El Congreso regresa al voto telemático de sus diputados ante la proliferación de contagios

Todos los grupos parlamentarios representados en el Congreso han sufrido en los últimos días alguna baja por contagio de covid-19 o por contacto directo con personas afectadas, según han confirmado este martes la mayoría de sus portavoces. La Mesa de la Cámara ha estudiado así, a propuesta del PSOE y Unidas Podemos, retornar al voto telemático de los diputados y esa medida ha sido aprobada por unanimidad y se aplicará ya de manera inmediata en las votaciones previstas esta misma semana.

Los partidos han discutido sin ponerse de acuerdo sobre la necesidad de aplicar otras medidas, como la limitación de aforos o la pertinencia de exigir el pasaporte covid para moverse por el recinto. Esas actuaciones se dejan a lo que determine la Comunidad de Madrid y sus autoridades sanitarias tras participar mañana en la Conferencia de Presidentes convocada en pleno auge de esta sexta ola de la pandemia por el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez. La mayoría de los partidos del Congreso, tanto de la oposición de derechas como incluso aliados frecuentes del Ejecutivo como PNV o Compromís, han criticado la falta de liderazgo y de propuestas del Gobierno ante esa cita y la proximidad de las fiestas navideñas.

El Gobierno, sin embargo, rechaza la inacción de la que le acusan en la sexta ola ante el repunte de los contagios. “El Gobierno se apoya en decisiones colegiadas y compartidas. Desde el inicio [de la pandemia], ni el Gobierno ni las comunidades autónomas han dejado de trabajar y de hablar. En todo momento lo hemos hecho”, ha afirmado Isabel Rodríguez. La ministra portavoz, que ha insistido en que la hoja de ruta del Ejecutivo pasa por la vacunación y la prevención, ha subrayado tras el Consejo de Ministros que la convocatoria urgente de la Conferencia de Presidentes se debe a que precisamente hace un mes no se hablaba de la variante ómicron porque nadie la conocía y muchos menos su capacidad de propagación, informa José Marcos.

Isabel Rodríguez ha argumentado: “Proponer y estudiar medidas con las comunidades autónomas se viene haciendo desde marzo de 2020. No hay ninguna novedad en esto. Hace cinco semanas no conocíamos ómicron, no podíamos pensar en su evolución”. Y añadió para justificar la razón de la conferencia ahora: “Precisamente, como estamos en fechas importantes de cara a la Navidad, la prudencia nos ha traído hasta aquí y la leal colaboración entre administraciones”. La también ministra de Política Territorial ha insistido en que el alto porcentaje de vacunación funciona, como la dosis de refuerzo está demostrando en la población más vulnerable. “A diferencia de otros países, hemos hecho esfuerzos que nos permiten estar en otra situación que otros países”, ha querido poner en valor.

La Mesa del Congreso no ha discutido demasiado la iniciativa planteada por PSOE y Unidas Podemos para volver al voto telemático, ni tampoco más tarde en la Junta de Portavoces. En ese punto ha habido unanimidad y no se han planteado reparos ni oposición. El Congreso recurrió al voto informático en la primavera de 2020, cuando se desató la pandemia, y lo mantuvo así hasta finales de octubre pasado, cuando se volvió a permitir el voto presencial para el 100% de los parlamentarios. Este periodo de sesiones, en cualquier caso, está a punto de terminar y ahora queda por fijar por cuanto tiempo se aplicará este sistema en el futuro —el siguiente empieza en febrero—. Dependerá de cómo evolucione la pandemia.

El debate sí ha surgido sobre la posibilidad de limitar el aforo de los diputados que pueden acudir diariamente al Congreso al pleno y a las comisiones aún pendientes, y también sobre el uso del llamado certificado covid para acceder al hemiciclo y a otras instalaciones de las Cortes. Una medida que demandó Unidas Podemos y que ni el PSOE ni el PP refrendan a la espera de ver qué establecen las autoridades sanitarias de la Comunidad de Madrid. Los portavoces parlamentarios de esas dos formaciones, tanto el socialista Héctor Gómez como la popular Cuca Gamarra, apuntaron que se ceñirán a lo que resuelvan sobre nuevas restricciones los responsables sanitarios de la autonomía.

El representante de Unidas Podemos, Pablo Echenique, lamentó que no hubiesen prosperado esas dos medidas añadidas sobre topes para los aforos y test de entrada, especialmente para las cafeterías y restaurante del Congreso, y señaló que espera que el tiempo no le dé la razón si la situación pandémica empeora en breve. Echenique aprovechó para descalificar como “temerario” que los dirigentes de la Comunidad de Madrid, con Isabel Díaz Ayuso a la cabeza, y otros presidentes autonómicos, defiendan ahora que se imponga la obligatoriedad de llevar mascarillas en el exterior y sin embargo hayan aplicado fuertes recortes a la atención primaria sanitaria en sus territorios.

Esquerra Republicana, el PNV y Compromís se mostraron partidarios de implantar el pasaporte covid en el Congreso, ya sea en todas sus dependencias o al menos en sus restaurantes o cafeterías, algo que rechazaron Más País y la CUP, que no ven oportuna esa restricción ante los altos niveles de vacunación en el país, por encima del 92%.

El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, respaldó la iniciativa sobre el pasaporte y argumentó que el Congreso es un centro de trabajo con una “movilidad excepcional”, que merece “medidas especiales” para proteger y prevenir los contagios también entre los trabajadores de las Cortes. El portavoz del PNV, Aitor Esteban, reafirmó su apoyo a todas las medidas que quiera abordar el Congreso, incluida la toma de temperatura, la exigencia de estar vacunado para acceder a la Cámara y la recuperación del voto telemático de manera generalizada para evitar que, entre positivos y confinados por contactos estrechos, se acaben “alterando las mayorías parlamentarias”.

Varios partidos, y hasta Vox, justificaron el retorno de ese voto a distancia porque se han visto afectados por contagios en todas sus filas. El portavoz de Compromís, Joan Baldoví, aludió a que los partidos tenían así que “dar ejemplo”.

Aliado habitual de Compromís, desde Más País, su portavoz y líder, Íñigo Errejón, consideró que el certificado covid no es necesario en el Congreso ante las altas tasas de vacunación, pero sí respaldó retomar el voto telemático para evitar desplazamientos innecesarios y el teletrabajo para el personal de la Cámara. Una postura que revalidó la diputada de la CUP, Mireia Vehí: “Tenemos que dar ejemplo, el Congreso ya fue foco de contagio al inicio de la pandemia”.

La secretaria general del grupo Vox, Macarena Olona, no solo ha rechazado la propuesta sobre el certificado covid para el Congreso, sino que ha aprovechado para denigrar esa idea, que ha tachado de “medida inquisitorial, dictatorial y discriminatoria” y “un instrumento de control social” por parte del Gobierno central “para confrontar a los ciudadanos”. Olona anunció, “como española, mujer libre y vacunada con pauta completa”, que se niega a facilitar ese certificado en los bares y locales de las autonomías que ahora lo exigen.

La diputada de extrema derecha apuntó precisamente a Andalucía —en donde se especula que puede presentarse como candidata en las próximas elecciones— y anunció que su partido presentará ahora un recurso de casación contencioso administrativo en el Tribunal Superior de Justicia de esa comunidad contra esa medida, además de hacer lo propio en otras autonomías que lo exijan. Su idea es cumplir los trámites para llevar esa oposición, incluso, hasta el Tribunal Constitucional.