Los barones del PP celebran la “vuelta al centro” y dudan si Díaz Ayuso se unirá al viaje

El PP está en paz. El discurso de Pablo Casado este martes ante el comité ejecutivo nacional fue muy celebrado por los barones, que creen que esta vez no hay vuelta atrás. El líder popular fue duro con el Gobierno, para escenificar que una cosa es romper con Vox en la moción de censura y otra dar tregua a Pedro Sánchez y llamó a los suyos a “ocupar el centro” casi como si el partido estuviera ya en campaña electoral. Solo preocupa que Isabel Díaz Ayuso empañe la nueva línea moderada y la imagen de gestión.

Nadie pidió la palabra después de la intervención de Pablo Casado durante el comité ejecutivo nacional. Los barones del PP están satisfechos con el giro del líder hacia el centro —palabra que repitió 24 veces durante su discurso— y creen que solo alguien puede aguar la fiesta de la moderación: Isabel Díaz Ayuso. “Ya habíamos oído otros discursos de centro, pero el de hoy [por este martes] consolida la tendencia. Casado rompió con Vox en la moción de censura, se abstuvo luego en el estado de alarma e insiste ahora en la apuesta por el centro”, afirma un presidente regional del PP. “Lo único que falta es incidir más en la economía y la gestión. Y lo único que lo estropea es Isabel Díaz Ayuso, que parece autónoma, quizá porque quiere desprenderse de la imagen de chica de Casado”, añade.

“No sé lo que hará Ayuso, pero este es el camino”, declara a EL PAÍS otro barón autonómico del PP tras escuchar el discurso del líder en el comité ejecutivo nacional, llamando a todos los dirigentes a “ocupar el centro”. “Me parece muy positivo recuperar el PP de centro, de las mayorías, un partido amplio y abierto y parece una decisión firme”, añade. “El discurso ha sido magnífico. Este es el camino. Concordia y convivencia frente a guerracivilismo y polarización”, insiste otro barón popular, que opina que la presidenta madrileña “ha modulado su posición” en los últimos días.

Otra dirigente regional del PP celebra que Casado haya “recalcado el centrismo y no se haya centrado tanto en Vox”. “Creo que no hay que obsesionarse con ellos”, añade. Un miembro de la dirección señala que el nuevo discurso abre un nuevo granero de votos y les aleja del “populismo trumpista” de Abascal. Están convencidos de que su rival por la derecha terminará desinflándose, como le ocurrió a Cs, y que las encuestas mostrarán pronto que recortan distancias con el PSOE.

Casado se dirigía este martes al comité ejecutivo nacional por primera vez desde su celebrado discurso en el que rompió con Santiago Abascal —“hasta aquí hemos llegado”—. Lo hizo con un discurso casi de precampaña, arengando al partido a “ocupar el centro” y escenificando con múltiples críticas al Gobierno que la censura a Abascal en la moción de censura y su abstención en la votación del estado de alarma no significan en ningún caso que el PP vaya a dar una tregua a Pedro Sánchez. “El Gobierno quiere permanecer en la excepción constitucional con un estado de alarma con piloto automático de seis meses. Es como si un bombero abriera la manguera y se marchara del incendio. Tenemos un presidente a la fuga”, dijo, tras calificar el proyecto de Cuentas del Ejecutivo como unos “presupuestos suicidas”.

El líder del PP animó a los máximos dirigentes del partido a reconquistar el centro. “Nuestro espacio electoral no es una pequeña parte de una supuesta derecha partida por tres. Nuestro espacio electoral es la hegemonía del inmenso espacio del centro reformista español”. “Lo que quiero”, añadió, “es que el Partido Popular lidere la vuelta al centro de la política española. Y al hablar de centro no hablamos solo de un espacio electoral, sino social. Hablamos de actitudes, de comportamientos, de una forma de practicar la política, de tratar a los demás”.

Casado anunció que a partir de ahora, en la medida en que lo permita el coronavirus, saldrá “a la calle” para reunirse con distintos sectores. Este miércoles será con la enfermería; el jueves, con la escuela concertada; y el viernes, en Soria, con las asociaciones contra la despoblación. También avanzó que, de aquí a Navidad, el PP llevará al Congreso varias propuestas legislativas, entre ellas, la ley de Concordia, un proyecto pensado como alternativa a la ley de memoria democrática que el líder del PP encargó hace un año a Adolfo Suárez Illana; la que llamó ley de la Gran Sociedad para el ámbito social y familiar; una propuesta educativa alternativa y el plan b jurídico al estado de alarma.

Críticas a “los cachorros del bloque de la rutpura”

Durante su intervención, Casado se refirió a los disturbios del los últimos días en varias ciudades españolas. “Es lamentable que haya fuerzas políticas que justifiquen este vandalismo buscando una polarización cainita para el conjunto de España. Esta situación sanitaria, económica y social está siendo aprovechada por los radicales de izquierda y de derecha, los cachorros del bloque de la ruptura, para causar disturbios y violencia callejera que condenamos categóricamente”, dijo, refiriéndose, según aclararon fuentes del PP, a Vox y a Podemos.

El partido de Santiago Abascal ordenó a los suyos mediante una comunicación interna que borraran los mensajes que habían escrito en redes sociales sobre los altercados y que no se ajustasen a la posición oficial, en la que el partido trata de desvincularse de los violentos. La cuenta del partido en La Rioja había escrito por ejemplo uno con la imagen de los disturbios y la frase “España en conflicto por un Gobierno criminal”. Vox Estepona borró otro tuit en el que se leía: “Gamonal Burgos. Ahora mismo cientos de ciudadanos salen a defender el pan de sus familias contra el cierre ilegal de sus negocios”.

Por parte de Podemos, el vicepresidente Pablo Iglesias y el portavoz en el Congreso, Pablo Echenique, han vinculado los disturbios a grupos de “ultraderecha”