La oposición pide reprobar a Garzón e invita al PSOE a que se sume

Los grupos de la oposición han acogido como un regalo las críticas de la parte socialista del Gobierno al ministro de Consumo, Alberto Garzón. PP y Ciudadanos han esgrimido las palabras de este martes del titular de Agricultura, el socialista Luis Planas, contra su colega de Consumo, de Unidas Podemos, para avalar las solicitudes que ambas formaciones, al igual que Vox, han presentado en el Congreso a fin de que la Cámara repruebe a Garzón. Es más, la portavoz popular, Cuca Gamarra, ha animado a los socialistas a que se sumen al reproche parlamentario a su compañero de Gobierno por sus declaraciones contra la carne procedente de macrogranjas.

La controversia sobre Garzón, que no cesa desde el comienzo del año, está agrietando de nuevo las relaciones entre los socios del Ejecutivo y la tensión entre ambos se ha trasladado este martes al Congreso. Unidas Podemos ha cargado contra los socialistas por permitir que la Mesa de la Cámara haya aceptado tramitar la solicitud de la oposición de que comparezca el ministro de Consumo. Ese tipo de peticiones —que en este caso todavía deberá votarse en la Diputación Permanente porque el periodo normal de sesiones no comienza hasta febrero— raramente son rechazadas, pero la coalición izquierdista cree que ahora no debería ni admitirse a trámite por entender que solo pretende propagar “un bulo”. “El Congreso no puede hacer política terraplanista y admitir a trámite iniciativas basadas en fakes [”falsedades”]”, ha dicho el representante de Unidas Podemos en la Mesa Javier Sánchez Serna, quien ha cargado contra el PSOE “por bajar los brazos ante la política del bulo”.

El socio minoritario del Gobierno defiende que toda la polémica está basada en una falsedad, ya que, insiste, el ministro, en sus controvertidas declaraciones al diario británico The Guardian, solo denostó las macrogranjas, no el conjunto de la producción cárnica en España. Pero la oposición no suelta la presa y sostiene que el ministro afirmó que “la carne española es de peor calidad”, en palabras del portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal. “Se ha causado un gravísimo daño a la economía española”, ha remachado la popular Gamarra.

Las dos formaciones han tomado fuelle para mantener el tema vivo con las declaraciones de los propios socialistas, incluido el presidente del Gobierno, desmarcándose del ministro de Unidas Podemos para exigir que Pedro Sánchez lo destituya. Tanto PP como Ciudadanos y Vox ya habían lanzado una batería de iniciativas parlamentarias y este martes la reforzaron presentando cada uno de ellos propuestas para que el Parlamento reprueba a Garzón, también coordinador general de Izquierda Unida. Gamarra incluso ha invitado al PSOE “a que se moje” y vote en el Congreso contra su socio de Ejecutivo. Las declaraciones a varios medios durante toda la mañana del ministro Planas desaprobando a su colega de Consumo han corrido de boca en boca de los dirigentes de la oposición. En un tuit, la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha afirmado que “comparte” las apreciaciones del titular de Agricultura y ha pedido a Sánchez que actúe en consecuencia.

Pese a la polvareda que el asunto ha levantado, PP y Ciudadanos tampoco se declaran a favor de las macrogranjas. Gamarra ha admitido que su partido es contrario y Bal, aunque más ambiguo, ha evitado apoyarlas. Pero ambos insisten en que el ministro confundió ese tipo de instalaciones con toda la ganadería intensiva y por eso debe abandonar el Gobierno.