria de Juanma es un impulso para todos porque daría ánimo y optimismo”, analiza un barón popular, que interpreta como otros que Feijóo ha respaldado a Moreno Bonilla con esas incorporaciones en su núcleo en clave también electoral.

En el entorno del líder insisten en que la composición del comité de dirección no obedece a cuotas territoriales, sino que Feijóo ha buscado cuadros solventes y experimentados que le ayuden a llegar a La Moncloa. El líder ha formado un equipo pequeño y operativo, una especie de gabinete ampliado, con apenas cinco vicesecretarías. Galicia tiene la más relevante, la de Organización, que llevará el secretario general del PP gallego, Miguel Tellado, y hombre fuerte de Feijóo. El eurodiputado Esteban González Pons es otro de los dirigentes de peso con un puesto a su medida, la vicesecretaría Institucional.

Ante la influencia gallega y andaluza, el PP madrileño aparece desdibujado en el comité de dirección de Feijóo, con una vicesecretaría de Coordinación Autonómica que ocupará Pedro Rollán, que tampoco pertenece al anillo de confianza de Isabel Díaz Ayuso. Con todo, fuentes del entorno de la presidenta restan importancia al reparto de puestos. A Ayuso le interesa más conseguir el poder en el partido en Madrid que le negaba Pablo Casado. La líder madrileña ya tiene pactada con Feijóo la fecha del congreso del PP de Madrid en el que se alzará con la presidencia. Lo espera para mayo.