España trabaja en un nuevo convenio de repatriación con Túnez

El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, se ha reunido este viernes con su homólogo tunecino, Tofik Chaferddine, y con el primer ministro del país norafricano, Hichem Mechichi. “Estamos trabajando en establecer un convenio para los retornos como el que tenemos con otros países (africanos) a corto plazo”, ha asegurado el ministro. En la agenda figuraba, de forma destacada, la devolución de hasta 700 tunecinos con orden de expulsión y atrapados en Melilla desde 2019 que Túnez ha rechazado hasta ahora.

A diferencia de Marruecos, Argelia o Mauritania, Túnez no tiene tratado de repatriación con España, como sí tiene con Italia y que avala devoluciones masivas y periódicas. Se trata de una medida muy criticada desde sectores sociales en Túnez que han llegado a acusar a los sucesivos gobiernos desde 2011 de ceder a las presiones europeas en materia migratoria y en contra de los intereses del país.

“También se puede materializar (la repatriación) sin necesidad de un convenio formalizado”, ha indicado Grande-Marlaska tras el encuentro, “pero evidentemente tener un marco jurídico adecuado es mucho más satisfactorio”. Hasta mediados del año pasado, el papel de Túnez era secundario en la gestión de los flujos migratorios hacia España, pero Melilla se ha convertido en una puerta de entrada para los nacionales de ese país. En 2019, hasta 3.500 tunecinos salieron del país, de los que en torno a 1.300 fallecieron, según datos de la agencia estadística tunecina. Más de 1.200 llegaron a España, casi todos a través de Marruecos hasta Melilla.

En la visita, el titular de Interior ha puesto encima de la mesa la apertura de “canales de migración regular y ordenada” como factor necesario de la “dimensión exterior” de la gestión de flujos migratorios. También ha destacado la lucha contra el terrorismo internacional y las redes de tráfico de personas como foco prioritario de las relaciones entre España y Túnez y ha recordado que la Unión Europea ya financia y trabaja junto al país en ambos aspectos.

España ha avanzado tímidamente en las ayudas a la logística del país, muy consolidadas ya con otros socios africanos. Por primera vez, España ha incluído a Túnez en una subvención para la compra de material policial por valor de 1,5 millones de euros a siete países del continente; Roma y la comisaria europea de Seguridad Interior, Ylva Johanson, ya han negociado 6,5 y 10 millones, respectivamente, para reactivar las repatriaciones desde Italia tras la pandemia.