Los presupuestos y todo lo demás

Hubo un tiempo en el que los portavoces parlamentarios tenían su gran día en el debate de Presupuestos Generales del Estado. Los responsables económicos de cada grupo se reservaban para el trámite de enmiendas parciales donde se desmenuzaban las Cuentas. En el debate de las enmiendas a la totalidad de los presupuestos para 2022 se le disparó este miércoles a todo, con fuego cruzado en la derecha y en el independentismo.

No resultó en vano para la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ir preparada y predispuesta a responder sobre asuntos al margen. Nada resultó ajeno. ETA, violencia de género, criminalidad o inmigración, artículo 155 de la Constitución, la cárcel de los independentistas... fueron asuntos expuestos contra el Gobierno en el primer día de debate de las enmiendas que pretenden tumbar los Presupuestos sin discutirlos. Eso no pasará porque hoy se recopilarán más votos de rechazo que a favor de las siete enmiendas presentadas por otros tantos grupos.

La expectación del Ejecutivo estaba puesta en varios frentes, muy singularmente en el de PP y Vox. No fue el discurso de Pablo Casado, presidente del PP, de los que más incursiones ha hecho en temas al margen de los Presupuestos. Casado atacó a los Presupuestos: son “papel mojado”, “nacen muertos”, “son falsos”. Todas las descalificaciones clásicas del primer partido de la oposición, con el corolario de que las Cuentas “son el canto del cisne” de este Gobierno. En las bancadas socialistas se susurraba que será un canto largo, de algo más de dos años. La oportunidad de responder “a la derecha y a la ultraderecha” se la dio a Montero el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, con un discurso en el que desbordó las Cuentas para pintar una España destruida por un Gobierno que pronto caerá, en coincidencia con el argumentario del PP. ¿Con este partido es con el que va a pactar el PP para gobernar? La pregunta de la ministra con la mirada puesta en el presidente popular, le sirvió para cumplir el objetivo permanente del Gobierno de airear que o están ellos en Moncloa o el PP y Vox, tanto en las elecciones generales como en 13 comunidades autónomas, sin olvidar Andalucía. Esta previsión molesta rotundamente a la dirección del PP, aunque sea muy real.

No le vale, sin embargo, a los independentistas de JxC el recurso del Gobierno de “que viene el lobo”, como espetó su portavoz, Míriam Nogueras, a la titular de Hacienda: siendo el lobo la conjunción de PP y Vox. No solo fue contra el Gobierno sino contra ERC y PDeCAT. A cuento de qué no echan atrás estos presupuestos de forma inmediata. Los escindidos del grupo, el PDeCAT, defienden hoy su posición de pelear por Cataluña con enmiendas mientras que “otros” se inhiben. Nada de tratos con este gobierno que practica “un falso diálogo”, según Nogueras. Ese diálogo en el que está ERC, con el que gobierna en Cataluña. En lo nuevo de la política sobresalen las coaliciones y la mala relación entre sus miembros.